Nueva Vida, Viejos Demonios CHAÍNSAW MAN

DE COMPRAS

Denji había dejado a Nayuta en la escuela, la miró hasta que desapareció por las puertas y luego regresó a casa. A medida que caminaba, pensaba en las cosas que tenía que hacer. El día parecía bastante normal, al menos por ahora. Sin embargo, pronto se dio cuenta de que necesitaba comprar más comida. Con Reze y Makima en la casa, las provisiones se agotaban rápidamente, y además estaban los perros y Nyako, el gato de Power. No podía dejarlas solas por mucho tiempo, así que decidió llevarlas consigo al supermercado.

Denji entró en la casa y se encontró con Reze en la sala, vestida con la ropa que le había dado. Makima estaba cerca, con una camiseta rosa y unos jeans cortos, pero aún llevaba la manta por encima. Denji sabía que no podía dejar que salieran así, especialmente porque Makima había sido una figura pública. No quería que la reconocieran y causara problemas.

Denji: Dirigiéndose a Makima mientras busca unas gafas de sol Makima, necesitas usar esto para salir. No quiero que te reconozcan. Estás demasiado... visible. Le entrega las gafas de sol y deshace su trenza para que su cabello caiga libremente Esto debería ayudarte a pasar desapercibida.

Makima asintió y se puso las gafas de sol, aunque todavía parecía algo perdida. Reze observó la interacción, pero no dijo nada, solo esperó a que Denji les indicara qué hacer. Denji fue a buscar las correas para sacar a los perros, asegurándose de que estuvieran bien antes de salir. También tomó un poco de comida para Nyako, el gato de Power, para asegurarse de que no se quedara sin provisiones.

Denji: Hablando mientras coloca las correas a los perros Vamos al supermercado. No hagan nada extraño, ¿de acuerdo? Solo quiero comprar comida y volver a casa. Nada de problemas.

Reze: Con tono relajado, pero curioso Entendido, Denji. No haremos nada extraño. ¿Necesitas ayuda con algo más?

Denji pensó por un momento, pero decidió que sería mejor tenerlas cerca para asegurarse de que todo estuviera bajo control. No quería dejar nada al azar.

Denji: Con tono serio pero amable Solo manténganse cerca y no llamen la atención. Vamos a comprar comida y volveremos. No es complicado, pero necesito que sigan las reglas.

Makima y Reze asintieron, siguiendo a Denji mientras salían de la casa con los perros. La calle estaba tranquila, pero Denji siempre tenía un ojo atento a su alrededor, por si acaso. Con Makima y Reze, nada era simple. Sin embargo, mientras caminaban hacia el supermercado, intentó mantener las cosas lo más normales posible.

Denji: Hablando mientras caminan Primero vamos a dejar la comida para Nyako, luego al supermercado. No se alejen demasiado, y si alguien pregunta algo, solo sigan la corriente. No quiero llamar la atención.

El recorrido parecía normal, pero Denji sabía que con estas dos a su lado, cualquier cosa podía suceder. A medida que avanzaban por las calles, pensaba en cómo mantener la paz mientras cumplía con sus tareas diarias. A veces, solo quería una vida tranquila, pero con Makima y Reze en su vida, sabía que tendría que trabajar más duro para mantener el equilibrio.

Denji llegó al centro comercial con Reze y Makima a su lado, cada una con gafas de sol y atuendos que las hacían pasar desapercibidas. El ambiente era bullicioso, con gente entrando y saliendo de las tiendas, pero Denji intentaba mantener la calma. Sabía que no podía permitirse ningún problema mientras estuvieran aquí. Primero, llevó a los perros a la zona para animales, donde podían quedarse mientras él hacía las compras.

Una vez que dejó a los perros, se dirigió a la tienda de ropa para comprar el traje de baño para Nayuta. Sus clases de natación estaban por comenzar, y Denji quería asegurarse de que tuviera todo lo que necesitaba. Al entrar en la tienda, buscó la sección de trajes de baño para niñas, eligiendo algunos estilos que le parecieron apropiados. Sin embargo, no estaba seguro de qué tamaño sería el correcto, así que tomó un par de opciones por si acaso.