Were are you?

Día 2

el día de ayer había sido mas normal, cuando de fue Jennie Tae y yo nos quedamos viendo tele juntos y prepare la cena para ambos, quise dormir en la sala pero tae evito eso demasiado, sonreí cuando me di cuenta que tae era mas sensible durante su celo, además el era muy tierno. 

el día de hoy me levante temprano ya que tenía que hacer el desayuno para ambos, estaba preparando el desayuno  cuando escuche un golpe fuerte en la habitación por lo que rápido apague la estufa y corrí al cuarto, abrí algo asustado y mas miedo me dio cuando vi que tae estaba en el piso llorando, por lo que rápido me agache a su altura y el solo se abrazó a mi restregandose en mi buscando mas tacto, por instinto solté algunas feromonas para que el se calmara y eso funciono muy bien.

-Pequeño, ¿Estas bien?¿te lastimaste?

y el solo negó separandose un poco de mi, lo revise y después de confirmar que era verdad lo levante pero estaba muy débil para mantenerse parado, por lo que lo lleve al comedor para yo terminar de hacer el desayuno y asi fue lo deje sentado y mientras el me observaba yo prepare el desayuno y un jugo de naranja en el cual puse los supresores de tae, tome el desayuno y lo puse enfrente de el el suyo y el mío en la silla de al lado. 

-No no no, aquí- indico su lugar y no entendí al inicio pero después sonreí al entender que lo que el quería era que me sentara en su lugar para el sentarse en mis piernas y así fue

desayunamos y todo estaba bien, lave los trastes y me senté con tae en la sala viendo la televisión, tae estaba sentado en mi regaso recostado en mi pecho y de vez en cuando el me daba besos, caricias o me pedía mimos. 

mientras veía una de mis peliculas favoritas tenia a tae recostado en mi pecho mientras yo acariciaba su espalda dejando de vez en cuando besos en su cabeza, cuando sentí que tae comenzó a moverse un poco en mi regaso a lo que yo me tense un poco lo tome de la cintura deteniendo sus movimientos. 

-Tae para por favor...

el no me hizo caso y volvió a mover su cadera rozando así nuestras intimidades quise evitar que sus movimientos siguieran y pero el no paraba, estaba cayendo ante el y aunque mi lado de coordura me decía que esto no estaba bien ya poco me importaba, necesitaba a tae y sabía que el también me necesitaba.

sentí como comenzó a dar besos en mi cuello provocando así que mi erección creciera demasiado, y el lo noto por lo que comenzó a soltar gemidos un poco agudos, me tense cuando el comenzó a saltar un poco en mi regaso y lo sostuve firmemente, lo detuve y cargue dirigiendonos a la habitación, lo recosté con mucho cuidado en la cama y quite su camisa dejando su grandioso torso al descubierto para comenzar a dejar besos en su torso y al llegar a sus pechos comencé a jugar con sus pezones y dejando marcas en estos, continué mi camino de besos bajando su pantalón y su boxer, dejando así al descubierto su miembro erecto y sonreí tomando este en mis manos, el solo era un mar de gemidos, veía como sus manos estaban sosteniendo las sabanas con mucha fuerza a lo que sonreí al saber que solo yo lo tenía así, comencé a hacerle un oral mientras el solo gemía mi nombre, mi miembro dolía pero seguía con mi voz de cordura por lo que opte por solo hacer un oral. 

cuando tae llego a su climax y se corrió en mi boca me di cuenta de su sabor tan exquisito y único, lo amaba y adoraba todo de el, era increible tenerlo teniendo espasmos después del orgasmo que este había tenido, al parecer el deseaba llegar a mas y aunque yo así lo quisiera me contuve lo mas que pude y solo lo levante en mis brazos y lo lleve a la bañera para darle un baño, lo cual fue lo  mas dificil del mundo ya que no quería bañarse.

-Tae tienes que bañarte

-No, no quiero 

-Tae, es necesario puedes enfermar si no te baño