57

41 1 0
                                    

— ¡SOPRESA!

Ahí estaban Sadie, Harrison, Sam, Harry, Paddy, mi tia y su novio

— ¡Dios mío! Que linda sorpresa

— ¡Hijita! Pero que lindas bebés

— Gracias tía, son Emma y Megan

— ¡Que lindas! —volteo y agarro del brazo de la persona que tenía a su lado— Él es Stan, mi novio

— Un gusto y él es mi novio Tom —se lo presente porque tampoco se conocían

— Un gusto Stan —se dieron la mano

— ¡Liv! ¡Bebés! —grito el pequeño detrás de ellos

— ¡Pad! Si, ellas son las bebés con las que tanto hablabas

— ¡Que lindas! Son como pequeñas hermanitas

— Si verdad

— Tom, no te ofendas pero se parecen a Liv

— Yo sé que no es así —y Emma se rió en los brazos de él

— ¿Cuál es cual?

— Mira, hermano. Ella, la que tiene el lunar, es Megan y ella, la de los ojitos más grandes, es Emma

— Voy a tener que memorizar eso

— Pad, ven hijo, deja que sigan viendo la sorpresa

— ¡Bueno! muchos saludos. Yo quiero cargar a estás bebés por fin

— Anda con la Tía Sadie mi amor —le dije a Megan y se la di a mi prima con mucho cuidado

Lo bueno es que mis hijas son tan tranquilas que no lloran cuando alguien más se acerca o las carga mientras esten cómodas

— Mira, amor. Son lindas, tengamos una así —le dijo a Harrison como si le hiciera tantísima ilusión

— Mejor nos esperamos —nos reímos todos

— Bueno pero pasen y miren la sorpresa para ustedes

Y era cierto, estaba sorprendida.

La puerta corrediza hacia el patio estaba tapada por una cortina blanca y en ella habían unos globos y decían "BIENVENIDAS A SU NUEVA CASA. EMMA Y MEGAN"

Tenía tantas ganas de llorar de la emoción

Habían muchos globos rosados y morados

Una mesa con bocaditos y muchos regalos que no eran necesarios pero ahí estaban

— ¡Dios! Chicas no se hubieran molestado en eso

— No es una molestia, hija. Todo es por y para ustedes

— Gracias, gracias y gracias

— Deja de agradecer amor. Yo también ayude a planearlo

— Gracias Tom, en serio eres el mejor

Nos abrazamos y luego todos se unieron a ese abrazo

— No quiero llorar —dije entre risas

— Está bien entonces que les parece si ¡Abrimos los regalos!

— ¡Si!

Cargue a Megan y fui a sentarme a el sillón y Tom vino a mi lado junto a Emma

— ¡Empiecen con este! —dijo mi prima muy emocionada

Supuse que era su regalo así que lo abrí muy rápido

Era una zona de recreación con muchos colgantes, era grande y acolchonada para que las niñas estuvieran cómodas. Me encantó que pensara en eso porque yo lo había olvidado por completo. Aunque aún tendríamos que esperan un par de meses para que lo usen, estaba hermoso

somos hermanastros (EN PROCESO Y EDICIÓN) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora