Capítulo 6

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La semana había pasado volando y ya era sábado. Se encontraban con sus amigos estudiando en la cafetería, como era de costumbre. Tanto Jimin como Yoon-gi le preguntaban a Nam-joon todo lo que no entendían del tema; les gustaba estudiar en compañía de amigos, lo que les quitaba un peso de encima y resultaba divertido. Sin embargo, Hye-yoon ya no acudía a las reuniones debido a su trabajo. Aunque le dolía, entendía la decisión de su amiga.

Otras cosas que habían ocurrido durante la semana era que Yoon-gi había estado saliendo después de la escuela con la pareja de amigos de Jungkook. Al parecer, había bastante química entre los tres, y le alegraba ver una nueva faceta tierna y seductora de su amigo. En cuanto a Nam-joon, él lo había tranquilizado, asegurándole que Hye-yoon y Wooseok se veían cada día más enamorados, y que no tenía por qué preocuparse por su amiga. Además, le había ayudado a Nam-joon a darle unos consejos sobre cómo cortejar a una chica. Nam-joon le había confesado que le gustaba una chica en donde trabajaba, pero no sabía cómo acercarse a ella, ya que ella era del mundo del entretenimiento y le daba vergüenza. Jimin lo motivó a que se atreviera a hablarle ya que no perdería nada al hacerlo.

Por último estaba Jungkook, el ratero de sus suspiros y latidos, aunque quisiera negarlo era inevitable. Porque cada vez que pasaba compartiendo tiempo con él dejaba una gran marca en su mente y corazón, y ahora más que nada cuando toda la semana su casillero aparecía con una rosa y una nota deseándoles que tuviera un gran día, sin poder contenerlo sus mejillas se teñían de rojo.

Jungkook estaba entrando en lo más profundo de su corazón para sanarlo y brindarle ese amor que siempre estuvo esperando.

Aunque había otro lado, una parte de su mente se repetía constantemente que no era correcto pensar en Jungkook como algo más. Él era su amigo, y desde el primer momento se lo dejó claro. Tendría que reprimir esos sentimientos y dejar de pensar en algo que obviamente no se cumpliría.

Mientras tanto, en la cafetería, Jimin se sumergía en sus estudios.

— Nam-joon, ¿cómo lograron entrar al mercado estadounidense? —preguntó Jimin mientras anotaba algunas preguntas y dudas respecto al libro que estaba leyendo.

Nam-joon respondió con calma:

— Bueno, empezamos a conseguir más presentaciones en la televisión estadounidense. Además, los álbumes que vende la empresa tienen mucho contenido de los cantantes. Hacer también presentaciones o tiendas con dinámicas nos ayudó a llegar a más público. Incluso hay un grupo en la empresa que hizo una caricatura para la parte pequeña del fandom.

— ¿En serio? ¿Qué grupo tiene una caricatura? —preguntó Yoon-gi con asombro.

— Se llaman Bangtan Sonyeondan, la caricatura se llama BT21 —respondió Nam-joon mientras buscaba en su celular para mostrarles al grupo.

— ¡Increíble! Muy buena estrategia —comentó Jimin asombrado—. Me gusta el conejo rosa.

— A mí me encanta la ovejita y el que tiene forma de corazón. Son diseños lindos y únicos —añadió Yoon-gi.

— Bueno, a mí me gusta mucho el koala —señaló al koala azul.

— De hecho, se parecen bastante —comentó Yoon-gi con gracia, mientras Jimin se soltaba a reír.

— Es cierto, para qué te miento. Yo también lo he notado, además me di cuenta de que ambos tenemos hoyuelos —sonrió mostrándolos.

— Son unos hoyuelos muy sexys —Yoon-gi empezó a tocar uno de sus hoyuelos—. Tú podrías ser mi chico ideal, lástima que seas hetero.

Jimin empezó a carcajear al ver la reacción de Nam-joon, quien estaba todo sonrojado mientras Yoon-gi acariciaba su mejilla.

— Supongo que gracias, ¿Por el cumplido u ofensa? —Yoon-gi no pudo soportar la risa.

Beautiful star ᵃᵘ ᵏᵐDonde viven las historias. Descúbrelo ahora