Satoru debe vivir (Sugusato/Satosugu)

Parte 9

(｡╯︵╰｡) Estos días fueron duros para los que creímos que Gojo volvería.

La reunión con el representante de la asociación de Vasijas del Tiempo resultó ser bastante tediosa para Toji. A pesar de que había pasado más de un año, seguían lamentándose por la misión fallida del recipiente de plasma estelar. Sin embargo, no habían dejado de recurrir a Toji para misiones de recolección de artefactos malditos. Todo gracias a un alto cargo dentro de la asociación que empezó a interesar en Suguru Geto tras el primer informe de Fushiguro.

-Está bien, el pago se realizará hoy. Aquí tienes la información sobre nuestro próximo objetivo. Esperamos buenas noticias de tu parte. Puedes irte- dijo el representante, dando por terminada la reunión.

Con el dinero depositado en su cuenta, Toji salió satisfecho del templo. Ese dinero le serviría para pasar el tiempo hasta que recibiera el pago por su hijo. Todo parecía ir bien. Quizás debería hacer una visita a su pequeña mina de oro.

-¡Hola! Hace mucho que no nos vemos.

-... ¿De verdad? – Toji lo miró con sorpresa. Había planeado encontrarse con el chico de pelo oscuro, no con el del clan Gojo.

-Sí, vine a hacerte unas preguntas antes de deshacerme de ti, así que coopera si no quieres que esto sea vergonzoso para ti.

-¿Vergonzoso? Escucha, no responderé ni una sola pregunta tuya mocoso, así que comienza de una vez - Sacó su lanza celestial invertida del interior de su maldición almacenadora.

Gojo empezó a reírse frenéticamente- ¿En serio? Bien, así sea.

Toji avanzó rápidamente hacia Gojo, quien esquivó sus ataques con facilidad usando su ritual maldito para flotar y devolver los golpes. La velocidad de Toji no era broma, y si fuera cualquier otro, estaría en problemas. Pero a Gojo no le importaba en lo más mínimo.

-Comencemos. Primera pregunta: ¿Cuál es tu relación con Suguru?

La expresión de Toji cambió a una mueca divertida. ¿Todo esto por el chico de pelo oscuro? Estuvo a punto de reír, pero un destello azul casi rozó su brazo. Con gran habilidad, esquivó y lanzó un extremo de su lanza hacia la cabeza de su oponente.

-No responderás, ¿verdad? Bien, segunda pregunta: ¿Dónde está Suguru?

Con eso, Toji supo que su presa había escapado de la escuela. Qué molestia, ahora tendría que ir a buscarlo o los ancianos de la secta no dejarían de quejarse. Gojo no necesitó usar sus seis ojos para darse cuenta de que el tipo frente a él no sabía nada, o al menos, no diría nada. Esto era una pérdida de tiempo.

・。。・゜゜・。。・

-Maldito monstruo. - Toji se sacudió los escombros y empezó a estirar los músculos de sus brazos. Dolían; la onda de choque de Rojo era más fuerte que la última vez. Aun así, no se desesperó. Conocía bien a Azul y Rojo. Mientras mantuviera la distancia adecuada, podía repeler los ataques y acabar con ese chico.

Tengo un mal presentimiento.

Gojo sonrió vacíamente mientras flotaba en el aire y sus manos realizaban un ritual del que Toji Fushiguro no tenía más información que el nombre.

"Lo siento, Suguru. En este momento, no estoy enojado contigo. Simplemente me siento muy cómodo en este mundo".

-Todos son arrogantes. Púrpura.