Capítulo IX

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Ya habían pasado varios días desde la aparición del otro barco. Algunos tripulantes comentaron la situación con su capitán. Estaban molestos y deseaban romperles las piernas a Oliver.

Barbanegra al enterarse lanzó un cuchillo hacia la pared con furia. Sentía que ese chico se reía de él en su cara.

Tras aquello, salió en busca del pelirrojo. No iba a aguantar espías en su propio barco.

Por otra parte, Oliver estaba terminando de poner en una pequeña bandeja el último trozo de pan que había en el barco. Hizo su ritual de todos los días y bajó las escaleras con una suave sonrisa.

- Holaa, ya he vuelto. Siento no haber podido venir en estos dos días. Me tenían en la mira de... - Al terminar de bajar los escalones el hombre que estaba tumbado en la cama le tiró una botella vacía, a lo que este reaccionó rápidamente y se apartó antes de que le diera-. ¡¿PERO QUÉ COJONES HACES?!

Izzy estaba completamente borracho mirándole con el ceño fruncido.

- Debería de haberte dado.

El chico no entendió lo que estaba pasando y fue rápidamente hacia él.

- ¿Se puede saber que cojones te pasa? ¿Cuánto has bebido? - Dejó la bandeja en la mesa mirándole con preocupación-.

- ¿Ahora te preocupas por mí? - Rió a lo que el chico frunció el ceño molesto-. Te estuve esperando como siempre me decías pero te olvidaste de mí. Sabía que debía seguir mi intuición. - Apoyó la cabeza en la almohada-.

- ¿Disculpa? He estado en el punto de mira de todos los del barco porque me raptaron y no me hicieron ningún...

- Apuesto a que le comiste la polla al que lo hizo. Tienes cara de que te gusta hacer esas cosas, por eso sigues vivo, ¿verdad? - Le sonrió y dio un pequeño bote a causa del hipo que tenía-. Seguro que eres igual de vicioso que tu madre. Así se ganaba la vida, ¿no?

- Mira, estás borracho, demasiado, no pienso discutir con gente bebida. Es mi regla número 4. - Comentó agarrando el pan y se lo dio-. Cómetelo y duerme.

El hombre le dio un fuerte manotazo en la mano haciendo que el pan cayese al suelo.

- Joder Izzy. - Frunció el ceño agarrándolo con rapidez-. Cómete el pan de una puta vez. - Se lo volvió a acercar-.

- Déjame solo. No necesito a un niñato come pollas que me cuide. Ugh, por eso tu madre se suicidó, ¿verdad? Por no querer aguantarte.

El chico se quedó en silencio mirándole. Aquellas palabras le habían roto por dentro. Ya tenía casi todo en contra, no necesitaba escuchar más mierda de parte de otras personas.

- Mi madre no se suicidó, la asesinaron por venganza a unos trapos sucios de mi padre. - Dijo tratando de mantenerse fuerte-. Y siempre he estado cuidándote. Aunque no te conocía de nada intenté estar a tu lado para que pudieras salir adelante después de toda la mierda que te ha hecho Barbanegra. - Apretó su puño con fuerza-. Llevo sin comer casi dos semanas por darte la puta comida a ti, ¿y así me lo agradeces? - Caminó hacia las escaleras-. ¿Sabes? Dicen que los borrachos y los niños siempre dicen la verdad, así que ya sé lo que piensas de mí. -Se giró para mirarlo de nuevo antes de irse-. No te preocupes que no volveré a pasar por aquí, espero que te termines de mejorar.

Volvió a subir las escaleras con mucha rabia acumulada. Salió de la habitación y cerró la puerta con fuerza mientras suspiraba apretando sus puños para calmarse.

Una mirada intimidante le puso los pelos de punta. Cuando se giró se sorprendió.

- Capitán... ¿Ha sucedido algo? - Preguntó ligeramente nervioso al verlo-.

- Eso debería preguntártelo yo a ti, Oliver. - Su voz sonaba seria y fría. Con paso lento se acercó a él-.

- ¿A mi? No, no ha pasado nada. - Dijo mirándolo. Su cuerpo estaba en alerta por la forma en la que el hombre se acercaba hacia él.-

Barbanegra dio una suave sonrisa irónica, colocó su mano encima de la puerta mientras fijaba sus ojos en los del más pequeño con odio.

- ¿Por qué has bajado ahí? Izzy se mató hace tiempo... ¿Acaso no te acuerdas?

- Es... Tenía cosas que... - Intentó decir pero fue cortado por el contrario.-

- Aunque ahora que lo pienso... No huele a podrido, ¿es que acaso sigue vivo? - Se acercó un poco más a él.-

El pelirrojo tragó saliva, sus ojos azulados le delataban. Edward firmemente agarró el picaporte de la puerta y la abrió un poco con lentitud. Sin embargo, el chico la cerró de golpe.

Las miradas de ambos se cruzaron en una batalla de odio.

- Señor, con todo el respeto que le tengo. Apartase de esa puerta. - La voz del chico sonó con firmeza mientras sus ojos no dejaban de observarlo.-

Ante aquellas palabras, Barbanegra sacó su pistola y le apuntó con ella justo en la frente.

- Muévete o te mato.

Fueron las únicas palabras que soltó su capitán, tanto su mano como su voz no temblaban. Iba a hacerlo.

Oliver frunció el ceño mirándole con fijeza, no iba a apartarse.

El dedo pulgar del hombre se deslizó sobre el arma dejando en claro que si apretaba el gatillo dispararía.

Ninguno de los dos se movió.

La tensión en la sala era más que evidente. Todo quedó en silencio, incluso las olas se callaron.

Un rayo cayó en el mar iluminando toda la habitación y con él se escuchó un disparo.

The New Unicorn [Izzy Hands x Lector]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora