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Capítulo 11
Lamine y yo estábamos sentados hablando de nuestros estudios, resultó que él estudiaba y vivía en La Masia, ni siquiera pensé que La Masia tuviera su propia universidad.
-Está bien, en serio, ¿tienes tu propia universidad?- Dije, sin creerle al Lamine
-Sí, estoy diciendo la verdad- dijo, riéndose de mi reacción.
-¿Y qué estudias ahí?-, pregunté con interés.
-Bueno, tenemos un horario, básicamente similar al de la escuela pero más complicado-dijo Lamine pensando mientras mira al techo
-por suerte lo tendría-recordando todo lo que pasé en mis estudios
-¿Qué estudias?
-psicología en la Universidad de Barcelona
-es muy interesante
-En realidad sí, si no recordando lo que pasamos mentalmente
-Es demasiado difícil ¿verdad?
- Para mí, sí sinceramente, pensé que podría soportarlo, pero de alguna manera ya no puedo soportar esta carga
-¿Por qué no puedes cambiar de especialidad?
-Quería cambiarlo, pero lo pospongo por ahora.
-¿Por qué?
-Tengo miedo de la reacción de mis familiares
-no te harán daño
-Solo los conozco y sé que volverán 10 años recordando que no pude afrontar mis estudios y cambié a una especialidad más sencilla
- QUEE, en general, el periodismo deportivo es muy difícil, conozco a mucha gente que tiene ese trabajo, trabajan muy duro
-¿¿¿Sí??? Tal vez me transfiera, pero ¿de qué sirve si me queda 1 año de estudio?
-Bueno, es más fácil salvar tus nervios si tienes esas emociones
- Bueno, en realidad, lo pensaré
Dije y cambié de tema, porque realmente no quería tocar más este tema, hasta que terminamos nuestra comida y Lamine me sugirió que pidiera postre, porque estaba a dieta y no podía comer eso, pensé. Al respecto y decidí pedir brownie, estaba muy rico. Apenas terminé de comer decidimos ir a caminar al parque que había cerca, pero antes empezamos a discutir un poco por el pago.
-Yo pagaré la cena-dijo la lámine sacando su tarjeta.
-No, puedo pagarme yo mismo-digo objetando, porque no me parece bien, después de todo, esta es nuestra primera cita y no quería que él empezara a pagar por mí ya
-Pero aun así llamé para cenar-, dijo, objetando también, era bastante incómodo discutir porque el camarero estaba a nuestro lado esperando nuestro pago.
-Bueno, no estoy muy cómoda si pagas por mí-, dije mirando a Lamine
-A mí tampoco me convendrá que pagues, después de todo, llamé.
-Honestamente, puedo pagarlo yo mismo.
-Yo también puedo pagar
-Pero estaré incómodo frente a ti-, dije, todavía insistiendo
-Está bien, si te resulta más conveniente, podemos dividir la cuenta-, dijo Lamine, todavía rindiéndose ante mi insistencia
-por fin jajaja- dije riendo un poco y poniendo mi tarjeta en la terminal, Lamine hace lo mismo, después de agradecer y despedirse, salimos del restaurante y caminamos hacia el parque, mientras caminábamos hablábamos de algo sin importancia y bromeábamos. , parecía que ya estábamos acostumbrados el uno al otro y ya podíamos comportarnos más cómodamente. Llegando a un hermoso parque, simplemente caminamos y nos quedamos en silencio, fue bastante incómodo porque había parejas sentadas por todo el parque que simplemente se comían entre sí, así que caminé y miré torpemente el asfalto, sin apenas tocar la mano de Lamine que también caminaba como yo, nuestras manos a veces se tocaban y nos mirábamos con sonrisas, no diré que no me gusta Lamine, eso sería una gran mentira, pero no nos conocemos demasiado bien como para empezar cualquier cosa.
-Es increíblemente hermoso aquí-, dijo Lamine mirando los árboles que crecieron muy hermosos
-Sí, este parque siempre me ha sorprendido-dije mientras miraba los árboles y al final miré al Lamine que también me miraba.
No sé cómo describir esa sensación cuando simplemente nos detuvimos y nos miramos directamente a los ojos, mientras nuestras manos apenas se tocaban, el dedo meñique de Lamine sostenía mi dedo índice mientras nos deteníamos y nos parábamos en medio del parque.
Me paré y miré sus ojos oscuros, mientras ellos también miraban los míos, de vez en cuando sus ojos miraban mis labios, parecía que quería besarme, pero algo lo detenía, la naturaleza a mi alrededor era simplemente maravillosa, la el viento movió el cabello de Lamine por qué se me puso la piel de gallina sin siquiera entender cómo después de unos segundos comenzamos a avanzar el uno hacia el otro, sin notar como sus labios apenas tocaban mis labios, mientras yo sentía su aliento cerca de mi nariz, me acerqué a él en respuesta y toqué completamente sus labios regordetes, aunque no nos conocíamos bien, tuve una sensación extraña.
Nuestros labios comenzaron a moverse a un ritmo lento hasta que sus manos tocaron mi cintura y mis manos tocaron su shen envolviéndola, como Lamine era bastante alto, tuve que ponerme de puntillas un poco ahazaha. Todo a nuestro alrededor parecía perfecto, el clima era bueno y cálido, después de unos minutos nos alejamos torpemente y al mismo tiempo miramos al suelo por la tensión.
-umm, me parece que tenemos demasiada prisa-
gasosasso Dije torpemente y levanté la cabeza hacia el Lamine, quien tenía una pequeña sonrisa en la cara.
-Sí, tenemos un poco de prisa- dijo, quitándose la sonrisa, -pero para ser honesto, me gustó el beso- dijo Lamine riendo un poco.
-Bueno, yo también-dije, alisando un mechón de cabello que caía sobre mis ojos.
-jajajaja, vale entonces, ¿volvamos al auto?
-Sí, vamos-, dije, mirando mi reloj para ver la hora.
Caminamos de regreso a su coche, estaba cerca de la entrada del restaurante, todo estaba muy tranquilo, las calles se quedaron en silencio, aunque esto no es habitual ver esto en Barcelona, ​​​​especialmente un jueves por la noche. Cuando salimos del parque tuvimos que cruzar la calle pero no había un semáforo cerca así que solo tuvimos que cruzar corriendo, lo cual fue bastante inesperado para mí porque mientras corríamos Lamine tomó mi mano entre las suyas, tan pronto como cruzamos me di cuenta de que estábamos tomados de la mano, rápidamente miré al Lamine que actuaba bastante nervioso.Al notar mi mirada, rápidamente me miró y luego a nuestras manos, retiró su mano y habló.
-Oh, lo siento, no me di cuenta- dijo rascándose la cabeza con torpeza.
-Nada ajajaja-, dije riendo nerviosamente mientras nos acercábamos a su auto.
Lamine abrió la puerta principal para que yo pudiera sentarme y le agradecí, comencé a esperar a que se moviera a su lado, apenas se puso al volante me miró y sonrió, puso el auto en marcha y se giró hacia mí.
-¿Te gustaría reproducir una canción?- preguntó, acercando su teléfono ya desbloqueado, donde Spotify ya estaba abierto
-claro, gracias- dije, tomando su teléfono en mis brazos y comenzando a elegir, yo Decidí que quería escuchar una de mis canciones favoritas, "Feid- CHORRITO PA LAS ANIMAS, me encantan todas las canciones de feid, así que la elección era obvia, después de encender la canción, me volví hacia Lamine para darle su teléfono.

Se gritaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora