Un año después del divorcio...
Rouhan anunciaba su matrimonio con el doncel Xiao Zhan, este lucia una pancita de más de siete meses o almenos eso parecía para los expertos en panzologia, no se supone que el Wang había dicho que dejaba al doncel por que este era estéril, que escándalo entonces el estéril era el otro, osea que la dama que ahora presumia su embarazo de cuatro meses, según ella de Wang Yibo, no era verdad quien estaba mintiendo.
La prensa se dio vida con la noticia, las redes sociales estallaron en chisme, los Wang perdieron credibilidad y Hai Kuan ahora comprobaba que ese zorro de Wen Rouhan lo había planeado todo para vengarse de su jefe, los Wang pasaban por una etapa crítica de su vida social, mientras los contrarios se reían de los acontecimientos, Xiao no estaba en cinta, usaba una panza falsa pero los Wang no podían desmentir lo que el aseveraba el doncel.
Por que entonces tendrían que admitir que la matriz de Zhan había sido extraída por los médicos para salvar su vida, el día que perdió a su bebé, un bebé que era también hijo de Yibo, por donde quiera que se le viera, los Wang solo podían quedarse callados y no dar ninguna explicación, ni a favor ni en contra del supuesto embarazo, la única solución para Yibo era esperar a que la dama que tenía a su hijo en su vientre, diera a luz para que al realizar las pruebas de paternidad, con eso despejaran un poco las dudas, sobre su supuesta infertilidad.
La boda de Wen Rouhan y Xiao Zhan fue todo un evento de derroche, lujuria y escándalo, el hombre parecía una especie de pulpo mutante, metiendole mano a su dulce bollo relleno por todos lados y delante de quien fuera, el doncel solo se dejaba manosear, babear y amasar por su ahora esposo, no hubo ninguna foto en el que Rouhan no tubiera sus manos en las nalgas, en la panza, en las piernas, en sus cogollos que pronto estarían más llenos para poder alimentar a sus gemelos, siii efectivamente según las malas lenguas el matrimonio esperaba gemelos.
En su casa Yibo trataba de conservar la calma, pero nada de lo que hacía le salía bien últimamente, hasta los proyectos que ya tenía planeados solo para sacarlos al mundo estaban presentando fallas, ya sea administrativos, de diseño o de publicidad, sumándole a si estrés las fotos de la pornografica boda de su ex esposo.
Ese sucio, viejo, pervertido que se la pasó metiendo sus asquerosas manos en el cuerpo del embarazado y para colmo, su padre que no dejaba de jóder con el tema de su matrimonio, el no queria a nadie que no fuera Zhan como su esposo, tenía la esperanza de que un día el Wen hiciera algo que Zhan no tolerará, para poder recuperarlo.
Aun era poco tiempo para tomar a una mujer que llenará su casa de su odiosa presencia, lo de la dama Yangzi había sido un error, el día que la embarazo estaba muy borracho, Haí Kuan le había dicho lo de Rouhan y Zhan, estaba tan asqueado, que solo se le ocurrió ir a un bar a embruteserse, unos meses después la mujer se presentó en su oficina para decirle que estaba preñada y era de el.
Como prueba llevaba un video de ellos dos entrando a un hotel del amor y como el le dio como cajón que no sierra mientras le llamaba por el nombre de su ex esposo, no le quedó de otra más que hacerse responsable de sus impudicos actos, presentó a la mujer como la futura madre de su hijo y después de eso salió la noticia del casamiento de Zhan con el Wen, para colmo de la desfachatez el doncel estaba en cinta.
El sabía perfectamente que Zhan no podía estar en cinta, lógicamente que era mentira pero estaba atado de pies y manos ante esa aseveracion, solo le quedaba que el supuesto niño naciera, para exigir una prueba de paternidad para poder desmentir todo este borlote, pero por ahora no podía más que aceptar las críticas, apretar fuerte y esperar que la prensa se canse, de todo este asunto tan bochornoso.
Mientras Yibo ya no sabía que más hacer para acallar el chismerio, Zhan disfrutaba de la pancita real de su amiga Wen Quing, ella tenía en su vientre a los nuevos Wen, los médicos que le extrajeron la matriz, guardaron en su banco de seguridad algunos óvulos del doncel, para que si en un futuro, los Wang quisieran subrogar un vientre para tener a sus hijos, tubieran uno del amado esposo Xiao Zhan.
Después del divorcio Zhan y su nuevo esposo fueron a reclamar al hospital el material genético, pues los Wang habían declarado que Zhan era estéril y que esa era la razón de haber exigido el divorcio,a los médicos no les quedó más remedio que entregar los óvulos al nuevo matrimonio, para deslindarse de ese problema, no querian a Wen Rouhan desprestigiando su honorable hospital por una insignificante razón.
Después de eso todo fue pan comido, los médicos de la clínica especializada en inseminación artificial de los laboratorios Wenlife, ellos hicieron la magia, la sobrina de Rouhan que casualmente es amiga de la secundaria de Zhan, se había ofrecido para cargar a sus niños, al primer intento el procedimiento dio resultado, no uno cualquiera, sino un embarazo doble.
Rouhan estaba feliz de ver a su chico añorado tan lleno de vida por la dulce espera, pero a ratos lo veía un poco desanimado por no pasar por los síntomas más frecuentes de el embarazo, así que consultando a sus médicos en innovación médica, les pidió que diseñarán un vientre artificial para que su chico pudiera cargar con sus gemelos.
En menos de un mes ya tenían el pedido del hombre, Zhan brinco de felicidad, ese día fue la primera ves que se entrego en cuerpo a ese hombre que a pesar de no ser el amor de su vida,le había dado más felicidad en tan pocos meses, que su único amor en 6 años de matrimonio, Rouhan fue paciente, tierno y delicado, en algunas ocasiones tubo que parar debido a que Zhan comenzaba a llorar por sentir que le estaba fallando a su corazón, en otros momentos dejó que el doncel tomara el control de el acto para no lastimarlo con su ansiosa necesidad, aun así pese a todos los momentos agridulces para el hombre,fue tal como lo había soñado.
Con el paso de los meses la pancita de Zhan era cambiada por una a corde con el tamaño que debía tener por los meses de gestación, también su relación carnal se volvía poco a poco más amorosa, más pasional, más placentera, para cuando anunciaron su boda, ya eran una pareja sexual consolidada, Zhan había cambiado sus hábitos sexuales por uno más atrevidos y extrovertidos.
Era el quien buscaba el contacto con su pareja, disfrutaba de las caricias e incluso en algunas ocasiones se colo en su oficina para mañosearlo en plena reunión mensual, el hombre estaba feliz de tener a su dulce de leche, tan deseoso de imtimar con el, ahora sí sentía que el doncel lo veía como su esposo, como el padre de sus hijos y como su amante.