Omegas Hierarki /KookV/ Jimsu/ Omegaverse

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Yoongi estaba bien.

Bien.

Claro que lo estaba.

Se levantaba en las mañanas con el corazón herido, bebía leche de chocolate con galletas y escuchaba a Jungkook leerle de vez en cuando, Jimin le sonreía, lo cuidaba y lo amaba cada día como si fuera el último.

Sin embargo, se sentía inútil.

Su Lobo estaba débil, desorientado y medio miope.

El medico había estado estupefacto ante lo sucedido y su grata recuperación, fue tan impactante que le realizo tantos estudios que Yoongi podía sentir el frío del hospital en sus huesos, aun cuando estaba en la comodidad de su cama, arropado bajo los brazos de Jimin.

Al final, los estudios no arrojaron nada en particular, simplemente su nervio óptico se había regenerado por sí solo.

El nervio óptico no se regenera.

Cabe destacar que, ante ese impactante descubrimiento, los médicos quisieron, por no decir exigieron, someterlo a pruebas y estudios para poder llevar a cabo una investigación que, según ellos, sería un gran descubrimiento para la medicina.

Claramente, Yoongi se negó y Jimin tomo cartas en el asunto de forma rápida, su Alfa no iba a ser conejillo de indias de nadie y mucho menos sabiendo que su mejoría no tenía nada que ver con su cuerpo, con su salud, si no algo más hippie y espiritual entre lobos.

Su visión no mejoro, pero tampoco empeoro y, a pesar de que odiaba usar esos enormes lentes de pasta dura y gruesos cristales, estaba bien con ello, se sentía feliz de poder tener el privilegio de volver a ver.

Aún tenía que usar el molesto bastón e incluso aprendió más de la ecolocación. Su visión por momentos se iba y quedaba totalmente "ciego" por minutos o horas, por lo que preferían que llevará su bastón a todas partes.

La primera vez que aquello paso, había llorado mares enteros, pero ahora ya no le sorprendía mucho.

Su Lobo era un perezoso.

Con el paso de los días, se comunicó con su lobo y entendió lo que sucedía, su pobre lobo estaba asustado, para poder darle visión a su lado humano, debía renunciar a la visión de su forma de lobo.

Algo extraño, pero Yoongi y el llegaron a un acuerdo que los beneficio a ambos.

No le importaba usar esos lentes horrendos por el resto de su vida con tal de que su lobito no quedará totalmente ciego, el había hecho mucho por él, era una forma de regresarle el favor.

Pero su corazón dolía un poco por no poder ayudar a su familia en momentos de crisis.

Como ahora.

El juicio por las demandas impuestas hacía sus atacantes estaba a la vuelta de la esquina, por lo que estaban algo tensos y se sentían a la deriva, en especial Jungkook, quien había sido citado para testificar en contra de sus tíos.

Aquellas personas que tanto daño le habían causado.

Jungkook estaba nervioso y asustado, eran tantos los conflictos internos que el Alfa tenía, que la Psicóloga tenía que verlo al menos 3 veces a la semana, pues estaba enfrentado muchos nervios y ansiedad.

Nervios que se veían reflejados en el pobre saco de boxeo que ahora parecía un trapo viejo que había pasado por una bomba nuclear o algo así.

Y, por si fuera poco, las cosas estaban algo tensas con el Consejo.

Un tipo de nombre que Jimin no le dijo, había aparecido a los pocos días de que volvieran de su viaje de negocios, y gracias al cielo que Yoongi y Jungkook estaban en su mundo jugueteando en el jardín, pues el tipo había armado un escándalo, argumentando que Taehyung estaba cometiendo un delito al tener un Alfa sin una marca.