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Izuku era un omega diferente, un omega especial, eso era lo que siempre le decía su madre, por un momento de su vida llego a creerle para sentirse mejor pero después de un tiempo volvió a sentirse el peor omega que haya existido.

El sabía que era diferente, quisiera que fuera diferente de buena manera, pero no, lo era de la mala manera.
Izuku poseía un aroma que solamente soportan los omegas.

Los alfas odiaban su aroma, les irritaba lo dulce que llegaba a ser y siempre que podían se lo dejaban claro.

Gracias a su aroma y al odio y repugnancia que le tiraban los alfas, se convirtió en alguien muy cerrado y callado, le costaba hacer amigos y ni hablar de coquetear con alguien.
Con un gran esfuerzo había hecho dos amigos, pero con la gran suerte que tenía su madre fue transferida de su trabajo y tuvo que mudarse y dejar atrás a sus únicos amigos.

Él tenía una beca en una muy buena preparatoria, así que tuvo que hacer un intercambio con un chico para que el estuviese en su lugar, solo pudo conseguir que intercambiarán un semestre pero estaba bien, se las arreglaría después.

Hablando de su vida amorosa, no tenía nada de experiencia hablando amorosamente y románticamente, a sus 16 casi 17 era virgen en todos los aspectos posibles, sabía que ser virgen en "eso" a esa edad estaba bien, pero ser virgen en el aspecto de nisiquiera dar su primer beso seguramente no lo era.

El omega peliverde creía fielmente que nunca encontraría un alfa o siquiera un beta, ya se había resignado a morir solo y sin ser reclamando.

A decir verdad, le daba miedo ser reclamado por alguien.

Izuku Midoriya se tenia un gran odio a si mismo, odiaba su físico, su aroma, su forma de ser, literalmente todo su ser.

Todos los días sin falta se recordaba el asco que daba y lo miserable que era y también que no servía para nada, ni para omega era bueno.

Al estar en su burbuja depresiva y autodesprecio, Izuku no se habia dado cuenta que el Alfa Prime Katsuki Bakugo, él cual amaba secretamente los dulces y aromas empalagosos, especialmente el del lindo y callado chico nuevo llamado Izuku lo tenía en la mira.

• 🍬 •

Izuku apagó su alarma cuando esta empezó a sonar exactamente a las 6 de la mañana.

Se removió un poco en su lugar y empezó a restregar su rostro contra la almohada, al cabo de unos 30 segundos dejó de hacerlo y se levantó con lentitud y se miró fijamente al espejo que tenía frente a su cama y se miró de pies a cabeza.

"Pero mira que feo eres."

"Nunca conseguirás un alfa con ese aroma y ese aspecto."

"Ni un beta te querría."

"Que olor tan repugnante tienes."

"Si sigues así morirás solo."

"Cuando menos te des cuenta
todos y cada uno de los que te
rodean les parecerás un fenómeno."

Sin siquiera haberse podido despertar por completo ya unas lágrimas empezaron a querer salir de los ojos de Izuku, entre más cosas se decía, más dolor sentía en su pecho.

Antes de poder deprimirse más escuchó pasos acercarse hacia su cuarto, con gran rapidez se limpió las lágrimas e intento fingir que acababa de levantarse.

— oh, buenos días Izuku, que bien ya estas despierto. – habló su madre Inko con una gran sonrisa — arréglate ¿si? Baja cuando ya estés listo.

Lindo Chico Inseguro // KatsuDekuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora