Ｓ Ｅ Ｃ Ｒ Ｅ Ｔ Ｓ

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Kate Bishop caminaba por los pasillos oscuros y ornamentados de la Academia Nevermore con su típica actitud relajada y despreocupada. Con una mano en el bolsillo y la otra señalando aquí y allá, se giró para mirar a Ava y Nadine, quienes seguían su recorrido.

—Estoy muy feliz de que al fin estemos las tres reunidas en Nevermore—dijo Kate con una sonrisa—. Este lugar puede parecer un poco intimidante al principio, pero se acostumbrarán.

Señaló una torre gótica que se elevaba a lo lejos.

—Ahí es donde tenemos los combates semanales. Los mejores de cada clase compiten para darle un credito extra a su casa...

—¿Casa? ¿Estamos en el jodido Hogwarts?— La primera que se atrevió a hablar era Nadine con esa rebeldía en su voz que se notaba a kilometros. Su actitud no ayudaba. Era muy cerrada, poco amable y definitivamente sería la ultima a quien le pedirías ayuda

Kate soltó una risa ligera, no ofendida por el comentario de Nadine, pues estaba acostumbrada a su amiga.

—No, Nadine, no estamos en Hogwarts, pero me gusta pensar que tenemos nuestro propio encanto oscuro. Aquí en Nevermore, nos dividimos en casas según nuestras habilidades y linaje. Es una forma de mantener el orden y fomentar la ''competencia sana''. Pero créanme, las competencias aquí no son juegos de niños.

Nadine cruzó los brazos y rodo los ojos, su expresión se suavizó solo un poco. Pues le prometió a Ava intentar adaptarse sin "peros"...

—No dije nada.

Ava, quien había estado observando en silencio, finalmente habló.

—¿Y cómo sabemos a qué casa pertenecemos?

Kate se detuvo frente a una puerta grande y ornamentada.

—Esa es una excelente pregunta. Al ingresar, tendrán una prueba que evaluará sus habilidades y decidirá en qué casa encajan mejor. Es un proceso que todos hemos pasado.

Abrió la puerta y las condujo a un gran salón donde varios estudiantes ya estaban reunidos, cada uno vistiendo el distintivo de su casa. El ambiente estaba cargado de una mezcla de anticipación y rivalidad.

—Ahora, permítanme presentarles a algunos de los estudiantes con los que probablemente cruzarán caminos frecuentemente.

Señaló a una chica de cabello rubio platino y corto, con una expresión seria y analítica.

—Bianca. Es una clase de sirena popular con la habilidad de manipular la mente y es extremadamente fastidiosa con personas que no son su grupo. Así que eviten a toda costa enfrentarse a ella o estar en su contra.

Bianca les lanzó una mirada evaluativa, sin decir una palabra.

A su lado estaba Tyler, con un cuaderno de bocetos en la mano.

—Tyler puede animar sus dibujos. Es bastante impresionante, pero también un poco inquietante. No se sorprendan si ven sus bocetos cobrar vida y moverse por aquí.

Tyler sonrió brevemente y levantó una mano en señal de saludo egocentrico

Kate continuó presentando a cada uno:

—Ajax, nuestro gorgona. Puede petrificar a cualquiera con solo una mirada. Es mejor mantener una distancia segura cuando está enojado.

Ajax hizo un gesto de saludo, sus ojos ocultos tras unas gafas oscuras. Demostrando que había tenido una resaca la noche anterior

—Divina, con su empatía sobrenatural, puede sentir todo lo que estás pensando y sintiendo. Su habilidad es tanto una bendición como una carga.

Divina asintió con una expresión comprensiva.