La voluntad de Eywa

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—¿No te has perdido en el bosque aun?— El eco de su voz resonó por el lugar vacío —Tu último informe fue hace tres semanas— Le informo el coronel Quartich —Empiezo a dudar de tu lealtad cabo, cabo— El coronel tomo asiento junto al ex marine, quien mantenía silencio a pesar del comentario —Es hora de volver a casa, hijo— Su tono paternal y lo preocupado que se oía, le hizo preguntarse a Jake si estaba bien lo que hacia, o lo que sentía

—Voy a terminar con esta misión—No quería irse, sabía que no merecía quedarse en un lugar mágico como Pandora, su alma pecadora debería arder en lo más profundo del infierno por su traición a su propia raza y a los Na'vi

—Ya la terminaste— ¿Que se escuchaba en su voz? Tal vez orgullo por ver al muchacho que tanto protegía finalmente le había mostrado buenos resultados o tal vez alegría de saber que dentro de poco iniciaría una guerra y podría masacrar a todo un pueblo inocente dejando que se notara cinismo —Me diste buena información sobre ese árbol de las almas. Los tendré en mis manos cuando se desate una guerra, que claro que ocurrirá— La manera tan calmada en que nombraba algo tan oscuro como la guerra, haría que cualquiera sintiera temor por su falta de empatía o ganas de golpearlo por lo inmoral que era, en ese momento, Jake trataba de decidir cuál de las dos  sentir. El silencio había comenzado a reinar en el lugar, con Jake estando demasiado indeciso y consumido por la culpa para saber que decir —Por cierto...— Su demoníaca voz corto el hilo de silencio —Recuperaras tus piernas— Un brillo se asomo por los ojos del marine —Si, ya está hecho, soy un hombre de palabra, cabo— Unas palmadas en el brazo bastaron para sacar a Jake de su trance

—Terminare con esto— Su egoísmo por seguir en un planeta que él mismo destruiría, aunque de forma indirecta, era incluso más grande que la voz de su conciencia que le gritaba que no tenía derecho de pisar su tierra, comer su comida, bañarse en sus aguas y mucho menos ver a los ojos a la nativa que le había entregado su confianza —Hay algo más, la ceremonia de iniciación, es el ultimo paso para convertirse en guerrero. Así confiarán en mí— Bien sabía que con la confianza de Neytiri le sobraba, se masacraba a si mismo al saber que la estaba traicionando

[.....]

—No puedo permitir que lo hagas— Grace seguía la silla de ruedas del ex marine, el cual hacia de oídos sordos a todos los comentarios de su hermana y de la científica

—Tengo que hacerlo— Se digno a responder

—Jake, por favor escuchala— Akira se había resignado a que Jake no la escucharía, rara vez lo hacía cuando se trataba de un consejo o un intento de orientación

—Muchos Na'vi mueren en ese ritual— Su intento de meterle miedo a Jake no funcionaba en lo más mínimo, era como si cada palabra que dijera solo lo motivarán a seguir adelante —El veneno del gusano te puede llevar a la muerte en cuestión de segundos— Luego de eso lo único que Jake escucho fueron un montón de frases científicas que no entendía, pero que dejaban mas que claro el peligro que corría —No sabemos como puede afectar ese veneno al avatar

—Siempre dices que la ciencia se trata de lo desconocido

—Jake, no importa lo que pruebes allí, sigues aqui— Agustine apoyo su mano en el hombro de ex marine, tratando de expresar con este acto lo preocupada que estaba —Aun estás aquí— Dijo en una especie de suspiro. Jake acarició la mano en su hombro, tomándose unos breves segundos para reflexionar sobre como había evolucionado su relación con la científica

—Tengo que hacerlo— Volvió a repetir. Grace puso los ojos en blanco ante la terquedad de Jake. Akira veía la escena con los ojos rojos, le dolía ver a su hermano de ese modo, trataba de verse fuerte, pero estaba tan desesperado como ella por sentir que no pertenece a ningún lado —Solo así seré uno de ellos—