En esta ocasión, mis agradecimientos son para Dios, por guiarme en el sendero de la vida con una luz que nunca se extingue. Para la vida, por cada respiración y cada nuevo amanecer que me regala, lleno de posibilidades y nuevas oportunidades para crecer. Y para mí misma, por tener la fortaleza de superar los obstáculos, la valentía de seguir mis sueños y la sabiduría para aprender de cada experiencia. Cada paso que doy es una firma en el lienzo del destino, y hoy más que nunca, estoy agradecida por poder ser la artista de esta historia.
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La Bruja y el Dragón dorado
FantasyEn un reino donde la luna brillaba con un esplendor sin igual, nació una joven bruja, hija de la mismísima deidad lunar. Heredera de un poder ancestral y de una tarea que, antes de ella había sido otorgada a sus hermanas, cada hija de la luna debía...