Cuantas vidas tendrán que pasar para que Gojo Satoru se recomponga del hecho de haberla perdido, de tener nada entre sus manos para poder ayudarla como correspondía, hizo todo lo que estuvo a su alcance pero ella simplemente se perdió internamente y...
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- Tu eres mi jodida debilidad, ____________ - Satoru se acercaba peligrosamente a los labios de la chica, pero antes de que pudiera estar un centímetro más cerca, hizo una pausa. La muchacha lo observaba con el rostro enrojecido sin pronunciar una sola palabra, sin entender muy bien lo que estaba ocurriendo- Si me dejas hacer esto, te juro por mi vida que no te vas a librar nunca más de mí. Ya ni siquiera me importa lo qué decidas...
Ella no dijo nada ante lo que el albino le estaba diciendo. ¿Qué podía hacer? Tenía un torbellino de emociones en su interior, por más que quisiera negarlo sabía perfectamente que Satoru Gojo tenía un poder sobre ella que nadie más tenía, sólo él, verlo enojado, triste, feliz, cualquier tipo de emoción que el chico tuviera tenía control sobre ella, era una conexión única de la cual nunca pudo deshacerse y así como iban pasando las cosas, era muy poco probable que pudiera hacerlo.
-Esto está mal... -susurró la chica- Satoru no podemos hacer esto...
- ¿Eso importa? -Satoru sonrió de medio lado, sus ojos azules brillaban más que nunca. Al ver que la chica ni siquiera hizo el esfuerzo de resistirse, la besó.
La besó con desesperación, sus largos dedos tomaron el rostro de la chica amoldando sus manos perfectamente en ambas mejillas. Estaba pasando, tal vez no de la forma que él hubiera querido, pero estaba ocurriendo.
Sus respiraciones se aceleraban cada segundo que pasaba, el tiempo se detuvo en ese mismo momento, la suavidad de los labios de ambos los hacía atraparse el uno al otro de una forma que ni siquiera podría explicarse con palabras.
Se separaron y miraron a los ojos nuevamente, esta vez con otra perspectiva.
-Debe haber otra forma...
-Satoru, hay un contrato de por medio y yo quiero hacerlo -Lo último lo sorprendió, pero no se iba a dar por vencido-
-Necesito que me acompañes a un lugar -Ella arrugó el entrecejo ante el cambio repentino de tema-
- ¿Qué lugar? -Preguntó-
-Lo entenderás en el camino... por favor... - ¿Se podía resistir a esa mirada infantil? Sabía que era manipulación por parte del peliblanco, pero no podía negarse-
-Ok.
Ambos salieron de la habitación, la chica seguía a Satoru de cerca, en silencio. Al principio ella no entendía el silencio, la expresión de Satoru había cambiado, lo conocía lo suficiente como para saber que esa mirada era de preocupación y nerviosismo, algo le mantenía la mente en conflicto además de todos los problemas convocados por el colegio, esto era diferente y lo podía percibir perfectamente.
A medida que avanzaban por la ciudad, Gojo se desvió prácticamente en un callejón, era un atajo, según él, pero ella no quiso ponerlo en duda y siguió confiando en el peliblanco. De pronto Satoru se detuvo y la muchacha prácticamente impactó en su espalda al percatarse inmediatamente de que el chico se había detenido. Ella se puso justo al lado de él observando lo mismo que Gojo, un niño de unos 6 años de cabellera negra alborotada gritaba algo hacía una ventana, pero a la distancia era inaudible.
Satoru comenzó a caminar en dirección al niño y la muchacha nuevamente arrugó el entrecejo sin entender lo que estaba ocurriendo.
- ¿Eres Fushiguro Megumi? - ¿Fushiguro dijo? La chica vio al peliblanco de reojo y luego al niño que inmediatamente se giró en dirección a ellos para observar a las personas que le hablaban, Satoru arrugó el entrecejo y realizó una expresión de asco al ver al niño-
-Eres igual a él... -pronunció-
- ¿Y ustedes quienes son?
- Tu papá... -pronunció Satoru agachándose un poco a su nivel, pero el niño lo interrumpió-
-No me interesa donde este o lo que esté haciendo, no lo veo hace años y ni siquiera recuerdo su cara -Gojo recobró su postura-
- ¿Qué quieres hacer, niño? ¿Quieres irte con el clan Zenin? -La muchacha observó a Satoru al escuchar sus palabras, así que ese niño era el hijo de Fushiguro Toji-
- ¿Y qué pasaría con Tsumiki? Si ella pudiera ser feliz... -Gojo interrumpió-
-No, ella sería miserable en ese lugar -respondió Gojo a la vez que veía de reojo a su acompañante- Te quedaras con nosotros -Satoru acaricio de forma brusca el cabello del niño que arrugo el entrecejo al sentir el contacto- Tienes que volverte fuerte, así no te abandonaré...
El niño se dio media vuelta y volvió a entrar a una pequeña casucha donde una niña un poco mayor que el lo veía desde la ventana y observaba toda la escena. ____________ se quedó parada en el mismo lugar, su cerebro trataba de unir información ¿Qué tenía que ver el niño con Satoru?
-Debes estar sorprendida -Habló Satoru colocándose frente a la chica, ella seguía sin decir nada- Es el hijo de Toji... -ella lo interrumpió-
-Lo sé -Pronunció-
- ¿Cómo que lo sabes? ¿Ya lo conocías? -Ella negó con la cabeza-
-Sabía que había tenido un hijo, pero pensé que el niño ya estaba con el clan Ze'nin. Investigué un poco.
-Será un hechicero de Tokio, será algo así como un proyecto a largo plazo -pronunció Satoru comenzando a caminar-
- ¿De qué hablas? -Preguntó _________ mientras alcanzaba los pasos de Gojo-
-Es una larga historia... -Suspiró y tomó levemente la mano de la muchacha para darle un pequeño apretón sin soltarla.
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- ¿Dónde diablos estabas Satoru? -Preguntó Suguru inmediatamente al ver a los dos muchachos ingresar al colegio, observó las manos de ambos que al instante se separaron al sentir la mirada penetrante del pelinegro, este decidió ignorar la acción, momentáneamente-
- ¿Qué ocurre? -Preguntó inmediatamente Gojo-
-Amanai sufrió un accidente y no se encuentra bien -Satoru abrió los ojos-
-Mierda -Susurró y ambos se fueron corriendo. La muchacha decidió perseguirlos en el trayecto para averiguar lo que estaba ocurriendo, que Amanai se encuentre mal no es una buena noticia pues es cierto que la fusión se aplazó buscando otro recipiente, ella sigue siendo igual de importante para el colegio de hechicería.
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Buenas noches a todos, sé que a pasado bastante tiempo desde la última vez que actualicé este fic, pero fue con un motivo bastante personal, estuve atravesando por una depresión después de la muerte de un familiar muy querido para mi por eso decidí alejarme, porque no me encontraba bien, actualmente sigo en tratamiento pero mucho mejor, es por eso que tomé la desición de seguir actualizando ya que esto es algo que me hace muy feliz hacer y por sobre todo dejar fluir mi mente con las ideas que tengo, quería mas que nada justificarme por haber estado desaparecida durante tantos meses, agradezco infinitamente que sigan leyendo mis historias, no ponsé nunca tener tantas visualizaciones y estoy muy agradecida por eso.
Trataré de actualizar regularmente este fic a medida que mi mente vaya creando ideas y no se bloquee, muchas gracias por la paciencia y una disculpa por el capítulo tan corto, espero de igual forma lo disfruten <3
