Diecinueve.

1K 118 23
                                    

Habían pasado dos semanas desde que Satoru y Suguru se habían ido del colegio hacía Okinawa para seguir custodiando a Amanai mientras se calmaban los ánimos por todo lo que había ocurrido ya que los altos mandos no estuvieron para nada felices de ...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Habían pasado dos semanas desde que Satoru y Suguru se habían ido del colegio hacía Okinawa para seguir custodiando a Amanai mientras se calmaban los ánimos por todo lo que había ocurrido ya que los altos mandos no estuvieron para nada felices de la decisión que se había tomado. Al parecer todo fue consensuado por Masamichi Yaga y la fusión se había llevado a cabo con otra persona por el cual Riko Amanai había quedado en completa libertad de volver a su vida ordinaria sin ningún tipo de peligro que pudiera acecharla ya que deberían esperar otros quinientos años para que otra vez se lleve a cabo una fusión por lo tanto ella podía retomar una vida normal o eso era lo que Fukui tenía por información.

Por otro lado, la chica no había recibido ningún mensaje o noticia de sus amigos en todo ese tiempo y por su parte ella tampoco les había escrito nada, seguía dolida por lo que había acontecido.

–Ya están aquí –Anunció Shoko mientras se recostaba en el marco de la puerta de la habitación de ___________– Acaban de llegar.

–Que bueno –Respondió y continuo haciendo sus deberes sin prestarle demasiada atención a la castaña que la observaba con los brazos cruzados–

– ¿Seguirás molesta? –Preguntó y se acercó hasta Fukui para cerrar el cuadernillo que estaba rayando la muchacha–

–A ellos nos les interesa mi opinión, además salió todo bien, lo tenían todo acordado y yo ni siquiera lo sabía –Shoko suspiro y entendió un poco a su amiga, probablemente se sentía reemplazada y además de eso, le habían ocultado el plan. Eso y de que además le gustaba un poco el drama–

–¿Estás celosa de esa chica? –preguntó Ieiri de frente–

– ¿Qué? No es eso, simplemente me dolió el hecho de que estaban dispuestos a defenderla incluso si yo hubiera intentado algo, estaban dispuestos a atacarme si así lo requerían...

–Fue la tensión del momento, ellos no te hubieran hecho daño –Shoko abrazó a su amiga por los hombros- no pienses tonterías –sonrió–

–No lo sé... –mencionó cabizbaja Fukui–

–Te invito a comer en el casino, hoy tienen pastelillos –sonrió Ieiri y tomo a su amiga de un brazo para sacarla de la habitación– Y sé cuánto te gustan los pastelillos.

Al llegar ahí vieron como Gojo y Geto se encontraban en el lugar, pero no estaban solos ya que Riko Amanai los estaba acompañando y su cuidadora también se encontraba ahí, parecía que estaban charlando alegremente, sin embargo, la conversación se cortó al ver a la joven aparecer por la puerta del casino. Satoru la observó fijamente por detrás de sus anteojos oscuros y ella se acercó a la mesa para saludarlos.

–Hola, regresaron –anunció–

–Acabamos de llegar –respondió Suguru– Pueden sentarse junto a nosotros -sonrió para cortar un poco el ambiente de tensión–

BLUE - Satoru Gojo | Jujutsu Kaisen.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora