7. Saber

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Las horas no tardaron en pasar y una vez más la noche cayó en su magnifico esplendor, e irónicamente, la lluvia seguía azotando con tanta fuerza como el día anterior. No se había disipado  y por ese motivo su sensei dio la orden de que se quedarían aquella noche en la villa Hyuga con el permiso de Hiashi.

Las calles estaban inundadas, se habían desprendido un par de ríos y todos los animales fueron puestos en cautiverio, así como se declaró un toque de queda general para todo el país del fuego. Sakura se enteró de todo eso cuando el sol se ocultó y fue increíblemente sorpresivo el oír que ninguna persona podría poner un pie fuera mientras los ninjas de elemento agua se encargaran de investigar el origen de tal magnitud climática que azotaba el continente.

De igual modo, nadie quería arriesgarse a que un rayo los alcanzara o que los cortantes granizos cayeran sobre ellos, pesados y helados. También estaba el riesgo de resbalar en las frías y anegadas calles. Todo Konoha mantenía las luces de sus casas encendidas, con humo saliendo de las chimeneas mientras trataban de mantener la calma y evitar el pánico. Pequeños barcos flotantes, del tamaño de una caja, se encargaban de transportar suministros y medicinas. Esta fue la última medida decretada para resguardar la seguridad de la gente.

Toda Konoha estaba encerrada, y ellos no serían la excepción.

—...Es una lastima. Supongo que Hiashi sama planeará realizar el festival Hyuga bajo techo —comentó la sirvienta, Natsu, tras llevarle un té para su dolor debido al periodo.

—¿Festival Hyuga? —preguntó Sakura confundida.

—Mmh —asintió ella—, es un festival que se lleva a cabo en esta época, esta semana, precisamente. Debería comenzar mañana mismo, aunque él aun no ha dado declaraciones al respecto.

—¿Y de que va ese festival?

—Del día en que fue fundada la villa —respondió Neji por Natsu, entrando en la habitación.

Ambas chicas mantuvieron el silencio y la mirada pegada a él.

—...Este territorio nos ha pertenecido por décadas, así que es motivo de celebración el hecho de que jamás nos hallamos movido.

—A diferencia de los Uchihas —completó ahora Natsu—, ellos tuvieron la orden de moverse de sitio hace muchos años, antes de que se fundara la policía, bueno, y antes de que desaparecieran.

—Pero nosotros no —siguió Neji—, nuestro orgullo está intacto, por eso desde que se cumplieron 100 años desde que se fundó la villa Hyuga, se comenzó a celebrar el festival.

Sakura pareció entender completamente el motivo de la celebración que se llevaría a cabo, así que asintió a ambos en silencio. Luego, siguió con la mirada a Neji quien abrió su closet, y notó que por ese motivo se había metido en su habitación, después de todo, es su habitación y fue evidente el hecho de que la extraña y necesita cuando sacó ropa interior de un cajón.

La chica entreabrió la boca avergonzaba y simplemente desvío la mirada.

Natsu sonrió burlona y se posó en el umbral lista para salir. —Me iré ahora, descanse seño- —se aclaró la garganta—, descansa, Sakura —cerró la puerta tras ella.

—Sí, buenas noches, Natsu.

Y cuando la pelirosa volvió la mirada, vio a Neji apoyado ahora en la puerta de su armario, con los brazos cruzados y una pose bastante relajada, observándola tranquilo.

—¿Por qué te llamó por tu nombre? —consultó primero.

—Llegamos a un mutuo acuerdo —explicó Sakura con voz suave.

Diluvio - SasuSaku [Época Genin] +Neji ©Waarha Donde viven las historias. Descúbrelo ahora