- Señorita Sinclair ¿Ya se encuentra mejor? - preguntó la doctora viendo a Enid quien tenía una expresión de cansancio en su rostro - Me gustaría que me dijera cómo fue su caída.
- Iba bajando las escaleras, pero sin querer mi tacón se dobló y al no querer pegarme en la cabeza, por reflejo puse mi brazo y apoyé todo mi peso sobre él.
- Tiene el brazo dislocado, tendrá que utilizar yeso y guardar reposo.
- Está bien - dijo rendida la rubia. Había pasado toda la noche en la enfermería llorando por un fuerte dolor en su brazo derecho y ni siquiera tenía su celular con sigo, todo había sucedido muy rápido.
Después de que la doctora le pusiera el yeso, le dió una pastilla para el dolor y le dijo que tendría que quedarse toda la noche ahí porque a esas horas ya no se permitían alumnos rondando por los pasillos. Así que Enid hizo caso y se quedó durmiendo en la enfermería.
- Olvidémonos de él, ahora sólo somos tú y yo en esta habitación, en nuestra habitación, nadie sabe lo que pasa dentro de estas cuatro paredes.
- Eres hermosa.
- Estás muy apretada, ahhh...
- M-me estás condenando - Fue lo último que oyó antes de despertar de su sueño.
La rubia estaba sudando, con la respiración muy agitada y los recuerdos claros en su mente. Ahora recordaba lo que pasó esa noche que estaba ebria, y un sentimiento de culpa la inundó al reconocer lo mal que había actuado con Merlina tanto aquella noche y los demás días al no haber aceptado sus obsequios. Además ahora podía explicar la manera de actuar de su lobo cuando iba tener relaciones con Ajax y este no lo permitió, es más ni ella quería, algo le decía que estaba mal, y ahora entendía el porqué.
Tendría que hablar con Merlina. Hacerle saber que sus sentimientos son recíprocos, que su lobo le correspondía y ella también.
Bianca se encontró sentada en una silla mientras esperaba a que Merlina despertara. Anoche cuando llegó a la enfermería la doctora había salido y ya no se encontraba nadie aparte de las personas que estaban por algún motivo desconocido durmiendo ahí, y como la habitación de Oplehia Hall estaba cerrada había llevado a la joven Addams a su habitación, al no tener compañera no tenía problema con que Merlina pasará la noche ahí. Además así podría asegurarse del estado de la joven.
- ¿Te encuentras mejor? - preguntó Bianca mirando con preocupación a Merlina.
La pelinegra iba a responder, pero empezó a toser desesperadamente mientras sangraba. Bianca miró horrorizada esa escena ¿Qué diablos le estaba pasando a Merlina?
La joven Addams sentía su garganta seca, mientras podía saborear su propia sangre en su encías, sentía los pulmones tapados y como todo a su alrededor empezó a volverse borroso, nuevamente.
Bianca encontró en pánico.
La morena no sabía que más hacer, no podía ir a la enfermería porque sabía con certeza de que a esa hora la doctora estaba desayunando y no las iba a atender. Con desesperación cogió su celular y llamó a Euguene quien apenas le contó el estado de Merlina fue corriendo hasta su habitación junto con dedos y Pericles.
- ¿Dónde está mi hermana? - fue lo primero que dijo Pericles al entrar en la habitación, Bianca señaló la cama y el chico sin dudarlo se acercó hasta donde estaba ella sosteniendo su mano - Dime que no ha tosido sangre y que estas manchas rojas son pintura - dijo Pericles. Bianca lo vió con tristeza y eso fue suficiente para que el niño se ponga a llorar.
- No, Dedos. Aún es pronto para esa pastilla - dijo Pericles con tristeza
- Ella ya está tosiendo sangre - dijo Dedos en lenguaje de señas, sin esperar respuesta alguna por parte del menor de los Addams, subió hasta la cama y le metió una pastilla a Merlina en la boca, lo que hizo que recuperara la conciencia.
Pericles sabía lo que significaba esa pastilla y aunque su hermana estaba consciente, el ya se temia lo peor.
- Pericles - dijo Merlina al ver cómo su hermano estaba a su lado
- No, Merlina. No, no quiero perderte - el chico era un mar de lágrimas y Merlina quien en el pasado lo hubiera amenazado simplemente se limitó a abrazarlo.
Esa pastilla hizo que su cuerpo no se sienta cansado y que "recuperara su salud". Lamentablemente también es su última oportunidad.
Aunque Bianca, Pericles y Euguene le dijeron que no lo hiciera, Merlina no les hizo caso y fue a sus clases como si nada hubiera pasado. Había recuperado su fuerza, tenía que aprovecharlo.
- Addams ¿Sabes dónde está Enid? - preguntó Ajax mientras se acercaba a ella
- No.
- Ya, es que si te soy sincero, me preocupaba que haya ido corriendo hacia ti después de lo que pasó
- ¿Y qué pasó?
- Nada, sólo peleas de novios.
Obviamente Ajax no le iba a decir a Merlina que ayer Enid y él habían tenido una discusión muy fuerte gracias a que mientras estaban teniendo relaciones la rubia en vez de gemir el nombre de él, gimió el de ella, su loba usó que Enid gimiera el nombre de Merlina, lo que uso que Ajax se enojara y se desencadenara una dispuesta entre ellos, más porque la rubia le había dicho que tenía una cena con Merlina.
Y Ajax había terminado admitiendo que le fue infiel a Enid, lo que causó que Enid saliera corriendo lo que ocasionó su caída.
Pero claro, Merlina no sabe nada de eso.
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Maldición Addams
Fanfiction- M-me estás condenando - admitió Merlina, aunque Enid no entendió a qué se refería, sonrió. Merlina giró su cabeza hacia el gran ventanal donde podía ver cómo la luna llena se tornaba de color rojo. « Una vez la luna llena se torne roja será cuando...
