El infierno; un lugar donde se acumula el caos la destrucción, la tortura y la muerte. El Lugar donde los pecadores reciben su justo castigo por las acciones cometidas en vida. Un Lugar donde ni los mismos creyentes se salvan. Pese a todos estos mitos resultaba ser un sitio fuera de lo que se tenia planteado en el mundo humano. La Única desventaja que tenía este es su sobrepoblación a lo cual el cielo debe acudir en su "Ayuda" cada año.
Un demonio de estatura promedio estaba corriendo desesperadamente por su vida; debido a que un ángel lo estaba persiguiendo para mandarlo a lo más profundo de los círculos infernales; este cruzo una de las cuadras para evitar un empalamiento por parte del ángel y su lanza, pero en un descuido este se tropezaría. Con miedo en sus ojos el ángel se iba acercándose poco a poco con el arma, el pobre diablillo solo pudo soltar algunas lagrimas antes de cerrar sus ojos y aceptar su destino.
Pasaron los segundos y el diablillo nunca fue empalado; al abrir sus ojos ya no se encontraba el ángel ahora se encontraba un demonio de Casi tres metros de altura con piel escamosa y apariencia de reptil
- ¿Estas Bien? (Pregunto el Reptil aun mirando el hueco donde se encontraba el ángel)
- S-si eso creo (Respondió el diablillo aun tratando de recomponerse)
- Bien, te aconsejo que salgas lo más rápido de aquí; no quiero que nada este cerca cuando empiece la batalla.
El Demonio finalmente se enfrente cara a cara con el Diablillo el cual al verlo se sorprendió ya que este poseía una doble fila de dientes; cuatro pares de cuernos pequeños sobre la cabeza y un gran núcleo sobre la frente
- E-espera que vas a hacer?
- Creo que ya lo sabes ahora vete antes de que el ángel te siga persiguiendo
- El diablillo se recompuso lo más rápido para irse del lugar no sin antes dar un último vistazo al gran demonio que se estaba a punto de enfrentar a los ángeles "No se quien seas, pero gracias"
Devuelta con el reptil este aun esperaba al ángel el cual se demoro un poco en salir del hueco que provocó el golpe del gigante de 3 metros; el ángel se dirigió rápido en contra del demonio que solo se limito a esquivar al cazador; luego de seguir así por un rato el demonio decidido pasar a su forma de metal la cual con una de sus garras decidido bloquear uno de los ataques para acto siguiente darle un gran uppercut; lo cual lo mando al ángel a otro lado de la ciudad.
Este reptil pensó que ya había acabado con él, pero para su sorpresa llegaron otros tres ángeles los cuales estaban sorprendidos por la apariencia del demonio. Luego del shock los ángeles se lanzaron al demonio el cual empezó a bloquear los ataques de los ángeles con mucha facilidad haciendo que estos se cansen; en un descuido dos ángeles fueron tomados del cuello para luego se escuchara algo romperse.
El Demonio dirigió una mirada al otro ángel el cual sintió terror; en un acto desesperado este decide retirarse volando lejos del lugar, pero antes de siquiera seguir volando; fue tomado por uno de sus pies por el mismo ser, pero esta vez en su forma de aire.
- ¿Ya te vas? ¡Esto hasta ahora inicia!
En un parpadeo el ángel fue tomado por las alas para luego el demonio arrancárselas sin mucho esfuerzo; el ángel grito del dolor, pero luego fue silenciado por el reptil el cual le mando una bola de fuego que lo dejo hecho polvo.
Este aterrizaría en el piso listo para irse a alguna parte; pero en eso fue sorprendido por la espalda por un número considerable de ángeles.
- ¡Ustedes son muy molestos lo saben!
Todos los ángeles se les notaba nerviosos ya que en el momento de escuchar el grito de su camarada fueron al lugar de los hechos solo para encontrases con este demonio que a parte de volar puede lanzar bolas de fuego.
- "Si quiero acabar esto rápido tendré que aplicar mi mejor jugada"
El Demonio cierra sus ojos un momento; esto dejo confundidos a los ángeles los cuales ya se iban a lanzar de no ser porque de un momento a otro el clima del cielo carmesí del infierno cambio a uno nublado con tormenta eléctrica; el demonio se empezó a elevar para luego cambiar a su forma de relámpago aun visto con asombro y miedo por los ángeles; estos ya se iban a lanzar sobre el demonio que aun levitaba pero en un movimiento rápido este extendió su mano la cual fue liberada un gran rayo el cual fulmino a todos los ángeles presentes.
Este dejaría de levitar para finalmente volver a su estado base; lo que a su vez retomo el clima natural del infierno. Este ya se iba a retirar, pero dentro de los escombros un ángel que había perdido una pierna se recompuso con dificultad, este trataba de alejarse arrastrándose por el suelo con las pocas fuerzas que este tenía.
El Reptil se acerco a este; para tomarlo de la cabeza y tener una conversación.
- ¡Q-que se supone que eres j-jamás nos comentaron sobre un demonio como tú!
- *Ríe entre dientes* ¿Tanto te interesa? Pues bien, te lo diré veras digamos que soy una especie de Dios que esta a favor de estas pobres almas; pero es hora de darle una advertencia al cielo.
- "Este tipo está loco" (Pensó el ángel) ¿Q-que clase de advertencia?
- Si el cielo no llega a algún acuerdo con el infierno ¡yo mismo me encargare de subir allí y destruirlo con mis propias manos! ¿Entendiste?
El ángel con un poco de duda y miedo asentiría con la cabeza en respuesta de este demonio; luego de ello este regresaría al cielo un poco traumado; una de los serafines se le acercaría para tratar de curarlo, pero este solo se resigno a contar lo que vivió y la amenaza que representaba este demonio.
Por su parte este se encontraba durmiendo tranquilamente en un callejón sin saber lo que este había provocado.
Continuara ...