Confesiones Silenciosas

Capitulo 6:lovers

Las siguientes semanas fueron cruciales para Jude y Jade. A pesar de los altibajos y la presión externa, ambos comenzaron a construir una sólida amistad basada en la confianza y el respeto mutuo. Jude se esforzaba por demostrar a Jade que sus sentimientos eran sinceros y que ella era importante para él.

El equipo femenino y el masculino del Real Madrid organizaron un retiro conjunto en un lujoso hotel de cinco estrellas fuera de la ciudad. El objetivo del retiro era fomentar la cohesión del equipo y permitir que los jugadores se conocieran mejor en un entorno relajado y sin la presión de los partidos y entrenamientos diarios.

El hotel, rodeado de impresionantes jardines y con vistas espectaculares, ofrecía todo tipo de comodidades, desde piscinas y spas hasta restaurantes gourmet y salas de juego. Al llegar, Jude y Jade aprovecharon la oportunidad para pasar tiempo juntos, alejados del bullicio de la ciudad y de las miradas curiosas.

Durante uno de los paseos por los jardines del hotel, Jude tomó la mano de Jade mientras caminaban, disfrutando del aire fresco y del paisaje.

—Me encanta estar aquí contigo, Jade. Este lugar es increíble, pero lo es aún más porque estás tú —dijo Jude con una sonrisa.

Jade sonrió y apretó su mano.

—Sí, es hermoso. Gracias por ser tan paciente conmigo, Jude.

Una tarde, mientras paseaban por la playa privada del hotel, encontraron un lugar apartado con una vista impresionante del atardecer. Se sentaron en la arena, disfrutando del sonido de las olas y del ambiente tranquilo. Jude aprovechó el momento para hablar sinceramente.

—Jade, he estado pensando mucho en nosotros. Quiero que sepas que estoy comprometido con nuestra amistad. Quiero demostrarte que vales la pena, que eres importante para mí.

Jade lo miró, conmovida por sus palabras.

—Gracias, Jude. Eso significa mucho para mí.

El retiro transcurrió sin incidentes, con ambos equipos disfrutando de las actividades y fortaleciendo sus lazos. La presencia de Olivia se había desvanecido, y Jude se concentró en demostrarle a Jade que sus intenciones eran genuinas.

De vuelta en la ciudad, la vida continuó. Jude y Jade se convirtieron en una pareja de amigos inseparables, siempre vistos juntos en entrenamientos, eventos y salidas cotidianas. Las fotos de ellos compartiendo momentos especiales circulaban constantemente, mostrando una amistad que crecía y se fortalecía día a día.

Cuatro meses después del retiro, Jude decidió que era el momento de dar un paso más. Había planeado cuidadosamente una sorpresa para Jade, queriendo mostrarle cuánto significaba para él. La invitó a cenar en uno de los restaurantes más exclusivos de la ciudad, donde había reservado una mesa privada con vistas panorámicas.

Después de una cena deliciosa y de una conversación agradable, Jude miró a Jade con una mezcla de nerviosismo y determinación.

—Jade, estos últimos meses han sido increíbles. Nuestra amistad significa todo para mí, y quiero que sepas que eres muy especial. He estado pensando mucho en nosotros, y me doy cuenta de que quiero algo más. Jade, ¿te gustaría ser mi novia?

Jade lo miró, sorprendida pero también emocionada. La sinceridad en los ojos de Jude la conmovió profundamente.

—Jude, yo... —empezó a decir, sintiendo su corazón acelerarse—. Yo también he estado pensando en nosotros. Me has demostrado que realmente te importo, y eso significa mucho para mí. Sí, Jude, me encantaría ser tu novia.

Jude sonrió, aliviado y feliz. Se inclinó hacia adelante y le dio un suave beso en los labios, sellando el comienzo de una nueva etapa en su relación.

Desde ese momento, su relación floreció aún más. Con el apoyo de sus amigos y familias, y la certeza de sus sentimientos mutuos, Jade y Jude estaban listos para enfrentar juntos los desafíos que el futuro les deparara, sabiendo que tenían algo verdaderamente especial.