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Su teléfono vibraba, una y otra vez, podía leer su nombre en la pantalla, y eso le disgustaba.
Su cuerpo parecía inmóvil, su mirada fija en el techo de su habitación, ya no se molestaba en mirar su aparato móvil cada que aquella canción resonaba en su habitación, ni cuando el sonido de notificación picaba en sus oídos, nada.

Llamada tras llamada, mensaje tras mensaje.

Cuando finalmente un dolor en estómago lo hizo estremecerse, ¿era el sentimiento de culpa? Que ridículo.

Se encontraba sumido en una maraña pensamientos confusos.

No podía dejar de pensar en el momento en que sus labios se habían encontrado, en el que todo pasó a algo más íntimo, y la confusión crecía cada vez más.

"Me gustas" se repetía una y otra vez en su cabeza.

Otra notificación, ¿ahora que?

Tomo su teléfono, harto de cada sonido que salía de este, estaba apunto de silenciarlo cuando, al ver las 6 llamadas perdidas y los 28 mensajes de Crow hizo que su expresión molesta se suavizara, se sintió débil.

Bufó, entro al chat que compartía con el moreno y reviso cada mensaje.

Crow parecía sólo querer hablar sobre lo ocurrido, también se preguntaba cómo se encontraba, si estaba enojado, o si quería tiempo.

Mico ladeó la cabeza, sus dedos teclearon rápidamente, el mensaje fue borrado, volvió a teclear, volvió a ser borrarlo.
Cerro los y suspiró, pensando bien sus palabras, luego, volvió a teclear, de forma tranquila esta vez.

Crow🐦‍⬛

Claro que podemos hablar, te parece mañana?
a las 9pm
3:17 p.m.

Con un sutil rubor en sus mejillas, dejó su teléfono sobre su pecho, pasaron unos minutos y volvió a vibrar.

Crow🐦‍⬛

—bienn, donde siempre, por favor
3:20 p.m.

El castaño no se molestó en responder, clavándolo (descaradamente) en visto.
Rápidamente se arrepintió de haber mandado ese mensaje, pero sabía que no podía ignorarlo toda la vida, Mico no había sido claro con sus sentimientos, ni la mejor persona con el moreno.

Comenzó a sentirse nervioso, mañana tendría que verlo y eso era lo que menos quería, o al menos eso quería creer el.

Trataba de mantener sus sentimientos bajo control, pero para ese punto parecía imposible.
Intentaba distraerse en algo, cosa que le pareció difícil al solo estar hundido en su cama sin moverse.
Mico ya no podía negar más las cosas, pero aun quería hacerlo.
Sabia que reprímir sus sentimientos era lo correcto (según el) pero no podía evitar preguntarse cuanto tiempo más podria seguir así sin romperse.

Por más que intentara ahogar sus emociones, estas parecían siempre encontrar una forma de volver a salir a la superficie y atormentarlo.

Pero estaba en completa soledad, sus pensamientos lo consumían.

Además, se sentía avergonzado de huir aquella noche, patético.

Por parte de Crow, la cosa no era muy diferente, pero a diferencia de Mico, el tenía una pequeña sonrisa decorando su rostro.

crush ⟡ crow x micoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora