Mulan's dream [ABO]

EXTRA 3: Embarazados en apuros Pt. 3 - 2

Aunque su boda se atrasó por casi dos años, sabe que fue lo mejor para su relación. Lan Xichen tuvo razón en decir que debían disfrutar cada etapa del noviazgo, aunque en su caso, no tuvieron un noviazgo tan dulce como el que hubiera deseado.

Su relación se llevó a cabo en medio de una guerra, y el que Lan Xichen desapareciera en medio de ella lo devasto por completo. Con la pérdida de su secta y de sus padres, el deseo de vivir de Jiang Cheng se redujo a 0. Un momento más horrible que el otro, y no tuvo un segundo de paz. Perdió su núcleo dorado, y cuando lo recupero, su hermano desapareció sin dejar rastro. ¿Acaso estaba destinado a perderlo todo?

Se sentía solo, y un mes después, cuando Lan Xichen regreso, creyó que por fin todo estaba empezando a mejorar. Sin embargo, no fue así.

¿Por qué Lan Xichen le ocultaba cosas?

¿Por qué se portaba tan distante con él?

¿Por qué parecía haber cambiado tanto su actitud hacia él?

Se sentía tan confundido y estúpido, porque sabía que estaban en una guerra, así que, ¿cómo podría reclamarle algo al alfa? Todos estaban concentrados en derrotar a los Wen, incluyéndolo. Pero que el alfa sea tan cortante con él, y le dirija la palabra únicamente cuando hay alguna reunión con los demás lideres de secta, lo ponía extremadamente ansioso.

¿No están acaso comprometidos? ¿Por qué no podía contarle aquello que lo agobiaba tanto? Sabía que la secta Lan había tenido grandes pérdidas, entre ellas incluyendo al padre del alfa. Pero, ¿qué hay de él? El también había perdido a sus padres, a sus compañeros de secta; toda su secta se había reducido a cenizas en una sola noche. Sin embargo, ¿dónde estaba Lan Xichen? Incluso después de regresar, no lo consoló, no le dio ni una sola palabra de aliento; ni una sola palabra que le indicara que a aquel alfa le importaba aunque sea un poco...

¿Qué paso?

¿Dónde están las promesas que se hicieron hace un año?

¿Dónde está el futuro que imagino?

—¡Jiang Cheng!— de repente, un fuerte grito lo saco de su ensoñamiento. Giro la cabeza apresuradamente, solo para notar que la reunión había acabado y ya no quedaba casi nadie; únicamente se encontraban Nie Mingjue y el en la sala. El alfa lo veía con una ceja alzada, preguntando en silencio que ocurría. Jiang Cheng volvió a sentirse estúpido, y quiso marcharse apresuradamente, más fue detenido por las palabras del alfa: —Algo te agobia, puedo notarlo— fue directo al punto.

—No es nada— se apresuró en responder. No quería ser irrespetuoso con Nie Mingjue, pero no tenía ganas de tratar con el hombre; no cuando tenía tantas cosas en la cabeza.

—Si estas distraído, puede afectar tu desempeño en la batalla. Un solo error y tu bonito cuello podría ser desgarrado. No puedo permitirlo, eso destrozaría a Xichen— y ante la sola mención del alfa Lan, Jiang Cheng no pudo evitar bufar. Nie Mingjue entonces comprendió: —Así que es sobre Xichen... Ven, siéntate y cuéntamelo todo.

—Chifeng-Zun, ¿le han dicho que se parece bastante a su hermano menor? Ambos son igual de entrometidos— gruño Jiang Cheng, mirando con el ceño fruncido al alfa Nie. Realmente no tenía ganas de humillarse frente a este hombre contándole sus estúpidas inseguridades.

Nie Mingjue soltó una carcajada, y pasando su mano por su frente dijo: —Entrometido, ¿yo? No, no te confundas. Me gusta estar informado, que es diferente.

—Lo ve, incluso usan la misma excusa— y las palabras de Jiang Cheng solo causaron otra gran carcajada en el alfa, quien se partió de risa ante la mirada enojada del omega. El alfa no dejo de reír incluso cuando Jiang Cheng golpeo la mesa, sentándose en la misma. Espero hasta que el hombre terminara de reír, y bufando, dijo: —Los problemas que haya entre mi prometido y yo solo nos incumbe a nosotros.