Mulan's dream [ABO]

EXTRA 3: Embarazados en apuros Pt. 3 - 5

Cuando lo último de su familia se fue, Jiang Cheng quedo destrozado.

Su hermana había muerto, al igual que Wei Wuxian, a quien, a pesar de odiar, aun lloraba muy en su interior. Estaba devastado. Su sobrino se había quedado huérfano, por no mencionar al niño de Wei Wuxian, a quien solo había visto una vez y no sabía dónde estaba en este momento. Ni siquiera sabía si estaba vivo o muerto, porque el niño fue catalogado como un Wen, y lo último que quedaba de ellos fue asesinado.

Ese pequeño le daba mucha pena, porque había crecido en la miseria, sin conocer quienes era verdaderamente sus padres. Wei Wuxian era realmente desalmado, había privado al niño de demasiadas cosas, empezando con su identidad. No pudo evitar pensar que, si quizás hubiera ido a la secta Lan a decirle a Lan Wangji que tenía un hijo, este hubiera arrastrado al terco omega con él y se hubieran evitado muchas catástrofes. Sin embargo, su rencor y odio lo mantuvieron callado, y como parte de su venganza, guardo silencio hasta el final.

Con un pequeño Jin Ling de apenas meses en brazos, Jiang Cheng se arrodillo frente al ataúd de su hermana mayor en ropas completamente blancas. A su lado, el pequeño Zhong Shi esta igualmente vestido, también arrodillado muy seriamente frente a su tía, y en su otro extremo, su pequeño A-Yue duerme en su cesta. En cuanto a su esposo, no tiene idea de donde esta.

La relación de ambos ha mejorado un poco en estos meses. Sin embargo, siguen durmiendo separados. El tiempo que Lan Xichen pasa en Yunmeng se reduce a tardes en familia, suele marcharse en la noche y regresar al día siguiente, o si está muy ocupado, un par de días después. El alfa nunca insistió en volver a dormir con él, y está un poco agradecido por eso. De todas formas, no es como si por no dormir juntos se terminara el mundo. Hacen otro tipo de actividades, y esto, para Lan Xichen, parece compensar el que no duerman juntos.

Jiang Cheng simplemente no se resiste, porque esta cachondo. Luego de tener al bebé, se siente tan caliente que solo quiere que Lan Xichen lo meta dentro de el sin descanso. Sin embargo, tiene responsabilidades, y no toma más de dos horas en tener intimidad con su esposo. No obstante, a pesar del sexo, sigue reusándose a volver a compartir la cama durante las noches. Es contradictorio, y lo sabe muy bien.

-Líder Jiang.

Jiang Cheng sale de sus pensamientos cuando escucha que lo llaman. Voltea apenas el rostro y ve a un discípulo de la secta Jin, quien señala al pequeño A-Yue en su cesta. No se había dado cuenta de en qué momento había empezado a llorar su hijo.

Jiang Cheng se puso de pie como pudo, e insto a Zhong Shi a hacer lo mismo, pidiéndole que se sostuviera de su túnica. Acomodando a su pequeño sobrino en un brazo, y cargando la canasta con su hijo en el otro, camino con la frente en alto hasta la salida, para retirarse a la habitación que le había sido designada por estos días. Escucho murmullos a su tras, compadeciéndolo por tener tres niños a su cargo siendo tan joven. Otros muchos diciendo que Wei Wuxian era un malagradecido, y los más valientes atreviéndose a mencionar que su hermana había sido imprudente. Quiso regresar y cortarles la lengua a todos los que estaban hablando de su familia, más sabía que era más importante atender a su pequeño A-Yue, quien seguramente tenía hambre.

Llega a su habitación y pide ayuda a su hijo más grande con la puerta, el pequeño la abre rápidamente y ayuda a su madre a cerrarla después. Jiang Cheng ingresa con ambos niños apresuradamente, y deja al pequeño A-Ling en la cámara continua para que no se sienta incomodo por el llanto de su primo. En cuanto a A-Yue, lo toma rápidamente por su cabecita y su traserito, y lo carga contra su pecho, descubriéndolo para darle de comer. Zhong Shi se sienta a su lado, en silencio, simplemente acompañando a Jiang Cheng.

Jiang Cheng no tiene ni un minuto de descanso cuando esta vez escucha llorar a A-Ling, quien acaba de despertar de su siesta. Se siente desesperado, porque no tiene veinte manos para cuidar a todos los niños, y no hay nadie quien lo ayude. Mira a su hijo mayor, aguantando las lágrimas. Entonces, separa a A-Yue de su pecho, quien se queja pataleando: -A-Shi, v-vigila un momento a tu hermanito.