Prologo

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Harvest, tal es el nombre de una nación creada por el hombre y para el hombre cuyo inicio se remonta hasta casi 7 siglos. En ese tiempo no era más que una pequeña y débil nación, la burla del mundo completo, pero eso cambio con el tiempo.

Harvest creó un nuevo estándar de lo que significa ser súper potencia, a pesar de todos los problemas con los que todo país debe lidiar y en especial su situación con los Metahumanos, atrayendo la envidia y la codicia de las demás naciones.

Metahumanos, su primera aparición sucedió hace siglos cuando numerosas personas gatillaron capacidades peculiares. También llamados Bioterroristas, desarrollaron de gran manera su fuerza y mente hasta estar a un nivel inhumano, manipulando el ambiente utilizando "magia", por llamarlo de algún modo dado que no se encuentra una explicación lógica sobre cómo funcionan sus capacidades y por qué las tienen en primer lugar, pero algo es seguro, los metahumanos son una plaga que debe ser eliminada a toda costa.

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Localización:

Desierto de Boris, Harvest.

Base Militar de Investigación y Desarrollo Shirley (BMIDS).

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Recorriendo el edificio principal de la base, el científico de cabecera del proyecto, Doctor Ford, meditó en silencio taciturno sus órdenes: instruir a los nuevos cadetes.

Al entrar en la sala, observó con calma a los jóvenes soldados formados, su ceja se levanta levemente al ver el entusiasmo que proyectaban mientras el Coronel Red se le acercaba.

--Doctor Ford, es un placer-- dijo el hombre mientras estiraba su mano.

--El placer es mío Coronel-- respondió el doctor, sacando su mano derecha del bolsillo de la bata y estrechando firme la mano del hombre.

--¿Cómo ve a los muchachos?-- preguntó Red.

--Se ven animados, esperemos que ese ánimo no se desvanezca muy rápido-- respondió Ford con algo de rudeza.

Con un gesto de invitación, el coronel le dio paso hacia los cadetes a quienes Ford quería hacerle algunas preguntas.

--Cadetes, ¿Qué son los Metahumanos?-- inquirió Ford.

--¡Señor! ¡Son personas con capacidad de controlar la materia y los elementos naturales! ¡Señor!-- respondieron al unísono los cadetes.

--¿Por qué deben ser eliminados?-- continuó Ford.

--¡Señor! ¡Porque son una plaga! ¡Un peligro en potencia para la humanidad! ¡Señor!-- respondieron nuevamente los cadetes con mas animo.

El doctor asintió con suavidad al escuchar su coro ordenado de respuestas.

--Veo que los han enseñado bien. Última pregunta, ¿Les dan miedo los Metahumanos?-- dijo Ford con un tono de voz algo sombrío.

El silencio total fue su respuesta, antes de que una única voz respondiera.

--¡Señor! ¡No le tengo miedo a los bioterroristas! ¡Señor!-- declaró Adrián.

Ford se volvió al escuchar esta respuesta, mirando al más joven de los ingresados antes de acercarse y mirar al chico cara a cara.

--¿Cuál es su nombre Cadete?-- preguntó Ford.

--¡Señor! ¡Soy el Cadete Adrián del Pelotón número cuatro! ¡Señor!-- respondió el joven.

--Joven Adrián, ¿Acaso has tenido contacto con un Bioterrorista o Metahumanos?-- indagó Ford.

--¡Señor, no, señor! ¡Pero estoy preparado para combatirlos, Señor! -- aseguró Adrián.

--Soldado, créame, no está preparado... en lo absoluto. Los metahumanos no son ninguna clase de juego--, concluyó Ford algo molesto, le desagradaba un poco el tono de soberbia del joven Adrián.

A pesar de que el chico quiso responder, cualesquiera de sus palabras se cortaron debido a los chillantes sonidos de alarmas de proximidad de la base.

Dark Hole: Ciegos por la VenganzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora