· ꗃ IDOL 𔓕 𓆠 Hananene ♡

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"Dos almas gemelas"

୭̥. 🌸 ₊°

Amane Yugi... un chico azabache que se dirigía a un departamento el cuál no había visto desde hace meses. Su departamento olía a su hogar; sentía que podía estar en paz por unos minutos antes de dar el último concierto de su gira como Idol.

Se recostó en la cama acurrucandose y suspirando de lo comoda que estaba, no había sentido tanta satisfacción en mucho tiempo.

—...Ah, un mensaje de la agencia.— decía con fastidio el azabache. Si rostro iluminado con esa luz del teléfono le quitaba ese ambiente cómodo que había hace unos segundos —No sé cuánto tiempo más podré aguantar así...

Luché tanto por lograr llegar a dónde estoy pero... siento un vacío.

Las canciones del Idol eran éxitos. Eran canciones que escribía del corazón aunque... ¿miles de personas se identificaban con su sentimiento de soledad enserio?

El solo tenía a su hermanito a su lado, sus padres lo rechazaban, sus amigos lo dejaban, aunque quisiera sería muy complicado conseguir una chica que le sea fiel ya que no todas tienen un buen corazón y en cualquier momento podrían hasta filtrar su rostro e identidad... y eso no lo gustaba.

La sociedad llegaba a estar muy podrida y para gente como el, dolía.

Soltó el teléfono. Alguien tocaba a la puerta de su residencia, ¿quién podría ser? no había invitado a nadie.

Al momento de abrir... estaba la única persona que si lo valoraba.

—¡AMANE, AMANEEE! ¡AL FIN VOLVISTE!— gritaba su gemelo. Su hermano Tsukasa lo había venido a visitar y era la única persona que sabía su identidad.

—...¡TSUKASA! ¡HOLA!— correspondió el contrario emocionado por la visita de su mejor compañero en la vida. —¿Que tal? a los meses que no nos vemos...

—Todo está bien hermano, te extrañé, por favor no hagas giras internacionales por que las nacionales ya son muy tediosas...— respondía el chico mientras lo abrazaba con fuerza. Había extrañado a su hermanito...

—Me alegra que estés aquí, justo estaba a punto de ver regalos que me dejaron en un anterior concierto.— respondió Amane.

Ver regalos era una parte muy linda de su trabajo y muy graciosa, le gustaba hacer esa actividad con su hermano. Sacaba mil cartas de amor, peluchitos, fotitos, álbumes de recortes, dulces, retos, ¡sacaba de todo! era una muy grande caja de sorpresas.

Pasar esa tarde con su hermano le subió el ánimo como no tienen idea. No sabía que haría si su hermano no estuviera con él. Si su hermano no estuviera... se quedaría solo por completo.

—Gracias por acompañarme Tsukasa... debo descansar y hacer mi rutina; mañana voy de nuevo a un concierto.— dijo Amane desanimando el rostro de su hermano.

—¿enserio aguantas vivir así...?— cuestionó el chico de colmillos bajando la mirada.

—...Mira esta carta, mira estos dibujos... las únicas razones por las que continúo son estos regalos. Me hacen sentir... muy bien, y amo hacer música así que es la mejor forma que tengo de hacer algo respecto a mi talento.— respondió muy profundamente su hermano mientras lo miraba intentando que su hermanito no sintiera lástima por él.

—...Bien, te dejo, por favor no cometas tonterías hermanito.

—No sería capaz.

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Por otro lado, tenemos a una chica de cabello albino y puntas color acua, con unos ojos color bermellón que actualmente se encontraba llorando en su habitación desconsoladamente.