𝐓𝐑𝐀𝐈𝐓𝐎𝐑 ʰᵃʳʳʸ ᵖᵒᵗᵗᵉʳ

Capítulo 7

El hecho de que Kreacher me vea como a él, me enorgullece. ¿El motivo? Ni idea. Nunca me han contado nada de él pero, lo que Kreacher acaba de decirme, ya sé que soy como él.

-¿Y qué pasó con el guardapelo de slytherin?- pregunté atentamente.

El tardó en responder.

-El llevo uno falso a la cueva donde se escondía el verdadero... Y consiguió intercambiarlo.

-¿Y dónde está el verdadero?

Por la mirada de Kreacher, sabría que lo tenía él.

-¿Dónde lo tienes?

-Es-s muy peligroso, señorita Black. No puedo dárselo- sonaba con una voz quebrante y nerviosa.

-Por eso mismo, Kreacher. Dame el guardapelo.

Y en un momento a otro lado voz de Molly hizo resonar por toda la casa.

-¡Elodie!¡Baja porfavor!

Miré a Kreacher por ultima vez y me levanté para seguidamente salir de mi habitación.

-No se lo cuente a nadie- dijo Kreacher a mis espaldas- Ya lo intenté una vez, pero nadie me creyó...

Me giré y con lástima asentí. Seguidamente salí de mi habitación y bajé hasta el piso de abajo.

Cuando entré en la cocina, ahí estaban tres adultos. Molly, Arthur y mi padre... Sirius.

-¿Qué ocurre Molly?- quise saber cuando me paré delante de ellos, y nuevamente, apoyarme en el marco de la puerta.

-Haz las maletas- escuché decir a Sirius.

Lo miré confuso.

-¿Qué?

-Este fin de semana vendrás con nosotros- dijo Arthur.

Cuando iba a preguntar mi cuestión, mi padre ya la estaba respondiendo sin yo preguntar nada.

-Estaré fuera este fin de semana, y no quiero que te quedes aquí sola.

Levanté las cejas cuestionadamente.

-¿Dónde irás?- interrogué

-No es de tu incumbencia- respondió sin más. Luego salió de la cocina pasando por al lado mío sin mirarme a la cara.

Pegué un suspiro y antes de irme el señor Weasley habló.

-Perdona, Elodie, si no quieres venirte con nosotros...- antes de que siguiera ya le había interrumpido.

-Para nada, señor Weasley. Estoy encantada. Perdón si les hecho pensar de otra forma...

-Para nada, bonita- dijo Molly con una sonrisa.

Seguidamente, subí para hacer las maletas. Preparé una para ir a pasar el fin de semana a casa de los Weasley y luego la maleta de Hogwarts.

Cuando ya me faltaba poco para terminar, abrí el armario y agarré mi uniforme de slytherin y mi túnica de slytherin.

Cuando me encontraba doblando las camisas un golpe sonó en la puerta.

-¿Se puede?- dijeron los gemelos a la vez.

-¿Qué os ha dado por hablar conmigo?-dije divertida.

Obvio que me gusta pasar tiempo con ellos. Pero últimamente están muy pegados a mi.

-¿Acaso es que no podemos visitar a nuestra amiga?- inquirió George.

-Claro que sí, George.

-¿Cómo es que nos diferencias?- habló el otro hermano.