El día esperado

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Kiara durmió con Ela esta vez, organizaron todo para el otro día y se acostaron temprano, ellos llegaban a la 1 de la tarde, Robert los invitó a compartir un almuerzo antes de hablar de negocios y eso les daba más tiempo para agradar, se levantaron temprano a las siete de la mañana, cada una se bañó y se puso la ropa que escogió. Ela se Planchó todo el cabello y se maquillo sutilmente y pintó las uñas de color rojo y Kiara se planchó solo la mitad del cabello y el resto lo formó en crespos que caían justo sobre sus caderas, también se maquillo sutilmente como Ela pero le agregó unos labios color rojo profundo y solo se organizó y pintó con color transparente las uñas, desayunaron en el cuarto y salieron a las doce de allí ya listas.

-¿Y qué tal estamos?- preguntó Kiara a Robert y Mathew dando una vuelta y dirigiéndose a la sala, Ela solo la siguió y sonrió.

-Los van a dejar con la boca abierta.-Dijo Robert, sonriendo tristemente.

-No necesitaban todo eso, de todas maneras los hubieran dejado con la boca abierta, creo que un pantalón y una blusa hubiese estado bien, ¿No crees Kiara?- Dijo Mathew disgustado.

-Eso quiere decir que estamos muy bien.-Aclaró Kiara a Ela mirando mal a Mathew.

-Solo falta una hora para el gran momento.-Dijo Ela.

-Creo que falta menos, es una cuestión de seguridad llegar antes para tantear el terreno y ver que no hay ninguna sorpresa, aunque es estúpido porque ya es muy reconocido.-Dijo Kiara sentándose.

-Esperemos que sí, porque verdaderamente estoy empezando a desesperarme, creo que ustedes deberían entonces meterse ya al estudio.-Respondió Ela con un suspiro.

-Sí, vamos Mathew, mucha suerte.-Dijo Robert llevándose a Mathew para el estudio y dejándolas solas.

A las doce y veinte sonó el timbre, Ela y Kiara se dirigieron a la puerta, pusieron su cara más amable y abrieron.

-Oh, creo que nos equivocamos.-Dijo Puma, un muchacho alto, acuerpado de cabello café casi mono y ojos color miel, el menor.-Una equivocación muy grata.-Agregó el, fijándose en Ela.

-No creo, ¡WOW! son muy jóvenes, ustedes ¿son socios del tío Robert?- Respondió Ela con inocencia y sorpresa.

-Aún no, estamos aquí por una reunión con... mm ¿su tío?- Preguntó Gato con un tono desconfiado, muy parecido a su hermano pero con los ojos café oscuro, una barba descuidada y un poco más alto que aparentaba ser el mayor.

-Algo así, pueden seguir; Da permiso Ela.-Dijo Kiara en tono brusco y quitando a Ela del medio.

-Ela, lindo nombre, yo soy Puma y él es mi hermano Gato.-Dijo picándole el ojo a Ela y besando su mano. ¿Y tú eres?- Preguntó a Kiara.

-Mucho gusto, ella es mi hermana Kiara.

-Un gusto.-Dijo Puma besando la mano de Kiara quien la quitó de un tirón.

-Un poco pasado de moda eso de besar la mano ¿no? pueden seguir en instantes saldrá Robert de su estudió.-Dijo Kiara.

-No le pongan cuidado, ella es siempre tan mal humorada y desconfiada. ¿Quieren algo de tomar?-Dijo sonriendo Ela.

-Una limonada, gracias.-Respondió Puma sonriendo.

-Agua, por favor.-Dijo Gato, mirando detenidamente a Kiara.

Ela se dirigió a la cocina y llevó a Kiara consigo. -¿Qué estás haciendo? Portarte como grosera malcriada no es parte del plan.-Espetó Ela.

-No lo era, ahora si, por lo menos a mí me servirá, Puma se fijó rápido en ti porque es más joven, coqueto, menos maduro y eso, pero Gato es el mayor y el que lleva las cosas, es desconfiado, verás no estás siendo un reto para Puma y a él le gusta así pero a Gato no, el desconfía y piensa más claro y le atraen los retos, solo confío en mi instinto y te tocará también a ti confiar en él. Ahora sirve el agua y la limonada.

VENGANZA EN DESCONTROLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora