"Sin darme cuenta te volviste mi todo."

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Ann: Necesito hablar contigo *Dice con un tono algo inseguro y quebradizo*

All la mira con atención. Se acomoda en el sofá emanando una vibra intimidante, logrando generar un leve escalofrió en la menor.

All: Claro pequeña, te escucho *Le muestra una sonrisa amable*

Ann: Si bueno emm... -Dios es que en serio quiero saber pero me da miedo, se enojara, lo se, dirá que por que carajos estaba revisando sus cosas y será horrible, pero, la curiosidad me consume, la intriga, es todo las escalofriante y confuso- Okey, All, q-quiero saber *suspira para luego retomar la postura* quiero saber por que tiene- 

El teléfono de All empieza a sonar con insistencia sin dejarle mas remedio que tener que contestar la llamada. -Espera aquí y ya seguimos hablando, debo responder- Exclama la mayor antes de salir de la casa.

_EN LA LLAMADA_

All: ¿Qué carajos quieres? *dice con molestia*

X: Ya tenemos al chico. ¿Qué quiere que hagamos ahora? 

All: *Se queda en silencio por un momento* Llévenlo a la casa del bosque, estaré allá mañana en la madrugada.  

_FIN DE LA LLAMADA_

La peli morada entra nuevamente a la casa pero la morena ya no se encontraba en la sala, entonces va hasta la habitación de esta pero ya se encontraba dormida. La mayor decidió no despertarla pero un fuerte impulso de abrazarla la invadió de esta manera se acostó a espaldas de la menor rodeando su cintura con sus fuertes brazos, sintiendo su reconfortante calor. 

All: Te amo Annie, definitivamente haría todo lo que fuera por ti. *Dice en un tono casi inaudible para luego quedarse dormida inmediatamente junto a la morena*

Ann: -M-me ama?... En serio me ama?- *Siente como su sus ojos se cristalizaran, realmente aquellas palabras había debilitado su corazón haciéndolo latir descontroladamente* Y-yo... También te amo, All.

Los pensamientos aturdían la cabeza de la menor, era incapaz de creer todo lo que había visto, su mente imaginaba miles de ideas, escenarios, posibilidades, razones, todo lo que se le pudiera ocurrir pasaba por su mente. ¿Qué tipo de persona era la misma que en ese momento se aferraba a su cuerpo con dulzura mientras la tocaba con delicadeza?, Acaso la misma mujer que la llenaba de sorpresas, regalos, dulces besos y tiernas palabras pero a la vez podía ser demasiado cruel, ¿Era la misma que la había observado por tanto tiempo?. Sí, si lo podía creer, en definitiva era la misma. 

2 A.M 

All se levanta sigilosamente de la cama evitando que la peli roja se despierte, a toda costa debía evitar que esta notara su ausencia, al menos en ese momento. Seguido de haber logrado salir con éxito de la habitación de la menor, agarro la llaves de su auto y salió silenciosamente de la casa, tenia poco tiempo para llegar a su parada y volver puntual a su casa por la morena, prefería evitar preguntas sobre el por qué de esa sospechosa salida.

Luego de un par de horas logro llegar a su destino. La adrenalina, el entusiasmo y el sentimiento de ansiedad invadían su cuerpo, no esperaba ver a aquel ser que se encontraba encerrado seguramente confundido, atormentado y traumatizado por la situación, ese sentimiento alimentaban a la peli morada, la hacia sentir satisfecha, era tan placentero y emocionante, el tener a alguien rogando por condolencias, por compasión, por su vida.

All: Muy bien Edgar, buen trabajo *saca un fajo de billetes y se los da al trio de grandes hombre* esperen en la arriba *voltea a ver al chico que ya hacia amarrado a una silla de hierro, con un pedazo de tela cubriendo sus ojos y una cinta impidiendo que pudiera hablar* Deseo hablar un rato con mi amigo *sonríe con malicia*

Luego de que los tres hombre obedecieran la orden dada por la Peli morada, esta se acerca al chico que se movía con desesperación mientras daba gritos ahogados y las gotas de sudor resbalaban por su rostro.

All: Ya ya, relájate, pareces un gusano al que le echaron sal *suelta una pequeña risa burlona* y yo aún no he hecho nada para que te retuerzas.

All arranca con brusquedad la cinta que tapaba la boca del chico causando que este suelte un gemido de dolor. - ¿¡QUIEN ERES Y POR QUE ME TIENES AQUÍ!? SUELTAME POR FAVOR, YO NO HE HECHO NADA, LO JURO!!- Exclama el chico entre gritos de terror.

All: No has hecho nada, Mmm... *Su tono se empieza a tornar más siniestro* ¿Estas totalmente seguro de eso?... Adrián.