Capítulo 14.

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Cuando el castaño llego al departamento se encontró con una escena encantadora, Keith tenía a Colin entre sus brazos, le cantaba una hermosa canción, el bebé le miraba con atención, una risita escapaba de su boquita y estiraba su pequeña mano para tocar al alfa, quién se acercaba y dejaba tocarse por el pequeño.

Fue entonces que el bebé miro al Omega, soltó pequeñas risas y estiró sus manitas. Keith volteo con una sonrisa.-hola, ¿todo bien? Pensamos que tardarías más.-

-también yo.-cerró la puerta y se acercó para tomar a su pequeño entre brazos.-¿Cómo sería trabajar con Colin?-

-pues se te da el menor trabajo posible, se te otorgan los tiempos para alimentarlo, también hay nanas que se encargan de cuidarlos. ¿Piensas volver a trabajar en estas fechas?-

-lo he pensado.-

-¿Qué crees que diga tu esposo?-Aori resoplo, dejo al bebé sobre el sillón y sujeto su pequeña manita.

-fui a hablar con él... Le pedí el divorcio.-el alfa le miro sorprendido.

-¿Y acepto?-

-se que está arrepentido por la manera en la que me trató, pero ya tomé una decisión. No pienso aceptar negativas-miro los ojitos de su primogénito y esbozo una sonrisa.-ahora no solo se trata de mí.-

Keith se acercó y miro a los castaños.-no están solos, yo siempre estaré para ustedes.-

El Omega sonrió, le dio un juguete a su pequeño y está vez miro al alfa.-Keith.-le llamo tomándolo de las manos.-debes entender que primero necesito estar bien conmigo y con Colin, no puedo simplemente comenzar una nueva relación sin haber sanado de la anterior. Te quiero, y me gustas mucho, pero no quiero lastimarte, ni directa o indirectamente.-

Esa era una de las cosas que amaba del Omega, que fuera sincero con él.-lo entiendo. Tienes todo el tiempo que necesites, yo te esperaré el tiempo que sea necesario.-

***

El divorcio lo habían firmado sin complicaciones, Ian acordó con la ley pagar una pensión justa al menor, visitarlo los días correspondientes y obedecer a sus obligaciones como padre. Pero aún esperaba mucho de él.

Aori resoplo cuando nuevamente el padre de su hijo no atendió su llamada, los meses habían pasado y el hombre había cumplido con lo acordado, pero últimamente no atendía las llamadas, y cuando lo hacía ponía pretextos para no visitar al pequeño, quién ahora tenía nueve meses.

-¿Aún no responde?-cuestionó la castaña al ver cómo su amigo aventaba el celular en la mesa.

-no. Me desvía las llamadas.-balbuceo acomodándose en la silla, la chica se sentó frente a él y dirigió su atención al Omega.

-¿Pero si te pasa la pensión?-

-al menos.-

Aori volteo al otro lado del parque, aquel rubio sujetaba a su pequeño de las manitas mientras le ayudaba a caminar, cosa que el bebé siempre quería intentar.

Ladeó una sonrisa y miro a la joven.-sigo sin creer que tu destinado es Patrick.-Camila sonrió, aquel hombre era dulce y atento, aunque aparentaba otra cosa.

-¿En dónde está Keith? ¿No vendrá?-

Tratando de esconder su tristeza, el castaño evito mirar a su amiga y jugueteo con una botella de agua.-no lo sé. Para ser honestos, desde que tome mis vacaciones no lo he visto.-

-apenas va una semana, ¿cuánto tiempo de vacaciones tienes?-

-un mes.-

-¿Y lo extrañas?-Aori no respondió, fue entonces que la chica supo que las cosas no iban tan bien como esperaba.-¿Cómo han ido las cosas?-

Suspiro -la verdad es que las cosas han cambiado. Entre él y Colin todo es maravilloso... Pero conmigo... Creo que se canso de esperarme.-

-¿Aún no piensas darle una oportunidad?-

-Camila, yo... Lo he intentado, pero no puedo. Estoy roto y tengo un hijo, ¿que hago si un día se cansa de nosotros? Yo podría soportarlo, pero Colin... Colin lo adora, y si de la noche a la mañana se aleja, le haría mucho daño. Se que aún es un bebé, pero no quiero que se acostumbré para que al final simplemente nos boten.-

-Keith jamás haría eso.-aseguro la castaño.

-Ian también prometió jamás dañarme. ¿Y que hizo? Me traicionó, me engaño, dijo que iba a cambiar y hasta la fecha no lo ha hecho.-

-Keith no es Ian.-al ver la mirada molesta de su amigo, la joven tomo su mano y le miro con ternura.-deberias llamarlo, o ir a la oficina o a su casa, sabes dónde vive.-

El Omega miro a su pequeño, este sonreí alegre, fue entonces que se decidio, irá a hablar con Keith y tal vez comenzar con pequeños pasos.

***

Nervioso tocó el timbre, Colin balbuceo y tiro suavemente de los cabellos del Omega, quién sonrió y reprendió a su pequeño.

La puerta de la casa se abrió, dejando ver a un alfa sorprendido por la visita. Al ver al pelinegro, Colin balbuceo buscando su atención.

Keith sonrió y beso su frente -hola hermoso. Que sorpresa.-

Aori miro al alfa y sonrió timido.-disculpa por venir sin avisar, cuando pensé en avisarte me di cuenta que mi celular no tenía pila.-y era cierto, se había terminado intentando localizar a Ian.

-no te preocupes, está siempre será su casa.-el alfa miro sutilmente hacía dentro, suspiro y hablo sin mirar al castaño.-Aori, necesito presentarte a alguien.-

-¿Alguien?-asintió mientras ingresaba a la casa, un exquisito aroma llenaba el lugar, al parecer la cena estaría deliciosa.

Al entrar a la sala una corriente fría recorrió su cuerpo, una hermosa chica estaba acomodando la mesa.-ella es Kate.-

Al oír su nombre, la chica volteo inmediatamente. Era preciosa, su cabello era largo y dorado, sus ojos eran azules, uno más claro que los de Keith, su cuerpo era hermoso, todo lo que un hombre buscaría en una dama.

Se acercó con una enorme sonrisa.-hola, mucho gusto.-

-hola.-

-ella es... Es...-no hacía falta decirlo, con su forma tan torpe al hablar ya lo sospechaba.

La chica sonrió divertida.-soy su destinada, soy su novia.-

-oh.-aunque ya lo había sospechado no lo había querido escuchar, su corazón comenzó a doler y la culpa empezó a consumirlo.

-¿Y este pequeño?-se acercó al bebé, quién sonrió y jugueteo con el collar de la chica.

-es... Es Colin... Mi hijo.-

-¿Puedo cargarlo?-

-por supuesto.-la chica lo tomo entre sus brazos, estaba encantada.

-me encantan los niños. He hablado con Keith, después de casarnos quiero tener muchos hijos.-

-¿Casarse?-con la mirada busco la de Keith, pero esté evitaba mirarlo.

-claro que aún no planeamos nada. Apenas llevamos unos meses conociéndonos. ¿Te parece si se quedan a cenar? En unos minutos estará lista la comida.-

-ha no... No creo que...-

-por favor, yo insisto. Además me gustaría pasar tiempo con este caballerito.-la rubia estaba encantada de escuchar la risa del infante, solo ellos parecían felices, pues Keith y Aori se notaban incómodos.

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¿Si no hay amor? «OMEGAVERSE.»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora