Capítulo 21.

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Aori es hermoso, su piel blanca, sus cabellos castaños y esos hermosos ojos con los que me mira.

Estaba recostado en la alfombra, sus mejillas ahora eran rosadas, y uno que otro cabello se le pegaba a su frente.

Con suavidad abrí sus piernas y me coloque entre ellas, vaya que moría por penetrarlo, quería hacerlo totalmente mío. Su mano se estiró y con timidez acaricio mi pecho y abdomen.

-Keith.-mierda, hasta mi nombre suena erótico en sus labios.

Me acomode y comencé a penetrarlo, joder, ver su cara en esta situación es simplemente ardiente.

Sin dejar de penetrarlo, lleve mi mano a su miembro y comencé a jugar con él, subí la intensidad de las embestidas y también el ritmo en el que lo complacía.

Ver su cara es simplemente maravilloso.

-Keith... Si sigues ¡Ah!...-

-termina. Tenemos toda la noche, cariño.- seguí con las embestidas fascinado por los gestos que hacía, se mordía el labio para silenciar los sonidos que emitía. Lo entiendo tampoco me gustaría que Colin despertara y nos encontrará en esta situación.

Aori se levantó un poco, estiró sus brazos y me rodeo por el cuello, sonreí mientras mordía suavemente su hombro, sentí como sus caderas comenzaban a moverse, sin soltarlo, me deje caer sobre la alfombra.

Aori estaba arriba está vez. Sus movimientos eran deliciosos. Con sus manos acaricio mi pecho.

Sonreí, si antes se veía hermoso ahora era todo un Dios. Con una mano acaricié su miembro, mientras que la otra jugueteaba con su pezón.

Comencé a sentir que estaba por terminar, así que antes de correrme abrace a Aori y lo aleje, ambos terminamos al mismo tiempo.

Mierda estuvo cerca. No quiero hacer nudo dentro de Aori. Colin está en su mejor etapa y no se si sea correcto darle un hermanito, aunque eso me encantaría.

Mire a Aori, me acerque y comencé a besarlo, sentí como nuestras erecciones comenzaban a crecer de nuevo. Rápidamente se dio media vuelta dándome la espalda. Sonreí, separé sus glúteos y comencé a penetrarlo, pase mi brazo por debajo de su cuello y lo abrace por detrás.

Bese y mordí suavemente su nuca, no quería marcarlo a menos que él estuviera de acuerdo. Sin salir de su cuerpo, nos levantamos un poco, Aori se sostuvo con sus piernas y brazos. Sujete sus caderas y está vez comencé a penetrarlo con más fuerza. Dios, presiento que esto se convertirá en una adicción.

***

A la mañana siguiente, el Omega se despertó de golpe, se dio cuenta que estaba sobre la cama, sonrió cuando la noche anterior volvió a su cabeza.

Se levantó con un pequeño dolor en las piernas, aún así se dirigió al baño y tomo una ducha, fue inevitable pensar en las caricias de Keith.

Al salir de la ducha, encontró el desayuno sobre el buró, junto a el había una hermosa rosa.

Sintió un par de manos rodeándolo desde atrás.-buenos días. ¿Descansaste?-

-solo un poco. Necesito apurarme para llevar a Colin al colegio.-

-lo llevo yo, tú solo descansa.-beso suavemente su nuca y acarició con suavidad sus caderas.

Aori suspiro con tranquilidad, ladeó el cuello y disfruto de los pequeños besos que su alfa le brindaba.

-Keith.-

-¿Hum?-

-quiero que me ma...-

-¡Buenos días!-la puerta se abrió de golpe, el alfa se separó del omega. Los ojitos de Colin brillaron al ver a Keith.-¡Te quedaste!-

-si.-el infante salió corriendo hasta los brazos del alfa, quién lo cargo entre sus brazos.-pequeño travieso, antes de entrar a una habitación debes pedir permiso.-

-lo lamento. Venía a despertar a papá para ir al colegio.-

-yo te llevaré. Dejemos que papá descanse unas horas.-

***

Los días comenzaron a pasar un poco más rápidos. La mayor parte del tiempo Colin jugaba en el patio de la casa con su "tío" Ian. Al final habia aceptado que el menor viera a Keith como su padre, pues el diagnóstico del médico había empeorado, pelear no servía de nada si estaba por partir de este mundo.

-¿Empeoró?-

El castaño asintió.-le diré a Colin que haré un viaje a otro país. Quiero morir silenciosamente en la cama del hospital, sin visitas ni familiares. Creo que sería más tranquilo.-

-Ian...-

-no Aori, ahórrate el discurso, ya lo he aceptado. Pero si hay cosas de las que me gustaría hablarte.-le miro directamente y lo tomo de las manos.-te pido perdón por todo el daño que te hice. Te abandone cuando más lo necesitabas. Abandone a mi hijo. Te lastime al meterme con Thomas.-

-ya no importa.-

-no si importa. Te lastime. No voy a decir que me hubiera gustado que las cosas fueran diferentes. El cáncer aún así hubiera aparecido, y aún así hubieras sufrido y tal vez con más intensidad. Pero te lastime y supiste levantarte, gracias a ese dolor Keith ahora está a tu lado. No están solos. Ese hombre los ama, y se lo voy a agradecer por siempre.-

-gracia.-Aori sonrió dulcemente.-por darme el mejor regalo que puedo tener. Colin es un niño maravilloso.-

Ian sonrió débilmente, tomo al omega por la barbilla y sin pensarlo demasiado lo beso. Aori se sorprendió, y cuando estaba por alejarse, Ian rompió con aquel delicado contacto, se puso de pie y se alejo sin decir algo más.

***

-me gusta que vivas con nosotros.-hablo el menor del hogar con alegría.-pense que jamás viviríamos juntos.-

-¿Estás contento?-

-si... Hum... Bueno no del todo. Yo quiero un hermanito.-ambos adultos se miraron nerviosos y un poco incómodos.

Aori se acercó y le dio un beso en la frente.-pero eres muy pequeño para tener un hermanito.-

-claro que no. Yo soy lo suficientemente grande para cuidarlo. Se acerca la navidad y pediré un hermanito.-

Aori sonrió nervioso, sabía que Keith era un padre maravilloso, pero aún así un segundo hijo sin duda cambiaría la vida de ambos.

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¿Si no hay amor? «OMEGAVERSE.»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora