Emocionado, el pequeño castaño se acomodo en su cama, era hora de dormir y ya estaba listo para descansar.
-¿Te gustó tu fiesta? Veo que estás más feliz de lo normal.-hablo Keith sentándose en el borde de la cama, Aori los miraba con una triste sonrisa desde el marco de la puerta.
-¡Ame mi fiesta! Pero no estoy feliz solo por eso. Ya es tarde y no te has ido, así que supongo que finalmente te quedarás a vivir con nosotros.-
-¿Aún piensas en eso?-
-pues si.-contesto como si fuera lo más obvio del mundo.-yo te quiero mucho, y no entiendo porque no te quedas con nosotros.-
El alfa sintió un dolor en el pecho.-Colin... Eres un niño inteligente, comprensivo y... Yo sé...-sin poderlo evitar, las lágrimas se acumularon y rodaron por las mejillas del alfa.
Le dolía tener que admitir en voz alta lo que ya sabía. Colin en cambio lo miro curioso.-papá.-le llamo inocente mientras acercaba su pequeña manita y limpiaba gentilmente las lágrimas.-no llores. Si no quieres vivir aquí esta bien, me conformo con verte todos los días y que regresas a tu casa en la noche.-
Sonrió enternecido, estiró su mano y acarició sus finos cabellos.-Colin yo te amo, te quiero mucho... Yo sé que tú corazón me recuerda, es verdad que te cuide y te ame desde antes de tenerte en mis brazos. Pero amor, no soy tu padre biológico.-
-¿Biológico?-
-hum, significa que mi sangre no es como la tuya.-
-pero eso no importa. Papá, no entiendo bien. Pero se que te duele, yo te quiero mucho así que no llores.-
Colin se removió, y entre sus pequeños bracitos envolvió a Keith, quién al sentir el amor puro del menor volvió a romperse. Aquel pequeño que no entendía a lo que se refería estaba consolandolo.
-prometo que yo seré el
primero en conocerte.-Recordó sus propias palabras cuando a su cabeza llegó la imagen de él, siendo el primero en cargar y conocer a Colin.
Aori miro a su lado a Ian, quién había escuchado todo a escondidas del menor.
Ambos bajaron las escaleras y se dirigieron a la sala. Aori se sentó primero, después Ian, haciéndolo frente al Omega.
-¿Jamás pensabas hablarle de mi?-
Aori se quedó callado, suspiro y lo miro sin mostrar expresión.-siempre pensé que algún día el dinero no llegaría, creía que habría un punto en el que simplemente te olvidarias de nosotros. ¿Que le diría entonces? Hablar de ti para que, si nunca volverías.-
-¿Creíste que sería capaz?-
-por supuesto que sí.-hablo tranquilo.-me dejaste solo en el embarazo, y cuando Colin nació prometiste cambiar, un cambio que solo duró días, después volviste a ser como antes.-
-y corriste a los brazos de Keith sin dudar.-Aori frunció el ceño de inmediato.
-no, Ian. Aunque no quiera te diré lo que pasó, Keith mantuvo una relación con una chica durante años, Camila y su esposo fueron quienes siempre estuvieron con nosotros. Mi relación con Keith comenzó hace un mes. ¿Contento?-
Ian se quedó callado, recordó entonces sus recientes visitas al médico, así que opto por hablar con la verdad.-tengo cáncer. Vine porque quiero conocer y convivir con mi hijo antes de morir, me niego a someterme a tratamientos y estar encerrado en hospitales.-
El omega se paralizó, ¿cáncer?.-Ian...-
-ahorrate el discurso de lástima.- interrumpio restándole importancia.
Los pasos se hicieron presentes por las escaleras, el pelinegro llegó a la sala.-ya se durmió.-
-se hace más tarde así que me voy.-se puso de pie y se dirigió a la puerta, pero antes de salir volteo a ver a la pareja.-oh, Keith, deberías pasar la noche aquí, si mi hijo despierta y no te encuentra se pondrá muy triste.-dicho aquello cerro la puerta de golpe.
Finalmente se quedaron solos.-creo que debería volver, se está haciendo tarde.-
-¿No te quedarás? Ian tiene razón, si Colin despierta y se da cuenta de que te fuiste se sentirá triste.-
-¿Si me quedo no tienes problemas?-
-por supuesto que no. Dormiremos en la misma habitación.-
-¿Seguro?-cuestionó juguetón.
-si. Esta la cama y un tapete libre.-el ojiazul no pudo evitar soltar una carcajada.
Se acercó y envolvió entre sus brazos al omega.-aunque quisiera no podría pasar algo. Yo jamás...-
-lo haría con Colin en la casa. Ya lo sé. A decir verdad comienzo a preocuparme, es como si buscaras cualquier excusa para no estar conmigo.-
-no digas tonterías.-susurro mientras acercaba su nariz y apretaba con fuerza sus caderas -no hables de cosas que no sabes.-
Aori suspiro cuando comenzó a sentir pequeñas mordidas sobre el cuello, con sus manos apretó la camiseta del alfa, tratando de acercarlo mucho más, aunque sus cuerpos estuvieran prácticamente pegados.
Keith metió una de sus manos por debajo de la camiseta del omega, subió lentamente hasta su pecho, y con sus dedos comenzó a juguetear con el pezón del castaño.-¡Ah!-
Aquel sonido le encantó al alfa, había sonado tan erotico y tierno. Se preguntaba si sonaría igual de lindo cuando finalmente lo hiciera suyo.
-¡Hum!-se mordió el labio cuando sintió la mano del castaño sobre su entre pierna.
-Keith.-escucho entre susurros su nombre.
Dejándose llevar comenzó a besar al omega, a quien comenzó a quitarle la ropa, Aori también lucho por desvestir al alfa.
Finalmente quedaron desnudos, Keith recostó al omega sobre la alfombra y admiró aquel dulce cuerpo.
Se alineo en la entrada del castaño y comenzó a penetrarlo, quería disfrutar ese momento, pero también moría por hacer suyo a ese precioso omega.
-¡Ngh!-Aori comenzó a soltar pequeños gemidos en cuanto las penetraciones comenzaron.
Keith no quería dejar de escucharlo, pero de alguna manera le preocupaba que Colin escuchará algo, así que sin detenerse, se acercó a sus labios para comenzar a besarlo.
-esta noche será nuestra.-le susurro al oído haciéndolo sonrojar.
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¿Si no hay amor? «OMEGAVERSE.»
De TodoEsta es la historia de Aori, un joven omega que finalmente está comprendiendo que su matrimonio está llegando a su final, pero por desgracia se entera que un pequeño ser se está formando en su vientre, y no solo eso, al mismo tiempo tendrá que lidia...