𝐌𝐢𝐳𝐮𝐤𝐢 瑞希 ° ° || 𝙇𝙖 𝙡𝙪𝙣𝙖 𝙚𝙨 𝙖𝙦𝙪𝙚𝙡 𝙚𝙨𝙥𝙚𝙟𝙤 𝙙𝙚𝙡 𝙖𝙡𝙢𝙖 𝙦𝙪𝙚 𝙣𝙤𝙨 𝙧𝙚𝙫𝙚𝙡𝙖 𝙖𝙦𝙪𝙚𝙡𝙡𝙤 𝙦𝙪𝙚 𝙜𝙪𝙖𝙧𝙙𝙖𝙢𝙤𝙨 𝙙𝙚𝙣𝙩𝙧𝙤. || ° °
¿Quien dice que el mal no se enamora...?
¿Es siquiera posible que un ser tan b...
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La brisa nocturna me acariciaba suavemente el rostro mientras observaba con anhelo la brillante luna llena desde mi ventana. Su luz plateada y reluciente abarcaba el paisaje, transformando a su paso cada rincón del mundo que se encontraba lleno de sombras y reflejos, siendo algo hipnótico y maravilloso digno de contemplar. Una roca mineral llena de leyendas y mitos por contar, transmitir y compartir.
Recuerdo las oscuras noches de mi infancia, en donde mi abuela me narraba historias viejas y fantásticas sobre la luna. Solía decir que la luna bajó su manto protegía aquellos seres diabólicos come carne que perdían la vida ante las garras en llamas de una gigantesca estrella espectral, el sol. Siendo la luna y el sol dos opuestos llenos de odio y rencor, ambos en una batalla constante en busca de reinar el universo al solitario. Aquellos relatos solían llenarme en una mezcla de miedo y asombro, y ahora, tantos años después... Esas historias viven en mi alma, mente y corazón. Siendo un constante recordatorio de mis días contados y mi misión silenciosa.
La luna ha sido mi confidente. Le he confiado mis secretos, mis sueños y mis miedos desde que tengo memoria. La contemplo y pienso en los deseos que le susurré en noches sin estrellas como esta, en las promesas que me hice bajo su luz, las tragedias que sufrí bajo su profundo mirar, mi muerte ante su brillo ejemplar... He carcajeado y sollozado bajo su observación constante, y su presencia me ha reconfortado en mis momentos más solitarios.
Cierro los ojos un momento, dejando que la luz de la luna me envuelva. Siento una paz profunda, como si su brillo pudiese eliminar todas mis preocupaciones. Al abrir los ojos, susurro un breve agradecimiento tranquilo a ese satélite solitario, un testigo mudo de mi vida, siempre ahí, constante y sereno, mientras todo a mi alrededor cambia.
Después de todo... Su manto me protegerá de aquella repugnante estrella espectral.
La luna me protegerá sin importar las consecuencias.
Porque a pesar de todo...
Soy un ser come carne...
Un demonio.
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