Mi primer y último te amo

CAPÍTULO 28

Nathan

-No puedo creer que mi Nathan ya se valla a casar- mi jefe me abrazo- Creces muy rápido y eso que te conocí cuando tenías tan solo siete años- lloriqueo mientras me abrazaba

-Ya paso- le di palmaditas en la espalda mientras miraba a Ales e Izan con una señal de ayuda

-Creces muy rápido y yo me vuelvo más viejo- sorbio su nariz mientras se alejaba de mi

-Tranquilo jefe aun quedamos dos- Alex se señaló orgulloso

-No por favor- murmuro

-jefe ¿E Izan? -pregunte con el ceño fruncido

-Dijo algo de su novia- Alex y yo nos miramos preocupados, saqué mi móvil y le escribí apresuradamente

- ¡Están en el hospital! - antes de que pudiera enviar el mensaje Alex grito

- ¡¿Qué!?- exclamo el jefe

-Vamos para allá- cogí mi chaqueta

- ¿Y quién se va a encargar del taller? -pregunto Alex, yo mire al jefe

-Yo me quedo, pero me contáis todo- nos miró serio mientras asentíamos

- ¡Izan! - exclamamos los dos a la vez al verle

Se veía horrible, llevaba el pijama puesto, el pelo desordenado y unas ojeras increíbles, su pierna temblaba al igual que sus manos

- ¿Chicos? - pregunto dudando

-Ya estamos aquí-nos acercamos a el

- ¿Qué ha pasado? -hablo Alex

-Estábamos durmiendo y se despertó por dolores muy fuertes- se apoyó la cabeza en sus manos - Venimos aquí preocupados, la llevaron a una sal, todo fue bien hasta que ella empezó a llorar por el dolor y gritas, dijeron que era el parto, pero me sacaron de la sala y solo escuchaba gritos y no sé nada más- negó con su cabeza mientras su pierna subía y bajaba

-Hey tranquilo- Alex se sentó a su lado y se escuchó un gran grito- No, mejor no lo estes

Eso le puso más nervioso y comenzó a morderse las uñas

-No digas eso- le di un golpe a Alex-Tu estate tranquilo, son cosas normales en el parta

- ¿Cómo sabes eso? - su voz estaba lleno de preocupación y miedo

-Ellie me pone muchas película- me interrumpió un llanto e Izan se levantó de golpe

- ¿Esa es? - murmuro

-Izan Ya- no le dejo acabar a la enfermera y entro en la sala despintándola un poco

Después de un par de minutos en la sala de espera jugando a batallas de pulgares nos dejaron entrar a ver a Maddie

Abrimos la puerta y nos encontramos con él bebe entre los brazos de Izan

-Esta es Maddie- hizo una sonrisa orgullosa

Me acerque a verla mejor y mire a Alex rápidamente intentando no reírme, parecía una pasa arrugada roja

-Es... Hermosa- Izan la acaricio con mucho cuidado mientras tenía una mirada especial

Sus ojos marrones eran brillantes, con sus pupilas dilatadas meciéndose todo el rato para no perderse nada de su hija recién nacida

-Pues perece una pasa- dijo Alex sin importancia

-Es mentira- intento decirlo alto pero no podía por no interrumpir el sueño de Maddie

-Yo solo opinaba- levanto las manos en modo de inocencia