—¿Qué van a hacer qué?
La expresión de Teo era de completa perplejidad tras escuchar toda la historia que viví anoche.
En efecto, Teo se había encontrado de turno todo el día. Cuando regresó no pudo fingir sorpresa al vernos a mi padre y a mí muy tranquilos como si no hubiese sucedido nada la noche anterior.
Mi padre enseguida empezó a contarle mi historia y el cómo podríamos encontrar a Abel, pero conforme pasaba el relato podía notar que Teo no estaba muy de acuerdo con esa decisión.
—Darek, no tenemos ni idea de quién es ese muchacho, ¿qué tal si le hizo algo malo a Rigel?
—¿Algo tan malo para que él lo busque? —intentó hacerse el gracioso pero la seriedad de su esposo era lo que abundaba en aquella habitación.
—Dices que no se acuerda de casi nada, ¿y si lo drogaron? ¡Aún estamos a tiempo de llevarlo al hospital para que lo revisen!
Padre abrió la boca para protestar pero no salió nada de ella. Ambos regresaron a verme con preocupación, en especial "papá", él que se veía peor.
—Darek... su condición... —bajó la voz y musitó de manera insistente.
—Teo —pronunció de manera gélida.
Mi "papá" enseguida enmudeció y se mordió el labio de manera nerviosa. Me encantaría entrar a su cabeza ver que tanto le daba miedo. Abrí la boca para apoyar a padre pero un suspiro largo y agotado me prohibió el habla.
—Rigel, ¿puedes ir a tu habitación?
La reacción brusca del pelirrojo por la órden de su esposo me dio miedo, por lo que me apresuré a acatar lo que me pidieron. Asentí y me retiré del comedor con pasos algo rápidos, antes de subir por las escaleras, me quedé allí fuera en el pasillo, quería escucharlo todo.
—No me conviene decidir estas cosas a mí, pero como tu esposo, que puede ayudarte a tomar decisiones muy importantes, te recomiendo que buscar a ese tal Abel será una pérdida de tiempo.
—Te entiendo, pero es la primera vez que lo veo así de emocionado, ¿no crees que al fin podría abrirse?
—¿Sólo por la búsqueda de alguien que no logra ni recordarlo bien? ¿Te das cuenta de lo que me estás diciendo, Darek?
—Sí, es algo muy apresurado, así nos conocimos nosotros también.
—Eso no fue así, y lo sabes bien. Tú tenías todas las posibilidades, Rigel sólo recuerda su aspecto y a duras penas su nombre. ¡Le pudieron hacer algo malo en esa fiesta!
—Amor, sé que estás preocupado pero mira el lado positivo.
—Me alegro que por fin salga de su habitación, empiece a divertirse y tenga amigos —su voz sonaba muy agitada—, pero no es motivo para que le permitas buscar a alguien que probablemente ni siquiera sea de aquí.
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Una Noche Para Amarte
Romance"-¿Qué tanto recorriste para encontrarme? -Muy poco comparado con lo que logré encontrar". Rigel Jones tiene la vida perfecta que cualquier persona desearía: tener un estatus "alto", pero, a pesar de tener la vida resuelta le parece completamente a...