10

609 24 1
                                    

POV Violeta

El beso con Chiara fue espectacular, sentí mil cosas solo con el roce de sus manos sobre mi piel y el de sus labios sobre los míos. Sin duda no puedo explicar lo que es posible sentir cuanto te pasa, pero ojalá todo el mundo pueda sentirlo en algún momento de su vida.
Subí a casa con una sonrisa que no podía ocultar, pero que tampoco quería hacerlo, quería gritar y saltar, por fin había pasado, por fin. 

- Holaaa - dije al entrar y en cuanto me asome por la puerta del salón Tana vino corriendo.

- Dime que sí, que os habéis liado - yo solo pude sonreír y ella empezó a chillar de alegría - Dios Vio que felicidad, por fin - y yo no pude volver a reírme y es que ella parece el triple de emocionada que yo aunque internamente estoy chillando de felicidad. 

Después de eso cenamos hablando sobre lo que pasó por la tarde y es que mi hermana es mi mejor amiga, sabe absolutamente todo y se alegra tanto o más que yo de mis logros y yo de los suyos, somos un equipo desde que tenemos uso de razón. Y como para no, siempre hemos sido nosotras y mamá, nadie más. 

- ¿La escribo? - pregunté mientras recogíamos la mesa. Y es que llevaba un rato queriendo escribirle para saber que todo estaba bien. No quería precipitar nada, pero por otro lado quería asegurarme que ella también sentía la conexión que tenemos. 

- Sí, ósea yo si fuera ella me gustaría recibir un mensaje de quiero repetirlo o algo así, tampoco seas directa con qué sois, que igual se asusta - Y es que tenía razón, así que eso hice, cogí el móvil y busque su chat - Vale esto así que tal - le enseñe el móvil a mi hermana antes de mandar el mensaje. 

- Sí bien, pero ponle un me lo pase genial en el coche o algo así - y yo solo pude notar como el calor se me instaló en la cara y es que yo no estaba acostumbrada a ser tan directa aunque lo pareciese. 

- Pues entonces así - y la volví a enseñar el mensaje pero esta vez si lo había mandado porque sé que sino me iba a arrepentir incluso antes de escribirlo. Tana me sonrió satisfecha y en cuanto terminamos de recoger me fui directa a mi habitación y es que después de este día necesitaba relajarme, demasiadas emociones intensas. 

Recibí la contestación de Chiara y solo pude sonreír, después de responderle al segundo me fui a la cama. Al cerrar los ojos solo pude pensar en el momento en su coche esperando que sucediera otra vez y pronto. No es normal como he sentido que estábamos sincronizadas, como encajan nuestros cuerpos tan bien cuando nos abrazamos, parece que estemos hechas para la otra. Nunca había experimentado esto, nunca había querido tanto a alguien en tan poco tiempo, y es que sí puedo decir que además de gustarme Chiara Oliver siento tanta admiración por ella y por todo lo que hace y por simplemente como es, que no hay expresión más bonita de amor. 


Habían pasado ya una semana desde que nos habíamos visto y yo no podía estar más ansiosa por verla. Al principio habíamos quedado en vernos dos días después para ir a cenar, pero entre que ella tenía que preparar todo para irse a Menorca y que yo tuve que irme a Granada un par de días por el cumpleaños de mi abuela y el trabajo en la cafetería no habíamos tenido tiempo. Hoy que por fin salía a una hora normal habíamos quedado para cenar. 

- Violeta relájate que te va a dar algo- y es que había llamado a Denna para que me ayudase a prepararme porque mi hermana se había quedado en Motril hasta la semana que viene. - Habéis estado hablando todos los días desde el día de la playa, todo va a salir bien, la encantas - me decía mientras yo miraba mi armario bastante estresada. 

- Y a mi me encanta ella, pero quiero ir increíble - me giré para mirarla ya que tenía el móvil con la videollamada activa en la cama - Este vestido que te parece - era un vestido negro pegado con el que se me marcaban todas las curvas. 

- Sí, definitivamente sí - me fui al baño a vestirme y maquillarme. Al terminar pasé a toda prisa a por mis cosas y es que llegaba tarde - Dios Vio, hoy la Kiki no se va a poder resistir a ti - yo solo pude reírme mientras me miraba al espejo. 

 Me despedí de Denna y al colgar otra vez sentí todos los nervios y más cuando la vi al final de la calle, y es que había insistido en venir a buscarme para que fuéramos juntas al sitio donde había reservado. Por primera vez desde hace una semana no sabía que decir ni que hacer y noté que ella tampoco al pararse delante mío, dudando en si darme un abrazo o no. 

Noté su mano tirar de la mía para fundirnos en un abrazo que duró más de lo que pensábamos. Al separarnos noté que ella también iba increíblemente guapa, con una falda corta y un top blanco. 

- Estas increíble Vivi - dijo al separarnos y yo solo pude sonreír. 

- Tu también Kiki - nos pusimos a andar hacía el restaurante que había reservado. No dijimos nunca que fuese una cita pero sabíamos que lo era. En el camino estuvimos hablando de lo que habíamos hecho la semana que no nos habíamos visto y es que aún hablando todos los días por mensaje no nos quedábamos sin tema de conversación. 

POV Chiara 

Estaba muy nerviosa por quedar a cenar con Violeta, no sabía por qué, habíamos hablado todos los días, pero solo con su presencia mi corazón latía de forma inexplicable. Estuve toda la tarde pensando en que ponerme, no pedí ayuda a Ruslana porque no quería parecer una loca o algo por el estilo. 

- Pues me llamaron Violeta por la opera de La traviata - me contaba ella mientras entrabamos en el restaurante que no quedaba más que a 20 minutos andando de su piso. Y es que estaba preciosa, más que de costumbre, más que nunca. - Kiki todo bien? - y es que no me había dado cuenta de que había disociado. 

- Si perdona Vio - y la sonreí, la cena fue bastante bien y sin darme cuenta ya estábamos en el postre - Pero como me vas a decir que nunca has ido al parque de atracciones - solo pude reírme y es que no, por su expresión me di cuenta de que nunca había pisado uno. 

- Nunca me han llamado la atención la verdad - 

- Pues a mi me encantan, es increíble la sensación de la montaña rusa - 

- Pues iremos entonces un día si quieres - y yo no pude hacer otra cosa que sonreír y asentir. Cuando nos dirigíamos a su casa una duda apareció en mi cabeza y es que no quería decírselo, no quería estropear esta noche tan increíble pero necesitaba hacerlo. 

- Oye, Violeta quería preguntarte una cosa - ella solo hizo un ruido afirmativo mientras caminábamos y es que nuestras manos estaban a escasos centímetros - ¿Qué somos? Porque tu a mi me gustas muchísimo y no sé si esto es igual por tu parte, perdón no quería sacarlo pero necesitaba hacerlo - y no me había dado que había empezado a hablar rápido por lo nerviosa que estaba pero mi cabeza se calló en el momento en que sentí sus labios impactar sobre los míos. 



Siempre túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora