Las épicas aventuras de un Niegalotodo

gambito de dama

Huaisang se encuentra muy concentrado en terminar varios frascos de antídoto por en dado caso también se infectaran más personas, en la misma habitación se encontraba el principe vigilando que nadie se apareciera por el estudio

-Huaisang estás seguro que va a funcionar- huaisang lo volteo a ver y le sonrío- estoy más que seguro mi príncipe, salvo la vida de varias personas, no será diferente esta vez- en ese momento entra el general apurado

-Mi principe acaba de llegar un barco sospechoso de china- huaisang de exaltó- vamos debemos ir a investigar, no debemos levantar sospechas, ambos no entendían nada- hay que ponernos máscaras- luego entendieron y fueron a la bodega mayor a buscar máscaras siempre vigilando que nadie los vea, buscaron en todos los cajones y escogieron tres, uno negro para el comandante, el otro azul para el príncipe y el último verde para huaisang- ten toma huaisang, mira como te queda

Era simple pero funcional, no contaba que sus mismas habilidades poderosas transformarían la hermosa pieza a una más de su talla, el príncipe lo vio embobado- WOW HUAISANG, ¿Como pudiste hacer eso?- huaisang se palideció- ajajaja no fui yo, yo no puedo hacer esto- la máscara era impresionantemente hermosa, tal como era huaisang.

-No importa, debemos irnos, debemos estar ahí cuando anochezca- asintieron los demás y luego salieron del palacio sin mediar palabra, tomaron algunos caballos y cabalgaron hacia el puerto.

Al momento de llegar se veía el barco que hace unas horas llegó al puerto, estaban desembarcando varias cajas- está es una oportunidad intenten llegar con ellos y distraerlo yo tomaré alguna caja como evidencia- el principe lo ve preocupado pero asiente junto con el general, ambos fueron fingiendo estar borrachos y es ahí donde huaisang aprovecha a transformarse, al momento de hacerlo su cabello se vuelve corto y su ropa más de acordé al entorno para camuflajearse, Rápidamente va por una caja y la lleva algo lejos para abrirla sin problema, vaya sorpresa o así pensaba, eran varios paquetes iguales a los que habían confiscado en Japón, antes de ir por los dos "borrachos" varios hombres con sables salían volando del barco...

-MIERDA!!!- no tenía opción debía pelear, estaban amenazando al príncipe.

-POR FAVOR dejen de estar fingiendo estar borrachos lo hacen terriblemente mal, SI NO DICEN QUE QUIEREN, AQUI ACABA SU VIDA- el general se puso en alerta máxima por si debía sacar su espada- OIGAN TRANQUILOS, solo queremos pasarla bien y tener nuevos amigos jajaja- todos se rieron, hasta que los hombres del sable se quedaron serios- mira ricitos de oro, no me has dado una respuesta ahora vas a pagar- el general había sacado si espada y colocado al principe detrás de él, pero antes de que estos hombres atacarán, el compañero de la par de quien estaba hablando fue totalmente decapitado de un solo golpe manchado a los demás de al rededor de un carmesí intenso.

-Ah quieres matarlos, tendrás que pasar sobre mi- el hombre del sable enojado totalmente se acercó rápidamente hacia huaisang soltando un golpe con el sable el cual pudo esquivar fácilmente- parace que eres más lento de lo que parece... También pensarás lento y no razonas lo que haces jajaja- esto encabrono más al del sable y a los demás que comenzaron a atacarlo todos juntos al mismo tiempo, Huaisang escabullia fácilmente nadie podía darle un tan siquiera empujón, el entrenamiento de Akane si sirve en Huaisang, los hombres artos, directamente fueron contra el príncipe pero huaisang con uno de sus abanicos logro cortarles las piernas aquellos hombres, pero el líder de ellos en ese "descuido" estaba directamente a cortar el cuello, esto lo noto rápidamente, su Mano acumuló suficiente energía gracias al núcleo y de un golpe con el filo de su Abanico rompió el sable como una hoja de papel, el hombre quedó petrificado, se supone que estos sables son indestructibles o bueno tienen un material muy resistente que ninguna espada cualquiera podría destruir así de fácil, claro hasta que apareció los abanicos de aquel heredero del trono en Japón.