Brother's best friend. - SukuFushi

8.

- ¿Este viernes? - preguntó y el pelirrosa asintió.- Nop, debo preparar una presentación, pero tengo tiempo, ¿por qué?

- Bueno, yo quería-

- ¡Niños, pongan la mesa por favor!

"Tendrá que ser luego..."

La cena estuvo deliciosa, comieron raviolis con salsa. Y para el postre, Akiko preparó el favorito de Megumi, Nanako y Mimiko: tiramisú.

Luego de terminar de comer, todos se trasladaron a la sala, mientras Megumi se ofreció a lavar los trastes, pese a las negativas de Aki. Ya estaba terminando su labor, cuando alguien entra por la puerta.

- ¿Te ayudo?

- Estoy bien, ya estoy terminando. Tu descansa.

- Te ayudaré a secar. - dijo el más alto.

- Haa, bien. De todas formas lo harás.

Megumi continuaba lavando los cubiertos que faltaban, mientras el chico a su lado comenzaba a secar los trastes con un paño.

- Oh Suku, ¿qué querías decirme antes? - preguntó recordando la pregunta que le había hecho y había quedado en el aire.

- Es que... quería invitarte a un lugar. - habló. - Pero si tienes cosas que hacer... - le sonrió.

- ¿A dónde? - preguntó, girando su cabeza de vuelta a mirar lo que estaba haciendo, para que no notara sus mejillas coloradas.

- Es algo sencillo, pero te gustará... Digo, si es que quieres ir.

- Si. - respondió de inmediato.- Me gustaría ir.

Megumi volvió a mirarlo, Sukuna le sonrió con una expresión que no supo decifrar, pero hizo que el corazón del pelinegro comenzara a latir con fuerza.

- ¡Megu! - entró gritando Yuji. - Dile a tío Sato que no ponga a todos contra mi. - se quejó con un mohín.

- ¿Qué pasó? - suspiró el mencionado, dejando lo que estaba haciendo.

- Estamos jugando al uno, y se unen para lanzarme los +4. - el pelinegro rodó los ojos.

- ¿Y qué quieres que haga yo? - habló levantando una ceja, curioso.

- Apoyarme, ven a jugar. - lo tomó de la muñeca, llevándolo hacia la puerta. - Tú también Suku, seamos un equipo.

...

Yuji... hermano querido, ¿por qué cada vez que siento que conecto con Megumi, te apareces...?

No me malinterpreten. Sé como es mi hermano, y demanda la atención de sus cercanos, pero últimamente... me es difícil. Ellos siempre han sido cercanos, íntimos podría decirse mejor.

Desde pequeños, hubo afinidad instantánea entre los tres, a pesar de que Megumi fuera más silencioso y tranquilo, a comparación de nosotros que éramos unos revoltosos. Además, se le hacía difícil distinguirnos porque Yuji insistía en cambiar. A veces yo era él, y él era yo, entonces, los tres éramos unidos.

A medida que fuimos creciendo, y que cada uno adoptó gustos, manías y gestos propios, se les hizo más fácil a todos diferenciarnos y dejamos de cambiar de lugares. Yuji era un parlanchín, hiperactivo y divertido, mientras, yo me volví un tipo más callado, taciturno y con mal carácter con las personas desconocidas, aunque claro, tengo mis momentos, después de todo soy un Itadori.

Por esto, y por muchas otras razones que imagino y también desconozco, es que Megumi está enamorado de mi hermano.

Y sí, yo soy el idiota enamorado de él. Del mejor amigo de mi hermano.