Call It What You Want ||Charles Leclerc||

2. Cena en familia

"Mi bebé es como un sueño, camina con su cabeza abajo, yo soy la única con quien camina. Así que llámalo como quieras, sí, llámalo como quieras. Mi bebé vuela como una corriente de aire, por encima de toda la escena, me ama como si fuera nueva. Así que llámalo como quieres, sí, llámalo como quieras. Quiero llevar su inicial en un collar alrededor de mi cuello, no porque me pertenezca, sino porque realmente me conoce, más de lo que ellos pueden decir".

Call It What You Want — Taylor Swift

Al final la carrera terminó y si mal no recordaba, Lewis había acabado primero, Max tercero, Carlos séptimo y Charles décimo. No estaba segura de si él estaba feliz por acabar ahí, pero si no lo estaba, tendría que animarlo, como él lo había hecho antes.

Lo vi acercándose a nosotros, mis padres hablaban animadamente con Max y Lewis, y yo me acerqué a Charles con una pequeña sonrisa.

—¿Estás bien? —fue lo primero que le pregunté cuando ya estuvo enfrente de mí.

—La verdad que sí, aunque estoy seguro de que lo pude hacer mucho mejor —volteé los ojos. Sabía todo lo que se estaba esforzando y odiaba que soltara esos comentarios. Lo había hecho increíble y eso que no sabía mucho de carreras, pero le estuve preguntando a mi padre e incluso él me dijo que lo había hecho bien.

Aunque no podía reclamarle nada porque yo era igual.

—No voltees los ojos porque eres igual que yo y lo sabes —asentí.

—El caso aquí es que lo hiciste muy bien, no tienes que machacarte tanto con esto, Charles —él asintió y me abrazó por los hombros.

—Gracias por los mini ánimos, ahora vamos con el resto. He oído que tu padre ha organizado una cena para la familia —asentí con una pequeña sonrisa.

Después de todo, aunque no compartiéramos sangre, éramos como una pequeña familia y nos apoyábamos continuamente, o al menos eso es lo que intentaba mi padre.

—Y como siempre, varios acabaran borrachos y tendrán que dormir en casa —él soltó una carcajada comenzando a caminar junto a mí.

—Eso es seguro, apuesto que esas personas serán Daniel, Max, Lewis y posiblemente Carlos —le miré.

—Yo creo que Lewis no beberá, pero sí tú —él me miró ofendido.

—¿Cómo puedes decir eso sobre mí? Soy la persona más sana que conoces —solté una pequeña risa abrazándolo por la cintura como podía.

Qué cambios, hace horas pensaba que nos llevábamos mal y ahora nos encontrábamos de esta manera.

Pude ver como él sonreía y se colocaba las gafas de sol.

—Como te encanta llamar la atención, creo que no puedes estar ni un segundo sin llamar la atención —le dije divertida.

—La verdad, es que debo admitir que te equivocas. La única atención que busco es solo de una persona, pero está tardando.

Solté una pequeña risa.

—Pues seguro que esa persona está ciega.

—Lo he llegado a pensar —reímos de nuevo y él paró logrando que lo viera confundida.

—¿Qué ocurre? —él se quitó la gorra para colocármela a mí.

—Hace bastante sol.

—¿Y tú qué?

—Yo estoy bien, por mí no te preocupes —solté un pequeño suspiro.

—No voy a discutir con un terco como tú, es mejor pasar de ti —él rio y volvió a abrazarme por los hombros.