_Thalía: Ly, despierta ya, llegarás tarde al trabajo.
Poco a poco abrí los ojos bajo la intensidad con la que me movía Thalía para que despertara.
_Yo: Buenos días a ti también Thay.
Aprecié a mi mejor amiga en lo que caminaba por mi habitación.
Thalía es una chica de mi edad, 25 años, mulata, morena, de ojos color miel y pelo rizado. Mide al rededor de 1,75 metros. Trabaja de modelo para algunas agencias famosas de la ciudad. Se caracteriza por ser responsable y amigable, por su trabajo lleva una dieta estricta, por ello es la cocinera de la casa.
Yo, sin embargo, soy muy diferente, soy morena de ojos marrones, mido 1,68 metros y no soy nada responsable. Trabajo en una tienda de skates y patines. Me encanta el deporte, uno de ellos y mi favorito es el patinaje, pero también salgo diariamente a correr en la noche, pese a lo activa que soy, siempre me cuesta levantarme por las mañanas.
Me levanté y camine detrás de ella hasta la cocina. Donde ya había servido una granola de desayuno. Miré el espejo que teníamos en nuestro salón y vi el reflejo de las dos sentadas en la mesa, la diferencia es que mientras ella estaba arreglada, ya que había vuelto del gimnasio y ya estaba duchada y luciendo como la modelo que es, yo estaba con un pijama corto de aguacates y despeinada.
_Thalía: En una hora tengo sesión de fotos cerca de la tienda, podemos tomar algo en tu descanso. Estaré allí casi que todo el día haciendo varias campañas.
_Yo: Vale.
_Thalía: Y el sábado en la noche tengo un evento, una premier de una película. Irán los actores, las empresas colaboradoras, la productora y artistas invitados. ¿Quieres venir? Tengo dos entradas para acompañantes.
_Yo: Si -dije comiendo el final de mi granola-
_Thalía: De verdad que contigo no se puede tener una conversación a estas horas de la mañana.
_Yo: Son las nueve de la mañana.
_Thalía: Y abres la tienda a las diez, así que ve a vestirte y a ponerte los patines. Ya hablamos después del evento. Nos vemos a las dos para almorzar. Y si va Nea dile que también puede venir a comer -dijo levantándose y poniendo ambos bolws en el lavaplatos-
_Yo: Bien.
Caminé de nuevo a mí habitación y me preparé para ir a trabajar.
Nuestra casa era una terrera algo grande en una de las zonas privilegiadas de la ciudad, que forma parte de un complejo de casas. Únicamente tienen acceso los vecinos. Somos 30 propietarios, entre ellos Thalía y yo. Como existe una separación considerable de media hectárea entre casas no conocemos a la mayoría de propietarios, ya que van representantes de muchos de los propietarios a las juntas.
Me puse los patines en la escalera del porche de mi casa y fui patinando por el asfalto. Y al cabo de media hora patinando por las calles de la ciudad, llegué a la tienda, un trayecto que en coche es de 15 minutos y en patines media hora.
La tienda estaba llena de skates y patines, la decoración que había, era el logo de la empresa en neón.
Abrí la tienda, me puse las playeras que siempre tengo en la taquilla y me puse a trabajar. Saqué varios patines y skates del almacén, para rellenar lo que faltaba y poco a poco fueron llegando los clientes.
En la tienda se hacían reparaciones, mantenimiento, cambios de piezas, compra de materiales y complementos, además de la venta de los skates y patines.
Unas horas después llegó mi jefe, el dueño de la tienda, un chico unos años más grande que yo, no siempre iba, pero muchos de los días estaba allí. En su mayoría para ayudarme a las reparaciones y mantenimiento, ya que al ser una sola en la tienda, tenemos que quedarnos con los skates o patines, para poder hacerlo en mi tiempo libre.
_Yo: Nea, saldré a almorzar con Thay en la hora de descanso ¿Quieres venir? -dije apretando una rueda de un skate-
Enea es mi jefe, tiene 32 años, siete años más que yo, el dueño de la tienda. Nos conocimos aquí, desde que abrió eché el currículum y he sido la única empleada que ha tenido desde que abrió hace cinco años. Nuestras "cenas de empresa" parecen citas, ya que nos llevamos bastante bien, muchas veces hemos salido juntos de fiesta con Thalía y digamos que somos una pequeña familia.
_Enea: Si claro, hace tiempo que no veo a Thay. ¿Está por aquí haciendo alguna sesión?
_Yo: Si. Me dijo esta mañana que estaría casi todo el día aquí cerca.
_Enea: Bien, al menos es cerca de casa está vez. Normalmente le toca en el centro de la ciudad.
Seguimos arreglando skates hasta la hora de comer, cuando Thalía entró a la tienda.
_Thalía: Hola hola.
_Enea: Hola Thay. ¿Como estás?
_Thalía: Agotada. ¿Ustedes?
_Enea: Cansados también. Vino mucha gente en la mañana. Ly no paraba. Cerremos y vayamos a comer.
Salimos dirección al restaurante que Thalía había escogido. Allí nos sentamos y estuvimos hablando un rato.
_Thalía: Tengo para el sábado dos entradas para acompañantes para un evento. ¿Quieres venir Nea? Ly ya me dijo que sí.
_Enea: Claro.
Enea era un chico que parecía serio a plena presencia, pero en confianza es una persona totalmente contrario a lo que aparenta. Mide 1'77. Moreno de pelo ondulado.
_Thalía: Van numerosos famosos, entre ellos Angelina Jolie, Brad Pitt, Kylie Jenner y muchos más.
_Enea: Tal vez es tu oportunidad de encontrar pareja ¿Cuánto tiempo llevas soltera Thalía?
_Thalía: Años, dos o tres. No me acuerdo exactamente. Aunque aquí nadie está para hablar. Tú llevas desde que te conozco soltero y Ly desde hace cuatro o cinco años también, lo único que tuvo no fue nada serio.
_Enea: Yo no tengo novia porque no quiero, no porque no pueda.
_Yo: Ni nosotras.
Al terminar de comer cada quien volvió a su trabajo. Esta vez, yo me quedé arreglando las cosas mientras él atendía a los clientes.
ESTÁS LEYENDO
Bajo la tormenta
РазноеQue pasaría si un día, de la noche a la mañana, lo que pensabas que era ficticio ahora es real. Mi nombre es Lyra y vivo en una gran ciudad, Whitelerly. Una ciudad con más de dos millones de habitantes. Vivo cerca del "Gran Bosque" o así lo ha llam...