Que pasaría si un día, de la noche a la mañana, lo que pensabas que era ficticio ahora es real.
Mi nombre es Lyra y vivo en una gran ciudad, Whitelerly. Una ciudad con más de dos millones de habitantes. Vivo cerca del "Gran Bosque" o así lo ha llam...
_Enea: Irás el sábado ¿Cierto? -dijo comprobando que las ruedas del skate no se traban-
_Yo: Si.
_Enea: ¿No te invitaron a tí?
_Yo: Yo me retiré del modelaje hace años. Yo ya no existo para la industria.
_Enea: ¿No piensas volver en un futuro?
_Yo: No. No es algo que me haga ilusión. Antes si me gustaba, era arte, ahora exponen a las modelos. Y no es una crítica a Thalía, para nada, es mi opinión, pero cada quien tiene una. Antes las pasarelas eran para mostrar nuevas colecciones de marcas grandes, ahora es pura exhibición, mucha de la ropa que se modela no se puede poner -dije colocando mercancía- la moda ya no es lo de antes. Con ese trabajo conseguí mi casa, mi coche y gran parte de lo que tengo, ahora con este no me ha impedido hacer lo que me gusta, viajar y disfrutar de unas vacaciones.
_Enea: Entiendo que pienses así de la moda, cada vez es más exhibicionista y más incómoda, pero igual es lo que se vuelve popular. Ve a casa y descansa, yo termino y cierro.
_Yo: No falta mucho, entre los dos terminamos.
_Enea: Ve a casa Ly. Aprovecha para hacer tus cosas.
_Yo: Ten buena tarde entonces. Nos vemos en estos días, si no el sábado -dije abrazándole-
_Enea: Nos vemos el próximo día, Ly. Descansa. Y ten cuidado en el bosque si vas a ir a correr, ya sabes.
_Yo: GPS activo, avisar cuando salga y cuando llegue, no más de tres horas y no entrar en profundidad. Tranquilo Nea. Lo tengo todo controlado. No salgas tarde.
Me quité las playeras para ponerme los patines. Y fui por las calles de la ciudad hasta llegar a casa. Me puse un chándal gris, un top negro, me hice una cola, me puse mis playeras de deporte negras y puse música.
Poco después llegó Thalía.
_Thalía: ¿Irás a correr?
_Yo: Sí. Ahora en un rato. Lo que me cambié ya. ¿Qué tal la sesión?
_Thalía: Bien. Eran bañadores casi todo, algún vestido y campañas de grabación de cremas solares. Estoy cansadísima. Creo que me he cambiado doscientas veces de ropa hoy.
_Yo: Bueno. Ya lo siguiente es el pase de modelos. Nada más en esta semana. Yo tengo que ir a trabajar igualmente. Nos vemos a la noche. Voy a correr.
Salí de la casa y empecé a estirar. Pasados unos minutos de calentamiento empecé a trote suave procurando mantener todo el tiempo el ritmo constante.
El bosque, al ser de gran tamaño no existe ruido ninguno más que el de mis pisadas.
Llegué al pequeño lago, allí me senté, saqué algunas fotos y comí mi barrita de snack junto a una manzana que cogí antes de salir.
Ya se iba haciendo de noche y vi como poco a poco salía el atardecer hasta quedarse en una noche oscura con una luna llena brillante y preciosa.
Después de observar las estrellas por unos minutos, me puse en pie, calenté y volví a trotar.
Escuché un ruido antes de salir del claro del lago y rápidamente giré alerta.
De entre los arboles salió un lobo de casi dos metros de alto, mucho más grande de lo normal. De porte amenazador.
Di pasos lentos hacia atrás a la vez que esté avanzaba.
Escuchamos ambos un ruido proveniente de mis espaldas, miramos los dos hacia esa dirección y apareció otro lobo con las características similares, pero este si llegaba a los dos metros.
El primero de los dos gruñó y el segundo empezó hacer lo mismo mientras ambos de acercaban entre ellos. Di varios pasos hacia atrás, con la intención de apartarme y a su vez de ir buscando el momento en el que se despisten para salir corriendo.
Desde que di un paso más hacia atrás, ya ambos se giraron.
De un momento a otro saltaron uno sobre el otro y empezaron una pelea.
Finalmente terminó ganando el segundo de los dos. Me cogió del pulover y me subió a su lomo como pudo, yo estaba en estado de shock. Caminó hasta la parte más profunda del bosque, se metió en una cueva y se agachó para que me bajara del lomo.
Eso hice y pude apreciar como le faltaban algunos mechones de pelo y piel ensangrentada descubierta a la altura de las costillas.
Pasé mis dedos por los alrededores de la herida, observando levemente esta.
Se alejó unos metros y el lobo pasó a ser un hombre, este se encontraba en el suelo.
_Yo: Un hombre lobo -dije sin creerlo-
_?: ¿Quién diablos eres? ¿Y qué haces en el bosque a estas horas? -dijo aún en el suelo-
Antes de poder contestar sonó mi teléfono.
_?: Sea quien sea, dí que estás bien. No te haré nada -dijo antes de que lo cogiera-
_Yo: Estoy bien, Thay. Iré en un rato a casa -dije al cogerlo-
_Thay: De acuerdo. Me había asustado porque se fue tu ubicación.
_Yo: Tengo poca cobertura -dije comprobando el móvil y viendo que esa persona desconocida desapareció del suelo- nos vemos después -dije colgando y buscando a ese hombre-
_?: Ya iba a traerte un té, para que sigas hablando -dijo sarcástico mientras salía de un lado con sombra de la cueva- respóndeme a la pregunta que te hice -dijo apoyándose en la pared-
_Yo: No te interesa quien soy, solo estaba corriendo. Ahora dime tú ¿Por qué ese numerito con quién, supongo, que es otro hombre lobo?
_?: No sé quién era. Pero esa persona si pretendía hacerte daño -dijo acercándose a mi-
_Yo: Esa herida se veía fea.
_?: Me perforó una costilla, pero en un par de días ya estaré bien. Tenemos una curación más rápida que la de un humano normal.
Se puso más a la luz y pude apreciar como era, ya que dentro de la cueva, únicamente veía su figura. Un chico alto, de aproximadamente dos metros de altura, moreno, ojos azules con tonos verdes en su interior, atlético. Bastante guapo.
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_Yo: Me alegro que puedas curarte rápido, pero yo necesito llegar a mí casa. ¿Me indicas como llegar al lago?
