El amor con mi desamor [°Companyhumans°]

Episodio 26 Blumhouse

En el momento que la luz se había ido hace varias horas, ninguna de las empresas podía trabajar en la oscuridad, sin embargo había una sola compañía que si tenía la habilidad de hacerlo; ese era Blumhouse. Mientras todos gritaban desesperados por el apagón, éste estudio simplemente se la pasaba trabajando con sus proyectos en plena oscuridad, gracias a que él mismo reconocía cada detalle de su oficina y notaba en donde estaba cada cosa. Aunque no tuviera electricidad para usar su computadora o celular, escribía todo en papeles sencillos con bolígrafo y dibujaba los bocetos sin importarla la falta de iluminación. Desde que era un novato en el mundo del entretenimiento, siempre le agradaron las películas de terror y suspenso; su gusto hacia ese género era tan genial que decidió seguir ese camino terrorífico para entrener. Y como era de costumbre, no le temía a la oscuridad y gracias a esa paciencia lograba trabajar pacíficamente.

Debía admitir que la luz casi siempre lo solía molestar, y por eso, bajaba un poco la intensidad de ésta para concentrarse mejor a la hora de cumplir sus labores.

En las horas libres, no acostumbraba a hablarse con muchos; quizás de vez en cuando se hablaba con Universal o Laika pero nunca había algo divertido que compartir con ellos, sin embargo si tenía a un mejor amigo con el cual disfrutaba todos sus momentos en la vida: Sony.

Desde un principio, nunca creía que se llevaría bien con él, pero fue todo lo contrario; ahora es la mejor amistad que ha tenido y actualmente lo sigue siendo, sólo que a veces...Sony podía ser irritable con sus problemas personales, ya que no los sabe controlar.

En el buffet del piso 3 de comida rápida, las cosas no estaban yendo del todo bien para Sony, pues no paraba de beber licor y eso le preocupaba muchísimo a Blumhouse hasta que se decidió por preguntarle sinceramente
—Última vez que te lo pregunto: ¿qué diablos te sucede, Sony? hace años que no bebés así en exceso, ¿quieres decirme lo qué pasa?— habló con paciencia y una voz relajada
—¡No lo entenderías! ¡soy un asco de empresa! ¡jamás seré lo suficiente para ella!— balbuceaba exaltado mientras golpeaba su vaso de alcohol con la cabeza baja en la barra del lugar sin mostrar la cara
—¿De qué estás hablando?—
—¡Columbia ya no me ama! ¡eso pasa! ¡waaaaa, soy un pésimo esposo! ¡¿qué he hecho mal?!— lloraba desesperado mientras más se embriagaba. Por otra parte, Blumhouse si se encontraba preocupado pero a la vez...se sentía feliz "¡Oh, si! ¡al fin terminó con la bruja! es mi oportunidad para conquistarlo, jeje", pensó ingenioso
—Mmm, honestamente pienso que es lo mejor para ti. Columbia siempre fue...bastante exigente contigo, deberías dejarla y dar vuelta la hoja— aconsejó de una manera metafórica, pareciendo un "experto" en lo que decía
—¡No puedo! ¡mi corazón no quiere abandonarla! ¡la amo mucho! a-además nuestra hija se sentiría terrible si se entera de nuestra separación😭—
—Ya no es una niña. Aparte, ella no es única, ¿qué me dices de Screen Gems?—
—Mi hijo no sabe nada, él...está molesto conmigo y Columbia. Básicamente no le importa— hablaba deprimente. Blumhouse ya no soportaba que su amigo continuara así por el alcohol, y por eso no tuvo otra opción que quitarle la bebida
—Ok, suficiente, vámonos a nuestras oficinas antes de que nos regañen, ¿te ayudo a caminar?—
—E-estoy bien...*hip* p-puedo...hacerlo solo...*hip*— intentaba levantarse y caminar a la vez, pero sus piernas y mente lo traicionaban cruelmente hasta casi caerse al suelo y el mayor lo atrapó de inmediato
—Quedate quieto, yo mismo te llevaré, je—
Blumhouse lo cargó en sus brazos como si fuera una princesa y se lo llevó hasta que llegaron a su piso correspondiente y luego fueron directo a sus oficinas
"Dios, tenerlo en mis brazos se siente como un sueño hecho realidad; su rostro es tan bello que me sonroja y en la manera que intenta recomponer el sueño es adorable, ojalá...algún día te des cuenta lo mucho que te amo".

Más tarde, Sony se había quedado dormido en su silla mientras apoyaba su cara en el escritorio del cansancio. Blumhouse no podía dejar de verlo, mirarlo era como un vicio bastante placentero de disfrutar; el menor conservaba de dormir tan tranquilo a medida que el contrario le acariciaba el rostro
—Mmm, tus mejillas son muy suaves— comentó continuando con el acto. Sin esperarlo, el dormilón comenzó a moverse un poco conforme soñaba delirando el nombre de su esposa como si fuera una pesadilla de abandono mientras lloraba. Esto sorprendió a Blumhouse por un instante, cambiando su expresión feliz a una triste
—No te preocupes, yo me encargaré de ayudarte...— dijo con un suave beso en la mejilla del menor y limpiando sus lágrimas
—¡No...inventes! ¡OMG!—
Se escuchó una voz emocionada y reconocida; al voltear, se percató de la presencia de Netflix siendo un completo chusma
—¿Qué mierda...haces aquí?— preguntó tenebroso
—Oh, nada, vine a platicar contigo sobre algo importante pero al final terminé encontrando tremendo ship, jiji—
El más grande no le contestó, no sin antes llevarlo de su brazo hasta afuera y hablar con éste en privado, lejos de Sony
—¡¿Tú qué carajos quieres?! llegas a decir una sola vocal sobre lo que viste...¡y te cortaré las cuerdas!— lo amenazó con una navaja en su cuello que parecía falsa de creer
—¡T-tranquilo! ¡s-soy un cierre de labios! jeje— dijo nervioso con las manos en alto
—Eso espero...ahora dime que quieres— finalizó guardando su instrumento filoso en su bolsillo trasero
—Mmm, pues...quería preguntarte si...puedo tener la película de FNAF en mi plataforma, je—
—¡¿Otra vez con eso?! ¡esta es la séptima vez que te digo que no tienes suficiente dinero para que puedas tenerla ahí!—
—¡Te juro que si lo tengo! ¡mira!😭—
Netflix buscaba desesperado sus billetes por todos los bolsillos del traje negro y desafortunadamente se dio cuenta que no los tenía a mano
—Pff, deja de perder el tiempo. Te ves ridículo tratando de convencerme—
—¡D-dame tiempo! sé que debe estar por aquí...¡ajá! ¡aquí tienes!— dijo felizmente entusiasmado mostrando todo lo que tenía: una moneda y un billete de 100 dólares
—¿Es una broma, verdad?—
—¡Ah! e-esto no es...d-disculpa, sólo necesito-...—
—¡Suficiente! desaparece de mi vista, me haces perder el tiempo— concluyó empujándolo a un lado para marcharse, sin embargo el denso estudio lo detuvo otra vez
—¡Por favor, Blum! si tengo los derechos de tu película, mi audiencia podría regresar😭—
—Agh, ¿no tuviste demasiado con "Nimona"? ¡¿qué más quieres?!—
—¡Ya pasó de moda y las ideas se me están acabando!—
—Pues no es mi problema, resuelvélo tú mismo SIN mi ayuda—
—¡Porfaaaaaa!—
Harto de soportarlo, del impulso lo empujó hasta tirarlo al suelo
—¡¿Quieres qué tus cuerdas parlanchinas se corten ahora?!— amenazó nuevamente sacando la navaja, no obstante logró calmarse rápidamente al ver a Sony llegando a la escena todavía un tanto cansado y frotandose los ojos
—¿Por qué hay tanto ruido...?—
—¡Ah! ¡S-Sony, cari-! ¡d-digo! ¡amigo! ¿no se supone que deberías estar descansando?— mencionó guardando su arma disimuladamente y yendo hacia él
—Lo estaba hasta que te escuché gritar en los pasillos😑—
—Lo siento, jaja. Es que tenía problemas con éste idiota y no supe controlarme, ya sabes como soy con la tolerancia—
—Adivino: ¿es Netflix otra vez?— lo mencionó aburrido. Se asomó un poco y vio que tenía razón
—¿No te cansas de fastidiar, cabeza de calamar?—
Al estudio terrorífico le causó gracia el apodo
—¡Hmg! ese es un buen nombre—
El metiche pudo levantarse pacífico, sin embargo no le gustaba cuando se burlaban de él
—Oigan, no se pasen con los apodos >:(—
—Wow, quien diría que el más polémico del edificio resultara ser el más frágil—
—¡¿Frágil?! ¡nunca te he molestado con tu contenido! ¡¿quién te crees?!— resongó Netflix señalandólo mientras que ambos amigos seguían burlándose a propósito
—¿Cuántas veces te coges a Star Channel por día? lo pregunto porque siempre la veo muy feliz contigo, ¡jajaja!— carcajeaba Sony junto a su amistad
—¡Te estás pasando de listo, infeliz!—
—¿Te molesta qué diga lo cierto? jejeje— comentó Blumhouse involucrado en las burlas
—Agh, váyanse al pasto, malditos pervertidos— finalizó Netflix su conversación yéndose de la situación súper enojado.

Las empresas que lo habían molestado no se sentían arrepentidos de nada. Disfrutaron muriéndose de risa por el chismoso que siempre molestaba a todos.

Blumhouse notó que Sony ya no estaba ebrio y tampoco delirante, por lo tanto podía seguir disfrutando de compañía, pero lamentablemente había llegado la hora del trabajo.

La empresa mayoritaria del género thriller tuvo que regresar a su puesto, además de aguantarse a su rival asignado, Lions Gate. Aquella compañía del león era súper exigente a la hora de cumplir y revisar detalles profundos en sus proyectos, básicamente creyéndose el "director ejecutivo" cuando ni siquiera ha recibido una queja a causa de su perfeccionismo. Cabe aclarar que Blumhouse nunca sintió nada por él y sólo lo ve como un enemigo insoportable e incapaz de colaborar con otros.

Luego de tantas vueltas, llegó a la oficina de Lions Gate, que lo esperaba sentado mientras leía un libro con sus lentes negros puestos. Conociéndolo bien, sabía que sólo quería hacerse el interesante, pues se notaba mucho aunque no lo parezca
—Wow, literalmente desapareciste como un fantasma hace rato, ¿en dónde has estado? ¿tienes idea la cantidad de tiempo que me hiciste perder?— se quejaba tranquilamente el empresario del gran felino pero el contrario lo ignoraba intencionalmente para no soportarlo
—En vez hacerme preguntas estúpidas, deberías encargarte de las bases de dibujos. Desde aquí puedo ver que aún no has terminado—
—Así es, estas son tuyas. Terminé los míos hace media hora y tú ni siquiera has comenzado— dijo dándole golpecitos a la pila de papeles que su compañero debía completar por su ausencia
—Ja, me hubieras avisado antes, lástima que tu memoria siempre es inútil para recordar cosas importantes—
—¿Me viste cara de secretario? organizate como corresponde, torpe—
—Agh, cállate, no tengo ganas de discutir hoy. Trabajemos de una vez antes de que Regal venga a revisarnos—
Sin más quejas, ambos enemigos molestos iniciaron a trabajar con normalidad sin tener ninguna comunicación verbal o visual; cada uno hacía su parte del trabajo.

A medida que Lions Gate estaba en lo suyo, Blumhouse tuvo la brillante idea de distraerse con su celular para chatear con Sony en privado

                           Chat

B: ¿Aburrido? jaja

S: Se siente muy tedioso trabajar solo...sin mi bella Columbia nada tiene sentido😭😭

B: Superála. Ella nunca supo valorarte :/

S: ¡Es un desafío enorme! temo que venga a mi oficina sólo para pedirme el divorcio😰😢

B: No sobrepienses demasiado. Si quieres intentar olvidarla, entonces tienes que fijarte en alguien más

Mencionaba Blumhouse astuto con un as bajo la manga para intentar conquistarlo rápidamente

S: Es que...no consigo enamorarme otra vez, me cuesta hacerlo. Es una relación que mantengó durante años :(

Cuando estaba a punto de contestarle, su celular fue arrebatado por su horrible oponente
—¡Déjate de juegos y trabaja! tendrás tu teléfono cuando nuestra hora laboral termine hasta el próximo descanso—
—¡Devuelvemelo, imbécil!— exigió intentando agarrarlo pero el otro siempre se lo esquivaba. El celular empezó a vibrar por los nuevos mensajes y Lions Gate los revisó de intrigante
—Oh, vaya, no sabía que tú y Sony se tenían muchas ganas, je— se burlaba con risas silenciosas
—¡Cállate y regrésame lo que es mío!—
Ambos seguían empujándose y moviéndose con el objetivo de tener el teléfono. Una cosa llegó a la otra y se cayeron encima
—Blum, te envié unos mensajes hace rato, ¿te llegaron?— entró Sony desprevenido al sitio y quedó impactado al ver la escena presente
—Mmm, ¿estoy interrumpiendo algo?— habló incómodo. Los dos rivales se acomodaron rápidamente en sus asientos mientras Blumhouse aprovechó a tomar su celular nuevamente
—Oh, no es nada, amigo, solamente estábamos discutiendo porque éste bastardo me quitó algo que me pertenece, y por esa razón me tarde en contestarte...— explicó apenado el de la casita oscura
—Eh...está bien, supongo. Si estás ocupado lidiando con el "gatito", entonces te veré en la hora del descanso, ¿te parece?— sugirió Sony tranquilamente y su amigo contestó enamoradamente entusiasmado
—¡Si, si! estaré ahí, ¡lo prometo! adiosito—
Lions Gate no tenía palabras, se quedó atónito con lo que presenció y no sabía responder exactamente
—¿Qué acaba de pasar?— se preguntó confundido.

En el instante que el horario del descanso llegó, Blumhouse y Sony se reunieron en el buffet como todos los días, en donde hablarían mejor todos sus temas de conversación. Durante la charla, la empresa aterradora no dejaba de ver y escuchar a su fiel amigo; cada palabra que soltaba era una linda melodía de escuchar. Su concentración hacia él era tan especial que no podía mirar otra cosa, parecía como una bonita droga de gozar.