Al fin estaba tranquilo. Bueno, quizás faltaba dar algún que otro cierre a ciertos temas pero podría decir que era momento de respirar con comodidad. Su pareja no podría ser más perfecto y comprensible, su grupo de amigos estaba completo al fin (en gran parte su alegría se debía a ello, puesto que nunca había estado alejado de Renjun tanto tiempo, quizás la vez que estuvieron separados por una semana debido a una discusión fue cuando más días paso sin verlo, así que casi cinco años de ausencia lo hirieron y se vio obligado a conseguir algo de ayuda terapéutica junto con el apoyo de sus seres queridos), el ahora novio de su madre había hablado seriamente con él y Dongmin en la mañana, pidiéndoles autorización para cortejar formalmente a la mayor, así que ambos accedieron luego de una taza de té.
Sobre sus traumas de la adolescencia no tiene casi ningún rastro, ya que su novio se encargó de apoyarlo cada vez que sintió no soportarlo. La vida era calmada aunque aún le faltaba resolver ciertas cosas. El asunto entre Jeno y Renjun también le afectó en cierta parte, incluso si no era su relación, él recuerda claramente el ataque de ira más grave que presenció. Una relación superficial no podría haber provocado aquello.
Tomó asiento en su alfombra blanca y subió el volumen a la película que había puesto hacia unos minutos. Mark había llegado de su oficina hacia una hora pero, al haber sido un día pesado puesto que aún sus costillas no estaban sanas, se tomaba todo su tiempo para tomarse baños calientes. Su novio dejó de necesitar ayuda para tareas básicas hace unas semanas y ambos estaban esforzándose por llevar su terapia correcta y estrictamente como el doctor les recomendó. Incluso si aquello implicaba que Hyuck mordisqueara sus labios por la impresión que le generaba dejar a Makku sin ayuda. Justo cuando comenzó a preocuparse por el tiempo que estaba tardando, la puerta del baño fue abierta, mostrando a un Mark con su pijama de seda azul y una toalla en la cabeza.
–¿Que veremos? – Fue la primera frase que dijo el mayor cuando se acercó a él lentamente y luego besó su coronilla.
–No hagas eso... te hará doler.– Puchereó Hyuck al oírlo soltar un gemido que fue camuflado como un suspiro; el castaño sabía lo mucho que le dolía inclinarse. Se puso de pie y lo abrazó por el cuello, oliendo el magnífico aroma que desprendía su novio luego de usar su crema de afeitar. –Hoy te extrañé un poco.
–¿Hum? Pero salí tarde esta mañana, estuvimos poco tiempo alejados, amor. – Mark posó sus cálidas manos por debajo de su hoodie en sus caderas y besó su hombro. – Creí que solo yo era el que extrañaba. – Ambos rieron despacio y rompieron su abrazo únicamente para unirse en un suave beso. A pesar de que estaban cumpliendo cuatro años y meses de noviazgo, ambos se encargaban de hacer cada momento único como desde el primer día.
–¿Como estuvo todo hoy? ¿No dolió mucho caminar de un lado a otro?.– Haechan estaba algo preocupado por ser el primer día de trabajo luego de un tiempo de licencia y no podía estar allí para ayudarle. Incluso intentó distraerlo esa mañana para que decida no asistir a su oficina pero fue en vano, pues el sentido de responsabilidad de Mark era aún mayor que su dolor físico.
–Fue un día bastante tranquilo, Shindong me acompañó toda la mañana. – Dijo refiriéndose a su secretario. –La primer reunión de la asociación fue en la sede de Ilsan, así que Jeno se encargó de hacer presencia y yo me quedé en la oficina adelantando sus trabajos. – Hyuck besaba sus mejillas de forma suave, mientras lo escuchaba contar su día. –¿Que tal tu mañana?.
Antes de que el menor tome la palabra, lo guió hacia el sillón y ambos tomaron asiento lentamente, una vez más sin permitirse ayudarlo para que sus músculos comiencen a trabajar solos. Iba a comenzar a hablar pero el teléfono de Mark sonó estruendosamente y el mayor solo vio la bandeja de notificaciones para luego mostrar un rostro extrañado.

ESTÁS LEYENDO
Injun!!! ·NoRen·
Teen FictionRen tiene una vida tan aburrida y gustos tan caros, que al final se decide por presionar en "Crear perfil" en aquella página llamada "Sugar Candy!"