En el fantástico mundo de Kumandra, humanos y dragones vivieron juntos hace mucho tiempo en perfecta armonía. Pero cuando unas fuerzas del mal amenazaron el territorio, los dragones se sacrificaron para salvar a la humanidad. Ahora, 500 años después...
Dos niños estaban preparándose para realizar una gran hazaña. Un niño con cabello negro se puso unos guantes sin dedos y agarró dos palos, que usaría como armas, de un armario, luego los metió en su cinturón. Este era Ray. Ray miró a la chica que estaba junto a él, que tenía cabello (L/c) de color (c/c), ojos (c/o), y piel (c/p). Esta era (T/n). Ella agarró dos dagas del armario de armas y las sujetó a sus muslos. Luego, los dos se ataron máscaras alrededor de sus caras para cubrir sus bocas y narices.
Ambos corrieron por el pasillo cuando de repente se detuvieron en un tocador. Ray notó un anillo para el cabello y lo usó para recogerse el pelo, mientras que la chica agarró dos anillos de dragón. Ella se puso uno en cada dedo anular.
Los dos se miraron y asintieron con determinación. Saltaron por una ventana abierta bajo la lluvia torrencial y aterrizaron en otro tejado. Luego, se bajaron del tejado y se dirigieron hacia un camino empedrado que llevaba a un edificio en las montañas.
...
Los dos niños entraron en un pasillo poco iluminado y se deslizaron silenciosamente por el. Ray pasó su mano por la pared cuando de repente se detuvo. Extendió su brazo para detener a (T/n). Se dio cuenta de que una parte de la pared era diferente de otra y eso lo hizo sospechar. Se bajó la máscara y observó las paredes. Vio que había hendiduras incrustadas en la piedra. Se arrodilló en el suelo y palpó el piso hasta que encontró uno que se movía. Se hundió y una red cayó rápidamente. Ray agarró a (T/n) y se apartó justo a tiempo.
―Vaya. Parece que alguien está tratando de ser ingenioso. ― observó Ray.
Sacó una pequeña bola y la golpeó. Esta se desenrolló para revelar una pequeña criatura parecida a un armadillo peludo.
―Muy bien, Tok Tok, vamos a mostrarles lo que realmente significa ser ingenioso. ― dijo Ray.
Tok Tok rodó por el suelo activando las trampas de redes, era demasiado pequeño como para ser atrapado por ellas. Se detuvo un momento y se distrajo con un insecto.
―¡Tok Tok! ¡Vamos! ¡Concéntrate! ― susurró Ray. ― No quieres quedar mal frente a (T/n), ¿verdad?
Tok Took inmediatamente olvidó al insecto y siguió rodando. Llegó al final del pasillo donde había una puerta y chilló.
Ray y (T/n) se arrastraron por debajo de todas las trampas de redes activadas y se acercaron a Tok Tok.
