Despues de una increible temporada de verano en Pinamar, todos esperaban con ansias la llegada de Camila Jara a Luzu. Lo que nadie esperaba es que gracias a eso, surgiria un ship entre nuestra pepona y el toro
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—Che, como que ya se tardaron Gian y Cami, ¿no? —exclamo Martina, mirando hacia la puerta de su depto. Hacia ya diez minutos desde que los susodichos se habian ido a buscar las pizzas.
—Capaz los secuestraron. —Jodio Nicolas, sin dejar de escribir en su celular.
Benza no puedo evitar soltar una carcajada, a veces su amigo Nico era gracioso. A veces.
—Hablando de Cami y Gian, ¿que opinan de ellos? —consulto Guada, atrayendo las miradas de sus dos amigos.
—¿Que opinamos de que? —Marti inclino su cabeza, dejando ver que no entendia su pregunta.
—Del Giamila, en realidad. —Aclaro la de pelo oscuro. —¿Piensan que puede ser verdad?
Tanto Nico como Marti se quedaron unos segundos en silencio, pensando en lo que Guada habia preguntado. Aunque Marti sabia sobre los sentimientos de su amiga y compañera Cami, no tenia idea de lo que pasaba por la cabeza y el corazon de Gian. Aunque estaba al noventa y nueve porciento segura de que su amigo sentia algo por Cami, existia el uno porciento... Y la estupidez de Gianfranco. Asi que estaba un toque complicado.
—Serian linda pareja. —Decidio contestar la de cabellos rubios oscuros. —Siento que Cami es la piba que Gian necesita para cambiar un toque... Su vida.
—¿Decis? —exclamo Guada.
—Puede ser que lo que dice Marti es verdad. —Opino el vegano, mientras se recostaba sobre el respaldo del sillon. —Pero lo que no se puede negar es como Gian mira a Cami cada que ella habla; nunca lo vi tan pelotudo.
—¿Pero vos como te sentis, amiga? —Fue Marti ahora quien pregunto a Guada.
—Yo... —Guada se quedo unos segundos en silencios, pensando bien en sus palabras y en lo que Gian era para ella. Finalmente, una sonrisa de boca cerrada se formo en su cara. Levanto su cabeza y fijo su mirada en Marti. —Lo que habia entre Gian y yo ya paso, el es mi amigo y quiero que sea feliz.
—¿Segura?
—Segura. —Asintio.
Justo en el momento en que su conversación se termino, la puerta del departamento se abrio bruscamente, pasando por ella una Camila completamente roja y un Gianfranco que sonreia con total diversion.
—Al fin, loco. —Exclamo con exasperacion Nicolas.
—8 horas para ir a buscar unas put... ¿Estan bien? —Marti observo a sus dos amigos.
—Joya. —Respondio rapidamente Gian, cruzandose de brazos y mirando a Camila, quien se encontraba con su mirada perdida y el rojo vivo en sus cachetes.
—Bueno... Comamos entonces, me cago de hambre. —Pidio Nicolas, agarrando la caja de pizza con opcion vegana.
Marti noto que algo no estaba bien con sus amigos, mas en particular con Camila. Se daba cuenta que algo paso en el lapso que fue a buscar las pizzas y Gian le llevo la plata que habia olvidado. Lo sabia, pero prefirio dejarlo para mas tarde. Ya iba a tener tiempo de hacer un interrogatorio.
