Era una fiera por fuera, pero por dentro escondía un corazón bueno y sincero, como no poder caer a sus pies, era llamada, La fiera, pero a mí ni me llegaba a eso, cuando me miraba y veía como me acercaba a ella, podía ver como temblaba y su mirada n...
Me estaba acomodando la corbata por última vez, tendría que ir obligado a la reunión de un socio que va a presentar a su hija a este mundo, una mimada más, sonreí al ver a Yuri echada en la cama, esa mujer es una leona en la cama, salí del cuarto, para entrar a uno de mis autos Lamborghini huracán. Me presento soy Dante Gotti uno de los más grandes mafiosos de toda la bella Italia, esta mafia fue de familia en familia, a mis 44 años, tuve una bella hija de 27 años la cual no vive en este país se decidió ir a otro país con su madre ya que mi mundo era muy peligroso para ella, de su madre es otra historia no quiero decirle que tal vez mi hija fue un error ya que estuve con su madre sin utilizar protección dejándola embarazada obvio me hice responsable cuidándolas con mi vida me case con Celeste, pero cuando nuestra hija cumplió 10 años decidió llevársela, solo la podía ver en fiestas y nada más pero a pesar de eso mi hija me amaba mucho más que a su madre, Esmeralda mi hija es mi luz. Llegue a la fiesta, todo era elegante, Tony no se quedó atrás esta era una fiesta. Llegue a la fiesta, todo era elegante, Tony no se quedó atrás esta era una fiesta
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- Oye Dante, Tony sí que la hizo linda – dijo Robert, mi amigo que miraba cada mujer que pasaba, este era un insaciable – oye sabes algo de la hija de Tony – dijo el sentándose en una de las sillas
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- Para serte sincero ni siquiera sabía que tenía una hija – dije serio buscando mi nueva presa de esta noche
- Sé que la llaman La fiera – dijo riendo, yo empecé a reír también
- ¿y por qué? – dije riendo
- Por su mirada y actitud fría – dijo tomando su copa de vino
- Eso tendría que verlo – dije serio – yo creo que es una niña mimada más – dije buscando a alguna rubia hoy tenía ganas de estar con una rubia
- Mira hay está sentada – gire mi rostro y no podía ver más que una diosa, una Fiera, su mirada penetrante, sus senos tenía unos senos enormes, sus curvas eran de locura parecía que no tenían parada, alguien tenía que manejar por ellas y ese alguien seria yo
- Ella es la elegida – dijo riendo, Robert me miro sorprendido
- Estás loco mano, ella es la hija de Tony es su hija menor, podría ser tu hija, ¿qué tienes? – dijo asombrado, yo lo mire serio - Estas seguro ¿que podrás con ella? – pregunto mi amigo Robert, yo la miraba serio desde un lado de la fiesta y podía ver como rechazaba a todos con la mirada, me pare arregle mi terno caro
- Mírame y veras – dije sonriendo – ella será mía – me alejé de mi amigo hasta que me puse al frente suyo, vi como levantaba su mirada con odio y cuando la puso en mis esos ojos cafés quedaron impregnados en mi mente, vi un poco de rojo en sus mejillas – buenas noches – dije con voz ronca – usted es... - dije esperando su nombre
- Mía Barsini Jones – dijo seria mirándome con frialdad, yo sonreí con picardía, agarre su mano y la bese
- Mucho gusto Mia– dije con sensualidad, ella se sonrojo – me podría permitir esta pieza señorita mía – dije, ella iba a negar, cuando la jale a la pista
