«Pintando sueños y corriendo destinos»

Capítulo 1: Un encuentro en las calles de Blue

En una cabaña oculta entre los árboles, Edda Rollers daba los últimos retoques a su obra maestra. Cada pincelada era una expresión de su alma, cada trazo llevaba consigo una parte de su ser. Al concluir, una sonrisa de satisfacción se curvó en sus labios mientras admiraba su creación con orgullo.

Con delicadeza, recogió sus herramientas y cerró su taller, llevando consigo el lienzo que acababa de terminar. Mientras caminaba por las empedradas calles de San Miguel, se envolvió en su abrigo, protegiéndose del frío de la noche que se filtraba entre las grietas de los adoquines.

En un cruce peatonal, las luces de una motocicleta rompieron la quietud de la noche, obligándola a detenerse. Una voz desconocida la interpeló, cuestionando su presencia en las calles. Con determinación, Edda respondió, desafiando la autoridad implícita en la voz del desconocido.

"Estas calles están reservadas para carreras", insistió la voz, antes de ser llamada por otro individuo. "Hey, Blue. ¡Vuelve a la carrera o te rebasarán!".

Edda se giró para observar al motociclista, quien, con una destreza impresionante, arrancó su moto y aceleró, dejando tras de sí una estela de velocidad y adrenalina. El rugido del motor resonó en el aire, una sinfonía de potencia y libertad.

Observando la vida vertiginosa del desconocido, Edda reviró los ojos y continuó su camino hacia casa. Al llegar, colgó su nueva obra en la pared y se recostó en la mesa, contemplando cada trazo con reverencia.

Mientras tanto, en el bullicioso centro de la ciudad, Lucas Hargrove, conocido como Blue, dominaba las calles en su motocicleta con una habilidad sin igual. Cruzando la línea de meta en primer lugar, fue recibido con aplausos y felicitaciones.

Su amigo y compañero, Evans, lo invitó a celebrar en un bar cercano. "¿Por qué te detuviste en la carretera?", preguntó Evans con curiosidad mientras levantaba su vaso.

Blue encogió los hombros con indiferencia. "Una chica estaba en medio de la calle. No podía simplemente pasar de largo", respondió con sinceridad.

Evans frunció el ceño. "Siempre tienes que ser el héroe, ¿no es así? Bueno, ¿vamos a celebrar o qué?"

Blue asintió con una sonrisa traviesa. "¡Por supuesto! Pero primero, una dama en el hotel cercano suena como una mejor idea".

Evans suspiró. "Siempre pensando en lo mismo, Blue. Eres un aguafiestas".

"Y tú un aburrido", respondió Blue con una risa mientras salían del bar, listos para continuar la noche de celebración.

«Continuará»

«Puede que el capítulo presente algún error, siendo así, es mi deber corregirlo, así que no dudes en hacérmelo saber en los comentarios»