Instantes

Cuando te encuentre

Porqué buscamos un Porqué?
Si existen respuestas que ya sabemos
Aunque nadie las haya dicho
En el fondo recolectamos cajas llenas de fotos nombradas recuerdos. Algunas han sido quemadas por los que te hicieron arder. Cada llama fue la responsable de desvanecer el momento convertido en papel.
Comenzamos en una lucha constante de querer saber porqué se apagó.
¿Por qué te quemaron tus fotos ? Si era un lindo recuerdo que hiciste con la intención de guardarlo para siempre.
¿Porqué?
Si buscas la respuesta , te aseguro que estará más cerca de lo que pensamos.
Es el tesoro escondido que te llevará a un sitio mejor al que acostumbras.
Piensa en las veces que no obtuviste la actitud que merecías y te sentaste en ese banco por horas a dudar si te ibas o no.
Piensa en tus noches llamadas días y en tus días llamados noches.
No olvides tu grito de silencio cuando querías dejar escapar aquello que tardaste en soltar.
Recuerda cómo te sentiste luego de escuchar aquella expresión que "no era para tanto".
Piensa mientras te balanceas en el columpio en cuando te dejaste de lado , e ignoraste la gota que quería caer de tus ojos , cuando olvidaste tus emociones,  cuando te olvidaste a ti , y solo pensaste en el por qué...
En el instante en el que recuerdes cómo te sentiste desecharas aquellas preguntas que atolondraban tu interior , cuando la respuesta siempre estuvo en ti.
La pregunta no es porqué lo hicieron.
La pregunta es ¿porqué lo permití?
¿Porqué acepté menos de lo que merecía?
¿Porqué dejé que quemaran mis recuerdos?
¿Porqué?
El tesoro seguirá oculto hasta el momento en el que esquives la piedra antes de ser lanzada hacia ti. Sabes que después costará trabajo sanarte ,
valdrá una foto más para tu caja de recuerdos felices , valdrá tus noches,  valdrá tus sueños ,Valdrá florecer ...
Valdrá el día que decides dejar de preguntarte porqué y sin esconder un suspiro, te aplicas un brillo en los labios , frotas por tu cuerpo el perfume con esencia de vida y aroma de libertad . Olvidas todas tus preguntas y arrancas a dar el inmenso viaje del camino hacia el amor propio.

Daniela Pérez Troya