Cap. XXXIII: "Te lo dije"

48 3 1
                                    

Cap. XXXIII: "Te lo dije"

Evelyn entreabrió uno de sus ojos y quitó su cabeza debajo de la almohada; le pareció haber oído el timbre de su casa pero ese día era sábado, apenas las 10 am y nadie podría estar molestando tan temprano.

Mati a su lado dormía con total tranquilidad y abrazaba a Beth. La niña se había pasado la noche anterior a su cuarto cuando una tormenta se desató durante la madrugada y, a diferencia de su hermano, odiaba los ruidos que la misma producía.

La morena se arrojó nuevamente contra la cama y cuando intentó conciliar otra vez el sueño, el timbre sonó nuevamente y alguien golpeó la puerta llamándola. Giró los ojos, abandonó la habitación con rapidez para no despertar a su familia y abrió descubriendo a Santana con la misma o peor cara que ella por la hora.

- ¿Qué haces aquí?- le preguntó tapándose el rostro por el sol que entraba directo a ella-

- Britt me obligó- murmuró la latina y su novia pasó al lado de ambas luego de dejarle un beso en la mejilla a Evelyn - está entusiasmada con la boda y dice que los talones nos pisan el tiempo y deben apresurarse-

- Que el tiempo nos pisa los talones- la corrigió Evelyn luego de que Santana bostezara y alzara los hombros-

- Tuve más de diez horas de viaje, Guijarro ¿te parece que eso me importa?-

- Bien, pasa- le palmeó el hombro Evelyn en un intento por cerrar la puerta pero no lo logró. Su rostro se invadió con una enorme sonrisa e inmediatamente corrió hacia afuera al ver una camioneta estacionada y alguien recostado contra ella, fumando un cigarrillo. Evelyn se impactó con un pequeño grito de alegría y en el abrazo la elevaron del piso para retenerla fuertemente- ¡Noah! –

- Hola, princesa- la saludó él de aquella manera que adoptó luego de que un miembro del equipo de fútbol, por su paso en el Instituto, le lanzara un granizado color rojo. El chico dijo que combinaba a la perfección con su amarillo en la coleta de cabello en forma de una diminuta corona-

- ¡Pensé que seguías en Los Ángeles! ¿Qué haces aquí?- le preguntó aún emocionada cuando su mejor amigo la regresó a su altura-

- Ya sabes, sin algo eres nada y bueno...Santana y Brittany me trajeron. Voy a entrar a la escuela militar-

- ¿De verdad? ¿Por qué?-

- Sam y Finn están ahí...Finnesa recibió un disparo en su pie- contó el chico y Evelyn abrió los ojos desmesuradamente-

- Oh cielos ¿de quién?-

- De el mismo- rió Puck y Evelyn lanzó una carcajada al instante- Felicitaciones por tu boda- le golpeó él el hombro con suavidad y la morena sonrió avergonzada-

- Gracias. No puedo creer que vaya a pasar-

- Tal y cómo una vez lo soñaste. Con Mati -

- Shhh no...no lo digas tan alto-

- ¿Y cuál es la novedad? Si así lo querías-

- Sí, lo sé pero...mejor pasa y nos ponemos al día. Rayos, Noah, dos años sin verte, maldito imbécil- le devolvió Evelyn el golpe pero en su brazo e insultando como nunca lo había hecho en su vida porque realmente había extrañado su presencia- tienes que ver a Beth y Joey-

- Imagino que ya deben tener cinco años-

- Imaginas bien- le sonrió ella ingresando a la casa y cerrando luego finalmente.

Adentro, Mati estaba en la cocina con su bata color blanca y preparando café. Se saludaron con Puck en un efusivo abrazo mientras Evelyn caminaba rumbo al cuarto de los niños por el llamado de Beth.

❤️ La Causa Perfecta Evelyn y Mati ❤️‍🔥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora