Beautiful Things

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Por milésima vez en el mes que llevaban casados, Ochaco se replanteó su matrimonio. Las cosas se habían enfriado desde su noche de bodas y cuando llegaron a su departamento, Shindo comenzó una rutina que consistía en despertarse, ir al trabajo, regresar, encerrarse en su oficina-a la cual no podía entrat- cenar, para finalmente culminar el día con el sexo más seco que la castaña había tenido en toda su vida, ¿Shindo siempre duró tan poco? Ochaco ya no sabía qué pensar, comenzó a sentirse como algún consolador, como una manga para pene, sin embargo, ni siquiera confiaba en su juicio, al menos eso quería creer, ¿Por qué no hecharle la culpa a las hormonas del embarazo? Era más fácil eso que aceptar la realidad en la que estaba viviendo. La chica fingió sus gemidos mientras veía al techo de la habitación, sabiendo que el acto terminaría pronto, entonces Shindo se levantaría sin mirarla y se iría a trabajar.

-¡Dios, Izuku! - El gemido de Shindo provocó que Ochaco saliera de sus pensamientos, su rostro pronto se tornó pálido, mientras pensaba en su realmente había escuchado bien, si fue su imaginación o si la culpa de sus acciones los últimos años finalmente la estaban haciendo perder la cordura, sin embargo, había escuchado el nombre de su hermano claramente, había escuchado a Shindo decir otro nombre mientras tenían sexo, mientras ella estaba embarazada, ambos estando casados. El shock inicial y la sorpresa fue reemplazado por una furia inexplicable, saliendo de su estado de estupefacción, apartó a Shindo con una fuerte cachetada en su rostro.

(...)

Un mensaje llegó a su celular, Katsuki sonrió mientras lo observaba, tomando con su mano libre su botella de agua para terminar de vaciar su contenido en sus labios, guardando si celular en sus bolsillos mientras caminaba a la salida del edificio para seguir con su patrullaje, en ese momento, como si se tratara del destino vio llegar a Shindo, que no se veia muy animado, en su hombro llevaba una maleta deportiva y viendo su ropa de civil, había llegado tarde al trabajo, tal vez demasiado viendo que habia pasado la hora del almuerzo, sin prestarle más atención y queriendo evitar cualquier nuevo enfrentamiento, Katsuki se limitó a ignorarlo.

-Vamos pelos de mierda. -Le dijo el rubio a su amigo pelirrojo, colocándose sus guantes para continuar con su horario de trabajo. El día realmente había sido tranquilo, en la mañana no hubo movimiento alguno, mientras que a medio día apenas y se reportó un intento de asalto que salió muy mal para el joven delincuente, sin embargo, hubo un cambio en su nuevo recorrido, comenzó muy leve, apenas una mirada curiosas de un civil que duró más segundos de lo que debería, luego fueron dos, pero eso era normal a tomar en cuenta lo romatizados que las personas tenían a los héroes, pero tal vez una hora más tarde esas miradas curiosas se transformaron en unas llenas de molestia, de repudio y Katsuki no pudo evitar sentirse agobiado con ese cambio. - Oye, Red Riot ¿Tengo algo en la cara?

-¿Mmh? No. - Kirishima por supuesto también había notado el gran cambio en la actitud de las personas, por un momento pensó que era su imaginación, sin embargo, pronto se dió cuenta de que si incluso Katsuki lo había notado, algo claramente estaba mal con ambos o con algunos de ellos. - ¿No crees que...?

Antes de que Eijiro pudiera terminar de hablar, fueron interrumpidos en el momento en que un objeto fue lanzado a ellos sin ningún aviso, el pelirrojo cerró los ojos esperando el impacto, con su peculiaridad activa, sin embargo, fueron pequeñas gotas de algún líquido las que salpicaron a su lado, cuando Kirishima miró a su mejor amigo, este estaba empalado desde el rostro hasta su torso por algo rosa que parecía ser una malteada. Frente a ellos, una chica que no parecía más allá de los dieciséis, se encontraba plantada con su rostro lleno de enojo contenido, claramente estaba apretando los dientes y parecía a punto de llorar.

-Oye niña...- Katsuki intentó hablar cuando fue interrumpido.

-¡Me das asco! ¡¿Cómo un bully como tú puede llamarse así mismo héroe?! - La joven gritó con toda la fuerza que pudo, los transeúntes se detuvieron, muchos de ellos ya habían comenzado a filmar desde que ambos héroes fueron atacados por la pequeña mujer.

Bully Where stories live. Discover now