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Y una nueva semana comenzaba. Era lunes y yoongi comenzaba el colegio, a su vez jungkook tenía la tan ansiada reunión con los rusos.

Yoongi! - grita el azabache enojado - Yoongi!

En ese momento se puede escuchar los pasos del adolescente bajando las escaleras. Yoongi no demora en aparecer en la vista del hombre, quién lo mira muy enojado.

Te llame hace una hora, y seguiste durmiendo, no te atrevas a decir que no - jungkook dice molesto. Yoongi quiere negarlo pero sabe que lo mejor es quedarse callado - tienes que empezar a ser responsable con esto, no estaré corriendo tras de ti para que hagas tus obligaciones - regaña mientras le ayuda a organizarse la corbata.

No me gusta - se queja el chico mientras jungkook hace el nudo.

Pues no importa, acaba de llegar el manual de convivencia y es obligatorio portarla debidamente, cuando vuelvas del colegio iremos a la peluquería a cambiar tu cabello - jungkook dice, y cuando ve la intensión de refutar del menor vuelva a hablar - No quiero quejas por conducta en el colegio yoongi, es una advertencia - yoongi simplemente asiente y jungkook copia su acción - ten, la puedes usar para comprar comida o si necesitas algo más - dice entregándole una tarjeta.

El adolescente asiente mientras la guarda en la billetera y a su vez esta en su mochila.

Bien, vámonos o llegaremos tarde - jungkook vuelve a hablar. Ambos salen de la casa y suben a la camioneta. A pesar de no ser tan temprano en la mañana, el tráfico estaba algo lento. Yoongi entraba a las ocho y jungkook debía estar antes de las nueve en el club para la reunión.

A pesar de todo, logran llegar cinco minutos antes de la entrada.

Adiós - se despide el adolescente bajando del auto. Jungkook no tiene tiempo de contestar pues este se ha ido rápido. El azabache lo ve hasta que entra por completo al establecimiento. Cuando está seguro de que nada pasará, suelta un suspiro y emprende camino de nuevo.

Veinte minutos después llega hasta el club. Las puertas son abiertas para el y entra al lugar con su aura imponente, recibiendo reverencias por cada trabajador del lugar, mientras camina. Cuando llega a su oficina, se encuentra con su "asistente" y con el chico de seguridad.

Buenos días señor Jeon - saluda la chica.

Buenos días, la sala de juntas está lista? - pregunta mientras toma asiento tras su escritorio.

Si señor, todo está listo y el señor hoseok informó que estaría llegando en 10 minutos - dice la chica.

Bien, prepara algunas bebidas y aperitivos, y cuando llegue hoseok que vaya directamente a la sala de juntas - dice poniéndose de nuevo de pie, para después caminar hasta el lugar ya mencionado.

Jungkook organiza algunos papeles sobre la larga mesa, mientras revisa que los contratos estén bien redactados. Rato después, hoseok entra al lugar dejando sin que decir al azabache.

 Rato después, hoseok entra al lugar dejando sin que decir al azabache

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Los hijos del señor Jeon Donde viven las historias. Descúbrelo ahora