Empezar de cero~Luckity

Capítulo 8

Han pasado unas semanas y todo iba bastante bien entre ellos, cada día se volvían más cercanos y se contaban más cosas del otro.

Un día Quackity le pidió a Luzu que durmiera con él con la excusa de que estaba empezando a hacer más frío y no quería que se enfermara. Claro que el castaño accedió porque aparte de ser un avance por su confianza, anhelaba dormir con él desde hace mucho tiempo atrás.

Ambos durmieron dándose la espalda, al pasar unos minutos, Luzu se dio cuenta de ciertos movimientos del pato ya que este estaba teniendo una pesadilla.

La pesadilla de Quackity era que Luzu le estaba destruyendo la casa, la escena cambió a una en donde lo traicionaba en la alcaldía, luego en una donde se encontraban en unas cápsulas y se encontraba Sapo Peta presente.

El pelinegro comenzó a tener miedo, no entendía esas pesadillas tan horribles que le aparecían y todas se relacionaban con Luzu. Este último no pudo soportarlo y decidió abrazarlo, poniendo una mano en su cintura y otra en su cabeza para acercarlo a su pecho diciéndole en voz baja "Todo esta bien Quack, estoy aquí".

Quackity empezó a calmarse luego de esas palabras cálidas de Luzu y volvió a estar tranquilo, luego ambos volvieron a dormir profundamente.

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El sol volvió a salir y el primero en despertar fue el que tuvo la pesadilla anoche.

Vio a Luzu muy cerca suyo así que se sonrojó, intentó alejarse para poder darle espacio y para luego levantarse, pero el castaño solo lo acerco más.

-¿Vlogs?-

-Quédate así un poco más, es cómodo.- dijo Luzu cerca de su oído para luego volver a dormirse.

Quackity no mostró resistencia y se quedo un poco más con él, claro que era cómodo y sobretodo cálido, no se quería separar de él ni de sus brazos nunca, se sentía seguro estando con él.

Un par de minutos después, decidieron levantarse para ponerle los últimos detalles a la casa de Quackity.

-Quacks, después de que terminemos la casa ¿Volverás a vivir aquí? Digo, obvio es tu casa, solo que es un poco raro ya que estuvimos mucho tiempo viviendo juntos.-

-Oh... que gran pregunta hiciste ehh, mhmm, yo creo que me quedaré un rato más en tu casa- DIGO, porque después tengo que acomodar un chingo de cosas y quien sabe alguien me explota de nuevo la casa pero estoy ahí adentro y termino muriendo ¿Esta bien para ti?-

-¡Claro! Yo no tengo problema, es más, me alegra que te quieras quedar más tiempo conmigo.- el castaño soltó una gran sonrisa mientras decía esas palabras, lo que logro que el pelinegro también sonriera y de paso se sonrojara un poco.

Su momento no duro mucho, porque un oso hiperactivo llegó a arruinarles el ambiente con algo importante (para él) que decirles.

-¡Oigan! Vosotros no me queríais creer con que estaban casados ¡Pero tengo pruebas! Miren.- Rubius extendió su mano entregándole a Quackity y a Luzu unas fotografías.

-¿¡Que puta mierda es esto?!- gritaron ambos chicos al ver las fotos, pues en la fotografía se encontraba Luzu con un traje abrazando con felicidad a Quackity que llevaba un vestido de novia y también se encontraba feliz.

-¡Seguro editaste la imagen cabrón! ¡Esta mamada yo no me la creo!-

-¡Que te digo que es real cabrón! ¡No te estoy vacilando!-

Ambos chicos estaban peleando pero de fondo se veía a Luzu con los ojos brillosos y sonrojado, pues ver a Quackity vestido de novia era algo que no sabía que necesitaba pero que agradecía verlo. Ver la imagen lo ponía emocionado, nunca lo iba a borrar de su mente.

El castaño solo decidió quitar esa imagen mental de su mente y reclamarle a Rubius sobre la fotografía, Dios, deseaba con todas sus fuerzas ver ahora mismo al pato con ese atuendo, pero tendrá que esperar un poco más.

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Este capítulo es la calma antes de la tormenta, disfrútenlo mientras puedan